TRABAJO FIN DE…
Hasta hace unas semanas, exceptuando los miembros de la comunidad universitaria y los que terminaron sus carreras en los últimos años, poca gente sabía de la existencia de los trabajos fin de máster (TFM). Y suponemos que tampoco de los trabajos fin de grado (TFG). Desde entonces, el escabroso asunto del caso Cifuentes ha hecho reconocer lo que es un teefeeme a todo quisqui.
Los hechos que rodean al caso en cuestión no parecen ser controvertibles. Más bien parece que lo expuesto tiene muchos tintes de verosimilitud, por mucho que las noticias y los comentarios nos puedan causar sarpullidos por nuestra ideología. No vamos a meternos en líos abundando en más detalles de algo que socava la credibilidad de la universidad pública y devalúa los títulos sufragados con dinero familiar y/o del erario público. Lo que, de momento, está constatado es que un TFM no aparece por ningún lado.
Estos días, cuando escuchábamos y leíamos noticias sobre el asunto se nos pasaba por la cabeza un pensamiento. Tal vez es posible no encontrar un trabajo hecho. Antes, en nuestro orden desordenado de carpetas, libros, folios, pretendíamos saber la ubicación precisa de aquel artículo que nos pareció interesante fotocopiar, los apuntes de aquella clase de un ínclito profesor del curso de fisioterapia del deporte del año 94, el diploma del curso de acupuntura para fisioterapeutas al que acudimos imbuidos de ingenuidad oriental. Pero, al ir a buscarlo por necesidad o curiosidad, nos topamos con la cruda realidad de que el orden era desorden. Ahora nos pasa igual con los tropecientos archivos, almacenados en carpetas y subcarpetas, que ni siquiera el buscador del ordenador (de ordenar) es capaz de encontrar. Por eso, nos decíamos, muchos y muchas eran indulgentes con la presidenta.
Así que, pensando, nos preguntamos si nuestro TFG, que nos sirvió para obtener el grado en fisioterapia también por la URJC, estaba localizado. Y sí, lo encontramos en la carpeta (física y virtual) en la que un día lo depositamos. En papel y en bits. Pero podríamos haberlo perdido. Porque lo de el orden desordenado, que queda muy bonito, ya no nos lo creíamos tanto. Y esto puede pasarle a cualquiera. Entonces,…una cosa nos tranquilizada antes del hallazgo. La universidad, la misma URJC, en la que con orgullo trabajamos a tiempo parcial, tendría una copia. Eso seguro,…creo.
Tras este circunloquio nos atrevemos a exponer el resumen de aquel TFG. Los contenidos siguen vigentes, la intención con la que se hizo también. En nuestro afán por promover un Prácticum de Fisioterapia de calidad, implementamos herramientas y estrategias de las que hemos hablado en esta bitácora y en otros foros. Con mayor o menor acierto. Y seguimos, junto con mis compañeras profesoras, intentando introducir variables que aumenten el aprendizaje horizontal, recíproco y autónomo de los estudiantes. No hay pedantería ni exposición «ejemplar». Sólo divulgación de un texto como tantos para ser sometido a la consideración y la crítica del lector. Buena lectura.
Texto del TFG de Juan Antonio González García, presentado en la URJC el 14 de mayo de 2012:
Introducción: La fisioterapia es una disciplina científica, por tanto, ha de adecuar el paradigma científico en sus procedimientos de investigación y práctica clínica. Esta idea debe incorporarse en la docencia de pregrado como un proceso estructurado, en el marco del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES). La práctica basada en pruebas (PBP) es un enfoque asentado y asumido en las actuaciones sanitarias. A ella se contrapone la atención basada en la experiencia, muy presente en la fisioterapia. La aplicación de la PBP pretende aumentar la eficacia de las intervenciones y disminuir la variabilidad de las mismas. La Fisioterapia Basada en Pruebas (FBP) ha de incorporarse a la formación de pregrado y formación continuada como apuesta por la actualización constante y para la detección de necesidades de conocimiento. Para ello se propone un proceso de aprendizaje basado en problemas (ABP) que incorpora al alumno como elemento central y que se orienta hacia la práctica profesional, facilitando la adquisición de competencias transversales, específicas y actitudinales. Objetivo: Implantación de prácticas en el marco del Prácticum que incluyan metodología de ABP y contribuyan a la instauración de la FBP en el pregrado. Material y Método: Se realizaron actividades grupales e individuales que incluyeron: 1, elaboración de planes de tratamiento para los pacientes seleccionados, con descripción escrita de los mismos y exposición al resto de compañeros; 2, realización de un ejercicio de búsqueda en bases de datos electrónicas sobre las que previamente se les haya informado y/o formado; 3, lectura de un artículo científico y exposición del mismo (temática, conclusiones, trascendencia para la práctica, crítica). Resultados: La introducción de las actividades enfrenta al alumno con decisiones y prácticas no conocidas previamente y que promueven la adquisición de habilidades (búsqueda en bases de datos, análisis y exposición de casos) y actitudes (crítica, trabajo en equipo) necesarias para la práctica en entorno real. Los estudiantes reconocen y valoran los resultados de esta metodología. Conclusiones: El EEES supone un cambio en el modo de enseñar a asumir en el Prácticum de fisioterapia. El alumno debe adquirir una mayor responsabilidad y autonomía que le prepare para un ejercicio eficaz y eficiente en un contexto real. Por ello han de promoverse herramientas y métodos que faciliten competencias tales como las presentadas en este trabajo, las cuales se adecuen a las nuevas demandas sobre asistencia sanitaria.
El lector puede ver y descargar el cartel con el contenido: