Réquiem por la Dra. Teresa Sánchez Mozo, gran dama de la Salud Pública española

Por Javier Segura del Pozo

Médico salubrista

 Hace muy pocas horas que me he enterado de la muerte de Teresa y espero que la escritura me ayude a arrancar con este duelo. Todavía no lo he empezado. Me ha pillado demasiado de sorpresa. Aunque conocía los problemas de salud de Teresa, acababa de verla hace apenas un par de semanas en las jornadas de AMASAP, donde me habían invitado a dar una conferencia, en el contexto de una mesa de debate sobre la salud pública y el sistema sanitario. Entonces la vi bastante entera, aunque limitada sensorialmente. Cada vez estaba más limitada. Cada vez era más difícil comunicarse con ella, si no era por la escritura.

Retrato de la Dra. Teresa Sánchez Mozo

Durante el debate que siguió a la conferencia, hice una referencia  indirecta a ella, al hablar de los presentes entre el público que habían contribuido de manera notable al inicio de la reforma de la Atención Primaria en España. Tal vez, tenia que haber hecho una mención y un homenaje más explicito a su figura (como hice, afortunadamente, en otras ocasiones anteriores). Se lo merecía. Ella seguía mi intervención con gestos afirmativos de la cabeza, aunque yo sabía que solo podía leerme los labios.

 Se acercó a mí al final del acto y me hizo algunos comentarios cariñosos. Entre ellos, se disculpaba de que no había avanzado lo suficientemente con los deberes que le había puesto. Pero que estaba en ello. ¿Qué era esto de los deberes?

 Conocí a Teresa en 1981, cuando estaba realizando la residencia de Medicina Familiar y Comunitaria (MFyC) en el hospital 12 de Octubre. Los residentes de este hospital tuvimos la enorme suerte de contar con el equipo del Centro Especial de Medicina Comunitaria (CEMC), para formarnos en Salud Comunitaria. Para hacer real el segundo apellido de nuestra especialidad. Teresa era la directora del centro, del equipo del mismo y, además, la Alma Mater del proyecto. Para mí este encuentro significó mucho en mi carrera profesional. Fue el encuentro con la Salud Pública, y con las Ciencias Sociales aplicadas a la salud, incluida la Psicología Social. Con una idea de Salud Comunitaria, de trabajo en equipo y en una institución. Una forma gozosa y atractiva de desarrollar mi vocación social y política. El encuentro determinó en gran parte mi dedicación posterior a la Salud Pública.

 Teresa fue pues mi maestra. Como lo fueron entonces Luis, Mariví, Armando, Emilio, Lola, Pepa, Adrían, Carmen, Marían, Loli, Federico, Milagros, Victoria, Antonio, Matilde, Carmen y muchos más. Antes de convertirse en compañeros. Algunos, en amigos. Alrededor del CEMC nos conocimos y agrupamos residentes y estudiantes que luego pasariamos muchos años juntos, tejiendo proyectos comunes, como Luis, Rosa, Mercedes, Honorato, Rosa, Mercedes, Ramiro, Jordi, etc. Teresa fue un gran referente y un modelo admirado durante esa época. Nos apoyó a los residentes en la lucha por las primeras Unidades Docentes de MFyC. Por los primeros centros de salud. Todavía recuerdo su visita al Colegio de Médicos donde estábamos encerrados.

 Después el equipo se disolvió y el centro se cerró un poco más tarde. Yo no participé en ese epílogo. Estaba ya en otra historia (el inicio de mi carrera como salubrista). Poco después, muchos de los que nos conocimos allí, volvimos a trabajar juntos. Especialmente en la incipiente Administración de Salud Pública de la Comunidad de Madrid, donde también volví a trabajar con Teresa, alrededor de la reforma de la Atención Primaria del medio rural. Primero, en General Oraá, luego en O´Donnell. Luego trabajamos separados por la distancia, en diferentes servicios de la misma institución, hasta su jubilación. El CEMC se había quedado lejos, en el lejano pasado. Tenia la sensación incluso que volver a mencionarlo podía ser incómodo para algunos. Era agua pasada.

 Pero la verdad es que para mí el CEMC había sido importante. Y el CEMC era Teresa. Y lo mejor de Teresa, para mí, era el CEMC. Era el gran proyecto de Teresa. Ahora que me acercoa la jubilación (¡o no!), tengo claro que se tiene solo uno o dos proyectos profesionales grandes en la carrera. El Proyecto. Y el proyecto del CEMC, desde mi punto de vista, había sido claramente la semilla de muchos de los desarrollos profesionales e institucionales posteriores que conocí y en los que participé. Una fuente abundante y generosa de conocimientos y métodos que aplicaría posteriormente. Que sigo aplicando. Estaba además en el origen de un importante núcleo fundador de la Salud Pública regional madrileña de nuestra transición democrática. Y de muchas cosas más. El CEMC era un guiño común. A muchos nos unía ese recuerdo común del CEMC. Aunque enriquecido con muchos más posteriores. Sin embargo, a veces dudaba si no era una cosa mía. Que tal vez no había tantos que compartían esta sensación. Sentía que faltaba un reconocimiento de esta aportación histórica. Y de lo que en ella le tocaba a Teresa como directora del centro.

 Años después, cuando mencionaba al CEMC en auditorios cada vez más jóvenes (porque yo me iba haciendo más viejo), las caras de extrañeza eran más numerosas. Los jóvenes salubristas españoles no conocían esta valiosa experiencia. Tampoco la contribución pionera de Teresa y de su equipo. Además,  me di cuenta que  no se había publicado casi nada sobre la experiencia. Tal vez, incluso nada. Así se lo manifesté a Teresa, animándola a que escribiera sobre ella. Además, me parecía que a ella le podía venir bien escribirla. Me daba la sensación que, entre todos los de su equipo que vivieron esa época, tal vez ella era la que tenia más pendiente un buen cierre.

 Ella me agradeció este reconocimiento y me pidió ayuda para escribir. Temí que fuera una delegación demasiado pesada. Una especie de herencia o testamento, que no iba a poder asumir y que además no me correspondía. Como editor y escritor del blog, me puse en el papel de periodista y le propuse hacer un artículo corto para el blog, en forma de una entrevista. En forma de preguntas y respuestas, poco a poco iría a reconstruirse la historia. Su historia, vista por ella.  Le envié una serie de preguntas. Estos eran los deberes que antes mencioné. Paralelamente, ella rebuscó documentos en archivos viejos.

 Ahora cuando escribo estas líneas soy consciente de que conocía muy poco de la vida personal de Teresa. No se siquiera a qué familiar le voy a dar mañana el pésame. La conocí siempre alrededor de la profesión. Solo sé que la voy a echar mucho de menos y que me da mucha pena que haya muerto. Es un gran desperdicio esta perdida. Teresa tenía muchas cosas que dar y que enseñar. La mayor crueldad es que la enfermedad le había privado de esa potente voz y de la capacidad de comunicar todo su saber y su experiencia. ¡Quitarle la palabra a Teresa!

 En los últimos años la veía a ratos en muchos sitios. En muchas luchas y trincheras: se asoció a AMASAP, estaba presente en asambleas del 15-M, en jornadas de debates, en congresos, en manifesatciones, etc. Luchando también contra el reto de sus propias limitaciones funcionales. Estaba rejuvenecida por la rabia ante el acoso progresivo a lo público. A la Salud Pública, también. La Teresa rebelde. Volvía a ser la Mafalda que conocí en su pelea por el CEMC y otras posteriores. La pionera de la salud comunitaria, de la interdisciplinariedad, de la participación comunitaria. La que contribuyó, junto con una generación de jóvenes preventivistas, a cortar con la casposa y académica Higiene Pública franquista, todavía anclada en la bacteriología, en el hospital y en la prevención individual. Y plantear y empujar alternativas.

 Unos destruyen y otros construyen. Teresa era de los segundos. Estuvo presente en muchas reformas. En algunas, en primer plano, y en otras, en la segunda o tercera fila, pero siempre estaba allí. Ella sabía reconocer muy bien a los cocodrilos. Los de antes y los de ahora, que son los mismos. También sobre la necesidad de persistir en desecar la ciénaga.

 Mi mejor homenaje será no olvidarla. Como al resto de mis muertos. Se ha muerto sin completar “los deberes”. No nos enteraremos bien de esa historia. No se si a otros les interesaría completarlos. Ya se que no es lo mismo. Pero por si acaso: aquí abajo están las preguntas que le hice a esta gran dama de la Salud Publica española y el penúltimo cruce de correos sobre «los deberes», la memoria histórica y su necesidad de defenderse ante algunos comentarios despectivos del proyecto (la habían llamado «psicodélica» en una tesis sobre la historia de la MFyC).

También ofrezco el blog para quien quiera escribir algo sobre ella.

 ¡Descansa, Teresa! ¡Hasta siempre!

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8 de mayo de 2012

 Querida Teresa,

 Acabas de irte de tu visita a mi lugar de trabajo y quería concretar lo que hemos hablado:

 1º Creo que deberías «tirar del hilo» para dar respuesta a  tu inquietud (comprensible) de que no hay nada escrito sobre la experiencia del Centro Especial de medicina Comunitaria 1º Octubre», plantándote escribir un texto corto (2 o 3 paginas) que se envíe para su publicación en forma de articulo a una revista profesional (ejemplo, Gaceta sanitaria, Rev española de SP, Revista Comunidad del PACAP, etc ). Así, con metas mas modestas, no te daría tanta pereza empezar y podría servir como una primera tirada para ver si se consigue un efecto bola de nieve.

 2º Sugiero que este texto inicial lo hagas recircular entre las personas que estimes oportunas (por ejemplo, aquellas que tuvieron que ver con el centro o con el periodo), invitándolas a dar su opinión y si quieren aportar algo. No tienes nada que perder.

  3º Aunque no lo acepten en las revistas, se puede editar en nuestro blog «Salud Pública y algo más» que tiene una buena situación en Google. De tal forma que si alguien en el futuro quisiera saber algo más del centro, hubiera la posibilidad de que apareciera tu articulo en la red.

 4º Para hacerte más fácil escribir estas 2 o 3 paginas, imagina que soy un periodista que te entrevista: contéstame por escrito a las siguientes preguntas:

 A) ¿Quien te encargó el proyecto del centro, cuando y en qué consistió el encargo?

B) ¿Puedes resumir los objetivos que se planteó el centro en su inicio? ¿Porqué se llamaba Centro Especial?

C) ¿Cómo recolectaste el equipo de trabajo? ¿Quien lo formaba? ¿Qué tenia de original? ¿Cómo os organizabais?

D) ¿Qué territorio cubríais?

E) ¿Qué programas y actividades ofrecíais?

F) ¿Que alianzas establecisteis (o no pudisteis establecer) con el hospital, con los centros de salud, con el ayuntamiento, con otros dispositivos, con las asociaciones, con la población, con la unversidad, etc.?

G) ¿Qué papel jugó en la docencia (de los residentes, estudiantes de enfermería)? ¿Como contribuyó al inicio de la reforma de la Atención primaria en Madrid y de la formación de la medicina familiar y comunitaria?

H) ¿Puedes comentarnos algo sobre el momento histórico y político en que fue creado y por el que atravesó a lo largo de su andadura? (Por lo que recuerdo estuvo a caballo de dos gobiernos (UCD y PSOE) y en el momento en que se gestaron las leyes fundacionales de la sanidad publica (decreto de EBS, ley régimen local, LGS; etc)

I) ¿Cómo fue modificándose el proyecto a lo largo de su desarrollo (en relación a sus objetivos o metas iniciales)?

I) ¿Cuales son los tres aspectos más positivos del desarrollo del proyecto? ¿Sus principales aportaciones a la salud comunitaria de la epoca? ¿Que rescatarías como un legado para la posteridad?

J) ¿Cuales son los tres aspectos mas negativos?

K) ¿Recuerdas los principales hitos de su desarrollo?

L) ¿Cuanto tiempo estuvo funcionando el centro? ¿Porque se acabó el proyecto? ¿porque no se crearon otros centros similares en España?

M) ¿Crees que se conoce suficientemente la experiencia? En el caso en que no, ¿a que crees que es debido?

N) A la luz de tu muy rica y valiosa experiencia, ¿que consejos les darías a las nuevas promociones de médicos y enfermeras con vocación comunitaria?

 Con esto tienes para 2 o 3 paginas, y más…¡Animo, valiente!

 Un abrazo

 Javier

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9 de mayo de 2012

Querido Javier:

Como te vas mañana a Granada, te envio el titulo de la tesis doctoral, que se hizo en la Universidad de Granada en el 2007, en el Departamento de Salud Pública e Hia de la Ciencia, dentro del Programa de «Salud, Antropologia e Historia» por la hoy Dra , Angélica Fajardo Alcántara, con el titulo. <<El proceso de especialización en Medicina Familiar y Comunitaria en España>>  Cambios profesionales en Atención Primaria en la década de 1980. Esta investigación se hizo bajo la tutela del catedrático de Hia de la Ciencia: Esteban Rodriguez Ocaña y los Doctores Manuel Galvez y Teresa Ortiz, y me figuro que habrá referencia de Angélica Fajardo, en la Escuela de Salud Pública Andaluza o sino a través de Ana Delgado especialista en Preventiva y asociada a la primera Unidad de Formación de MFyCdel Centro de Salud de la Cartuja de Granada.

Bueno como vés ya has empezado a liarme en este tema de recuperación de lo que pasó de 1980-1984 en el sur de Madrid.

Un abrazo de la denominada «psicodélica» en la tesis antes citada:

Teresa Sánchez Mozo

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15 de mayo de 2012

Hola Javier: Perdona que todavía te conteste hoy. Me has puesto a tiro lo de obligarme a escribir, con tantas preguntas en tu disfraz de periodista y todas tan pertinentes para abordar algo que ocurrió hace tanto tiempo.

No te he contestado antes, aunque si te he leido y me he preparado para contestar. Pero eeste fin de semana he tenido a la familia aquí, porque me tocaba el 11, la consulta de resultados de las pruebas que me han estado haciendo para la revisión de mi cáncer y de sus secuelas. Por cierto estoy para seguir viviendo otro rato.

Ayer lunes estuve con Marta y Carmen, fueron encantadoras conmigo, pero yo como buena sorda les dí poco espacio para que hablaran ellas. Así que tend´re que volver a verlas otro día, cuando conteste a tu entrevista.

Un abrazo. Teresa

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16 de mayo de 2012

Hola Teresa,

 Lo mas importante de lo que me cuentas es que «tienes cuerda para rato». Me alegro mucho. Lo otro es muy secundario.  Si han pasado casi 30 años sin haberle dado a la pluma, ahora tómatelo con calma y saborealo. Que tenga más de placer que de sufrimiento.

 Un abrazo

 Javier

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44 comentarios

  1. La conocí en contados encuentros fugaces y me impresionó su fuerza, su actitud constructiva, su sentido de destino compartido y solidario. Javier lo describe muy bien en estos muy merecidos elogios. Espero que lleguen a sus familiares así como nuestro sentimiento de aflicción.

  2. Fuimos compañeros en las oposiciones a plazas no escalafonadas de jefes de sección de epidemiología al servicio de la sanidad nacional o algo así y fundamos la SEE. Luego nos vimos menos. Hace unos meses por última vez. Luchadora todavía aunque cada vez le costara más y cariñosa como nunca. No lo esperaba. Lo siento. Un abrazo a todos sus allegados.

  3. Soy Marta, soy su sobrina,soy su familia y estoy muy triste.La enfermedad la dejó sin oído pero no sin palabra.La vimos luchar, pelear y esforzarse hasta al final y por eso no esperábamos que su fuerza se acabase nunca…pero viendo todas estas muestras de cariño,mi madre,mis tíos,nosotros sus sobrinos y los numerosos amigos que la han acompañado todos estos años, sabemos que se ha quedado con nosotros.

    Te quiero,Teti

  4. Estimado Javier, respondiendo a tu ofrecimiento para publicar algo sobre Teresa mw gustaría mandarte un artículo ad hoc para que valores su publicación. Dime cómo te lo hago llegar

  5. Soy CArmen,su sobrina, primero quiero dar las gracias por todas las muestras de cAriño y por este gran reconocimiento bien merecido.Siempre ha sido un ejemplo para mi tanto de superación personal como profesional.Ojalá algún día pueda llegar a ser como ella o por lo menos parecerme a ella.Mi vida siempre estará marcada por ti.Si en.lo.profesional eras grande en.lo.personal mucho más.
    Tr quiero,teti

  6. Como miembros de amasap, disfrutamos de la compañía de Teresa en todos los actos de nuestra asociación, como una gran mujer luchadora, siempre participando y dejando comentarios que invitaban a la reflexión.
    Aunque personalmente la conocimos tarde, para nosotras mereció la pena.
    Pilar Carrasco Garrido y Ana López de Andrés.
    Dpto. de Medicina Preventiva y Salud Pública
    Universidad Rey Juan Carlos

  7. Buceando en internet, he encontrado este artículo «A nuestros padres, a nuestros abuelos», escrito por Teresa en febrero 2010 y publicado en «El Progreso», en memoria de su madre Teresa Mozo García. Creo que es interesante para conocer mejor su biografía:

    http://elprogreso.galiciae.com/nova/47923.html

  8. Estimado Javier, gracias por este espacio que nos dejas para poder «rendirle» un pequeño homenaje a Teresa, o Teté como yo la conocí. Mi encuentro con ella se produjo en el terreno personal/familiar: a través del hijo de unos grandes amigos suyos…Han pasado 14 años desde entonces y, aunque mi relación con esta persona se terminó y en este último año no supe nada de Teté, ayer cuando me llamó para contarme su marcha a mi cabeza acudieron gratísimos recuerdos compartidos con ella (especialmente ese viaje a Lugo donde «confrontamos» la visión gallega, castellana y aragonesa de la familia). Quisiera compartir mi agradecimiento por haber tenido la suerte de conocer a esta gran persona. Mi más sincero cariño para sus familiares y amigos.

  9. Los que la conocimos compañeros del Centro Nacional de Epidemiologia sintimos la perdida de Teres y nos acordaremos de ella cunado no la veamos en las actividades y reuniones etc.

  10. Quiero unirme al reconocimiento de la altura humana y profesional de la Dra. Teresa Sánchez Mozo. Tuve el honor de conocerla en los comienzos de mi carrera profesional en el campo de la Salud Pública y desde un primer momento me impresionó. Su andadura ha sido un ejemplo de fortaleza y compromiso, de lucha y honradez.

    Puedo asegurar que «su proyecto» sigue vivo 30 años después cuando veo cómo trabajan y con qué horientación lo hacen a compañeras como Milagros que tuvo la oportunidad de formarse en el CESC. Éste es parte de su legado.

    Su partida es una gran pérdida para todos (para los profesionales, la Salud Pública y para el conjunto de la sociedad) en una época en que personas como ella nos son tan necesarias.

    Que descanse en paz.

  11. Escribo estas líneas como si estuvieras delante, porque todavía no puedo hacerme a la idea de que ya no estás.

    Para no dejarme llevar por la tristeza, pienso en que has vivido la vida que quisiste llevar. Viajaste por todo el mundo y conociste a personas de múltiples ámbitos y nacionalidades. La mayoría de ellas te recuerdan estos días.

    Porque pocas personas pueden presumir del respeto y del cariño que tienes de tus colegas profesionales, amigos y familia. Ganados a pulso por los valores que siempre atesoraste, como la integridad, la coherencia y el compromiso. O ese punto rebelde, tan necesario hoy en día. Y por supuesto, tu generosidad, siempre interesándote por los demás.

    Hoy me vienen a la cabeza las historias que nos contabas cuando éramos pequeños sobre tus viajes a la India, al Amazonas, etc. Los regalos exóticos que nos traías de todos esos lugares. Y los libros de aventuras de Emilio Salgari que me recomendabas por aquél entonces. Sin duda alguna todo aquello influyó en mi, descubriéndome el poder de la curiosidad y la imaginación. Quizá las cualidades más valiosas que pueda tener hoy en mi vida profesional, como Ingeniero.

    Siempre viviste de pie, con total independencia y autonomía. A pesar de la enfermedad, que superaste. Y de las secuelas, contra las que peleaste y luchaste hasta el final con un coraje y una fuerza de voluntad inquebrantables. Y así te has ido, sin inclinarte y con las botas puestas.

    Un ejemplo a seguir para todos los jóvenes.

    Un beso allá donde estés.
    Fuco.

  12. Son muchos los recuerdos que tengo de Teresa, desde que era un recién licenciado y me presto ayuda para desarrollar todo el trabajo de campo de mi tesis doctoral, desde aquella recién creada Consejería de Sanidad, en la C/ Odonell. A cuando ya era ayudante en la UAM y me pidio que le echase una mano con las clases de medicina preventiva de sexto curso del Gregorio Marañón. Hasta los últimos encuentros cuando presento su tesis doctoral o en la Idrección Gral de Calidad, ahora de Atención al paciente. En todos estos años, casi 30, aprendí de ella el saber dar y darse a los demas sin esperar nada a cambio, su generosidad y su sensibilidad hacia los problemas de salud del conjunto de la población y sobre todo de los mas necesitados.
    Teresa te echaré de menos y siempre estarás en mi corazón. Gracias por todo.
    Angel Gil

  13. Hola Teresa, soy la becaria, la del maletín.

    Hoy no he podido ir a despedirte, pero si supieras por qué, estarías muy orgullosa, estaba en el Congreso Mundial de Prevención de Diabetes, hablando de promoción de salud, de lo que aprendí contigo.

    Mi vida profesional, y por lo tanto personal, hubiera sido otra de no haber sido por aquel extraño, sicodélico quizás, pero sobre todo apasionante Centro Especial de Medicina Comunitaria que apareció justo al lado del Pabellón de Docencia. Algunos estudiantes nos fuimos aproximando con curiosidad y comenzó una historia que sigue hasta hoy.

    La última vez que hablamos tranquilamente, en el mes agosto, le pregunté: «¿No te cansas, Teresa?.- ¿No te cansas de pelear?.-«Nunca, tengo demasiadas cosas que vivir y que aprender».

    No tengo más palabras, solo la pena de no haberle dicho más claramente lo importante que fue para mí. Aunque creo que ella lo sabía.

    El abrazo más fuerte de todos los que nos dimos en los últimos años, Señora Directora

  14. No recuerdo el año, el mes o el día en que conocí a Tete, mi sensación es que la conocía de toda la vida. Siempre amable, lista, cariñosa, alegre, especial aunque para mi lo más brillante de ella era su entusiasmo, entusiasmo por saber, por participar, por escuchar, por ayudar, por vivir.
    Yo también estoy triste, triste porque te hayas ido, por Fuco, Marta, Pili y Fran que tanto te querían, porque echaré de menos cuando llegue el verano no ir a verte un ratito para que veas lo rápido que crecen Flavia y Jacobo y echaremos de menos tus besitos mudos desde la escalera.
    Allí donde estés te mandamos un beso enorme, siempre, siempre te recordaremos.

  15. Todavía no nos hacemos a la idea de que ya no te podamos ver
    y disfrutar de tu cariño y sensibilidad.
    No te hemos conocido profesionalmente,pero si sabíamos de tu entereza y fortaleza para defender tus opiniones y tus ideas
    Recordamos largas discusiones,apasionadas y vibrantes sobre muchos temas.
    Dentro de unos días bautizan a nuestra última nieta y te ECHAREMOS MUCHISIOMO DE MENOS,esta vez no vas a acompañarnos,siempres estuvisteis con nosotros en los bautizos de nuestros cuatro nietos anteriores.
    Siempre estarás con nosotros en nuestro corazón.
    Recordamos los muchos momentos difíciles que pasamos y siempre estuvisteis cerca de nosotros con tu apoyo y cariño.
    Te querremos SIEMPRE

  16. Se fue Tete y con ella se va mucho de mi infancia y primera juventud. Me quedo mudo porque no encuentro suficientes palabras en el diccionario que compensen el cariño, la ternura , la generosidad o la complicidad con la que siempre me honraste en esta relación de sobrino postizo.Sinceramente me cuesta pensar que ya no volveremos a vernos o escribirnos porque siempre pensé, a pesar de todo, que las personas así simplemente no se mueren.
    Tete, te echare mucho de menos
    Cobo

  17. Teté siempre estará unida a la historia de mi vida, especielmente cuando éramos jóvenes, viajábamos, lo mismo al Portugal de la revolución de los claveles que a la Praga de los setenta, leíamos. Siempre combativa, culta, vital, interesada por todo. El mundo con ella estaba siempre a mano, próximo. La echaremos de menos y envío a su querida familia, siempre acogedora, un abrazo de corazón.

  18. Apareció Teté en el camino de mi vida hace ya 45 años. Nos conocimos en Santiago cuando ella estudiaba medicina y yo biológicas. Compartimos durante cinco años pensión, piso, cafés, cines, paseos, asambleas, manifestaciones…y carreras delante de los grises…compartimos el famoso mayo del 68 que nos grabó a fuego, nos ayudó y condicionó nuestro futuro ser y estar en la vida. No hubo vuelta atrás y fuimos conscientes de ello.
    Teté tenia ya muy claras sus prioridades, se entregó totalmente a su profesión y ésta se la llevo a Madrid y yo me quedé en Galicia, aunque esto no impidió que nuestra amistad continuase. La distancia no puso fin a nuestro encuentro.
    Seguimos viéndonos y compartiendo momentos de profunda amistad, pues para mi Teté era mi AMIGA, amiga con la que hablaba a corazón abierto. Y Madrid, A Coruña, Cesuras, Lugo, Pontevedra, París o Venecia fueron testigos de nuestras largas conversaciones de AMIGAS
    Hablábamos de nuestras profesiones, de nuestras amigas comunes, de nuestras queridísimas familias, de nuestras hermanitas del alma, de nuestros amores y desamores…de las injusticias sociales, de la brecha Norte-Sur…pero sobretodo compartíamos nuestros pensamientos propios o elaborados y nuestros sentimientos más íntimos. Con frecuencia me leía sus escritos en prosa poética y yo le regalaba algún dibujito.
    En fin, hablábamos de nosotras, por eso reímos y lloramos mucho juntas…porque nos conocíamos “enteras”.
    Teté se ha ido… y cuando una amistad es profunda y forma parte del camino de tu vida tanto tiempo, una siente un desgarro de dolor intenso con su ausencia. Siento que un pedacito de mí misma se ha muerto.
    …Así es el camino de la vida, compartir, disfrutar, amar, querer, añorar, llorar…y reír.
    Y con el reír y disfrutar quiero recordar a mi amiga Teté. Con el reír y disfrutar de los últimos días compartidos en A Coruña este verano frente al mar del Orzán.

    Teté querida, ojalá pudiera decirte que me mires desde el Cielo, pero tú y yo lo hablamos claro muchas veces…y lo sabemos, vivimos y dejamos de vivir…y sólo eso es cierto.
    Yo seguiré “caminando mi camino” y tendré, desde la ausencia, que elaborar el duelo.

  19. Hace varios días que me siento dolorido por la muerte de Teté, no sabía muy bien que hacer hasta que, cuando hace un rato una de sus sobrinas, Carmen, me habló de la existencia de esta página, pensé que era el lugar adecuado para hacer mi pequeña aportación.
    No quiero ni puedo escribir cartas tan bellas como la de Celsa, me conmovió y coincido en tantas vivencias con ellas que no quiero repetirlas. Lo que quiero aportar es la música que me serena y calma mi pena y que sé que a Teté le gustaba

    http://www.youtube.com/watch?v=q5Y2B55nKZY

  20. Conocí a Teté en Santiago hace ya 35 y ….muchos años. cuando ella estudiaba medicina y yo Derecho. Compartimos durante dos o tres años piso, cafés, excursiones y cenas en «La Ramallosa».
    Hace unos pocos años, nos volvimos a reunir en Santiago «las Chicas independientes del Piso», y fue una experiencia única volvernos a ver casi todas, despues de tanto tiempo.
    La volví a ver un puñado de veces más cuando venía a Coruña y me avisaba Celsa.
    Un abrazo muy fuerte Teté !!

  21. El artículo que Javier Segura ha dedicado al recuerdo de Teté me ha emocionado por muchas razones: una de ellas ha sido porque me ha permitido saber que , además de considerarla una amiga entrañable, con la que hemos compartido buenos momentos , conversaciones profundas , risas, paseos y vinos, he tenido la infinita suerte de conocer directamente a una de las pioneras en el desarrollo de la Atención Sanitaria tal cual la conocemos en España y que ahora nos están ¡¡¡robando!!!. Gracias , Teté. Como ya te he dicho en alguna ocasión, solo las personas como tú merecen mi admiración. Y, además tú, por ser amiga , todo mi amor.

  22. Para Teresa
    Te conocí hace ya más de dos décadas.Volví a encontrarme contigo en Amasap. Siempre has sido un referente a nivel profesional y sobre todo a nivel personal. Coherente, sencilla, cercana siempre, valores que, tanto echamos de menos, en tí afloraban siempre. Ejemplo de valentía y superación.
    Gracias por todo,

  23. Su última admiradora
    Quedó en llamarme hace 10 días, ahora entiendo que no lo hiciera. A la salida de la Conferencia de AMASAP, nos liamos hablando al menos 10 minutos en la puerta de un posible artículo conjunto sobre el CECM y el Centro integrado de Mahadahonda (dónde yo aprendí a montar en bici sin manos a los 10 años). Comentamos con cariño los sobrenombres compartidos a las investigadoras progresistas (a ella «psicodélica», a mí «galáctica». Gracias, Javier, por avisarnos de su muerte y de su enorme fuerza motor como innovadora social, tanto en la implantacion de la reforma de la primaria (impensable sin luchadores profesionales de altura como ella) como en la frustrada incorporación de la comunitaria -que por ser más progresista que la España post-franquista, quedó pendiente para el siglo XXI-.

  24. Teresa fuiste mi profesora de Medicina Preventiva y Salud Publica en el Gregorio Marañón hace muchos años donde enseñabas que la medicina se hacia con la colaboración entre disciplinas, que era muy importe prevenir, rehabilitar..planificar, ir mas allá de los servicios y los hospitales, contar con pacientes, las familias, la sociedad. Todo eso lo pudimos aplicar en La Coruña con Carmen y el grupo del Materno .Alli volvimos a encontrarte con Pili y Fran. Te recordaremos siempre.

  25. En Consejo de Departamento celebrado esta mañana en la Facultad de Medicina de la UCM se ha hecho constar, antes de comenzar el primer punto del orden del día, la tristeza unámime de todo el Departamento por la irreparable pérdida de nuestra queridisima compañera la Profª Dra Doña Maria Teresa Sánchez Mozo quien ha dedicado tanto tiempo y de tanta calidad a la formación en Salud Pública de numerosas promociones de estudiantes,a quienes siempre estuvo cercana y supieron reconocer su esfuerzo y dedicación nombrándola Madrina en su Promoción.
    Sus compañeros queremos transmitir nuestro sincero y profundo afecto a la persona que tanto nos ha brindado en lo profesional, pero lo que es más importante, TAMBIÉN EN LO HUMANO.
    GRACIAS Y HASTA SIEMPRE QUERIDA MARIA TERESA

  26. Se ha ido. Se nos ha ido la hermana mayor de La Milagrosa. Cuando se murió tu madre escribiste como nuestros padres supieron hacer una gran familia y como con su honestidad profesional fueron un gran ejemplo, que tu continuaste, y que nos llevó a seguirlos
    Hoy por la tarde te despedimos. Abrazar a tus hermmanos va ser una tarea muy difícil. Te haremos un sitio en nuestro corazón junto al resto de madres, padres y de tus hermanos que nos dejaron y recordaremos para siempre tu sonrisa. Moitos bicos.

  27. Lo que es la vida!! cuando te das cuenta de lo rápido que pasa a veces y que te has dejado ‘alguna cosa sin hacer’. Hoy, cuando me he enterado que Teresa había fallecido, el corazón ‘me ha dado un vuelco’ y recapacitando me he dado cuenta de que nunca le dije que, gracias a ella, me enganche en el mundo de la Salud Pública. Yo estudiaba Medicina en el HGU Gregorio Marañon y en 6º curso Teresa nos impartió la asignatura de M Preventiva (a las 8:00 de la mañana, que yo creo que ibamos a clase solo Teresa, algun despitado y yo) y me fue enganchando hasta dirigirme el trabajo de mi tesina de licenciatura. Después de esto seguimos cada una con su camino y nos encontrabamos en los pasillos de O’Donell (cuando al cabo de unos años aprobe la oposición de la CM) o más tarde en distintos actos relacionados con la Salud Pública; nos saludabamos con cariño y alegria por vernos de nuevo pero NUNCA le dije que, seguramente, y GRACIAS A ELLA, me empeñe en formarme para después trabajar en ‘lo que más me gusta’.
    Aunque sea tarde, GRACIAS y Hasta Siempre.

  28. Teté, me cuentan que te fuiste discretamente, como tratando de no molestar a nadie, como viviste. Me quedo con una deuda impagada e impagable. Te tuve cerca en las grandes decisiones profesionales de mi vida. Gracias a ti se me abrieron los ojos a la salud pública, finalizando la carrera en Santiago. Gracias a ti hice la maleta que tenía que hacer en el momento preciso. En nuestros encuentros fugaces siempre encontrè en ti el consejo y el respaldo de la amiga-maestra. Tu vida y tu conducta fue, es, un referente de lucha, honestidad, fuerza, determinación y libertad.
    Hasta siempre, hasta cualquier día.

  29. Me enseñaste, antes de que yo me dedicara profesionalmente al campo de la salud, que no puede haber salud si no hay justicia social, y que lo que más mata no son las enfermedades, sino la pobreza, la incultura y las desigualdades sociales.

    Me empujaste, me abrazaste, me sacaste los colores en público, me hiciste soñar con tus mil aventuras y viajes, discutimos en cientos de comidas y cenas, reimos y lloramos juntos como una más de la familia… porque lo eres.

    La tristeza pasará y sé que prevalecerá el respeto, la admiración y el placer de haber disfrutado de tu compañía casi toda mi vida…

    Nos dejas en un momento en el que, si hubieras podido, habrías dado guerra. Mucha, la que la situación requiere.

    Que la tierra te sea leve Teté que, aquí, seguiremos en la lucha por conseguir un mundo mejor.

    «Únete a la batalla en la que ningún hombre fracasa, porque aunque desaperezca o muera sus actos prevalecerán» (William Morris).

  30. Adiós, Teresa.

    Soy uno más de los que te deben haber dedicado su vida profesional a la salud pública; cuando nuestro común amigo Quique Gil, (que también, como tú, nos dejo huérfanos no hace mucho) me llamó al Ministerio para pedirme que le ayudara a coordinar los asuntos de salud pública en la Unión Europea en la que hacía poco que habíamos ingresado y que nos tocaba presidir, me dijo que valoraba especialmente mi experiencia en el Centro Especial de Medicina Comunitaria, la forma en que trabajamos la salud pública desde lo interdisciplinar y los programas de salud con participación comunitaria.

    Nunca he olvidado que, sin conocerme, tuviste la enorme generosidad de pelear con la burocracia para conseguir que formara parte del equipo del CEMC desde su inicio. Pero no sólo eso; tuve el enorme privilegio de compartir contigo, y con el resto del equipo, todo el recorrido de aquel proyecto que, para desgracia de todos, quedó en eso en proyecto que no dejaron que se desarrollara por completo; cuando digo de todos, no me refiero sólo a los que participamos en él, sino en la gente que debería haberse beneficiado de que se desarrollara y se implantara por completo. Bien es verdad, como dicen muchos de los que han escrito antes que yo, que fue simiente de profesionales “diferentes”, que entienden la salud pública de “otra forma” gracias a ti. Esa es tu herencia.

    Por lo que a mí me toca, hoy que ya estoy jubilado, hago declaración expresa de que lo que sé y lo que he hecho en salud pública lo debo casi por completo a lo que aprendí y lo que trabajé en el CEMC contigo y con el resto del equipo.

    Ahora que ya no estás lamento profundamente no haber mantenido mejor el contacto, que nos hayamos visto muy pocas veces desde que aquello terminó, que, como te propuso Javier, no hayamos sido capaces de ayudarte a escribir sobre la experiencia del CEMC, tarea de la que, recurrentemente, hablábamos algunos del viejo equipo cuando nos veíamos.

    Pero hoy, que corren vientos que desmantelan todo lo público, especialmente en la sanidad madrileña, los que quedamos para ver el desastre te echaremos muy en falta, echaremos en falta tu saber, tu coraje y tu ejemplo.

    Gracias, Teresa.

  31. Fui su residente de Medicina Preventiva y Salud Pública en 1978,su admiradora y su amiga durante todos estos años aunque apenas nos viésemos.
    Ella me transmitió la pasión por nuestra especialidad.
    Como un buen músico supo tocar a lo largo de su carrera todas las teclas de esta maravillosa profesión que compartimos.
    Me puse en contacto con ella hace pocos meses para pedirle su autorización para insertar en la web de la SEMPSPH un recuerdo de su aportación a Sociedad (formó parte de su primera junta directiva)se mostró entusiasta y con planes de futuro .
    El día 15 presentando la web en la asamblea ordinaria de la SEMPSPH supe por las caras de alguno de los asistentes que acababa de morir .
    Sirva la web de homenaje de la sociedad científica que ayudó a fundar y consolidad .
    Personalmente mi cariño para su familia.
    La voy a echar de menos

  32. cuando me llamó Celsa para darme la noticia, estaba muy lejos de casa. Nada mas llegar abrí el viejo álbum de fotos de Santiago y allí aparecía Teteíña en medio del barullo del piso de estudiantes en el que compartiamos vida ¡ ocho chicas¡ Volvimos a vernos alguna vez, siempre para «echarnos unas risas» porque aunque supe de sus logros profesionales, para mí Teté siempre será la chica inteligente e irónica con la que podías hablar de lo divino y lo humano en todo momento. Hay una ausencia más en esas fotos del tiempo pasado. Deica logo Teté.

  33. Un día frío de otoño de hace años, Begoña, la hermana pequeña de Tete nos dejó. Ahora, también élla se ha ido en Otoño.
    Nos invade una sensación de orfandad, dolor, también de desamparo. Sufrimos por su familia.
    Y es, justamente, esa gran familia «Los Trallero» la que va a ocupar ese gran vacío con su amistad y cariño incondicional.
    Pili y Fran, Alberto, Paco, Juan,….todos; a todos los tendremos en los momentos importantes de nuestras vidas, siempre discretos, acogedores.

  34. La Junta Directiva de AMaSaP muestra su pesar por la pérdida que ha supuesto para la Salud Pública madrileña el reciente fallecimiento de Teresa Sánchez Mozo e informa de que ha organizado un acto en homenaje a su perfil profesional y humano al que son muy bienvenidos todos sus compañeros de profesión y familiares.

    Fecha: 29 de noviembre de 2012
    Hora de inicio: 16:30h
    Lugar: Aula del Centro de Diagnóstico Médico del Ayuntamiento de Madrid. C/ Montesa, 22. Metro Manuel Becerra

    Más información: http://www.amasap.es/?q=node/519

  35. Querida Teresa, dejas muchas huellas. Pues, como diría Amancio Prada, has sido Libre …(como arroyo que brinca de peña en peña…),… Buena… (como pan que no sabe su masa buena), ..Alta …(como chopo que al cielo se despereza), …Blanca… (como flor de azahares sobre la tierra), …ni de Dios ni de nadie…… ..ni tuya siquiera.
    Desde el hospital echaremos de menos a una gran compañera. Desde el barrio, como dice Pedrín, echaremos de menos a “esa amiga tuya que siempre me sonreía”.
    Un abrazo
    Paz

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