El viejo y ¿nuevo? Museo del Prado
Los que tenemos la fortuna de vivir en Madrid nos damos cuenta que de vez en cuando alguna alegría inunda nuestro corazón. Esta semana se abren nuevas salas en el Museo del Prado. Es una ampliación física, porque la artística y cultural sigue siendo la misma. Los cuadros que permanecían ocultos en los fondos documentales ven ahora la luz. El arte es una expresión que alimenta el espíritu, penetra en nuestro interior y nos enriquece para siempre. Pues bien, los madrileños y el resto de los españoles pueden visitar los ¿nuevos? tesoros del Prado y gozar de su belleza. Lo dicho, en Madrid tenemos tráfico, pero también los mejores museos del mundo. Que ustedes lo disfrunten.
La Sala de las Musas, los nuevos recintos de exposiciones, el auditorio, el claustro, la puerta de Cristina Iglesias, el exterior del edificio de los Jerónimos y el parterre ajardinado podrán visitarse gracias al convenio firmado hoy entre el museo y las dos empresas que han ejecutado el proyecto de ampliación.
Durante el recorrido los visitantes recibirán las explicaciones de jóvenes estudiantes de arquitectura y podrán contemplar un montaje especial con las imágenes del fotógrafo alemán Thomas Struth instaladas en las nuevas salas de exposiciones temporales. Estas imágenes corresponden a las últimas series que este artista, especializado en retratar la relación del público con las obras de arte, ha desarrollado en el Hermitage de San Petersburgo, la Galleria dell’Academia de Florencia y en el propio Museo del Prado, en torno a Las Meninas y otras obras de Velázquez.
El acto de firma del convenio para las Jornadas de Puertas Abiertas se ha celebrado en la Sala de las Musas situada en el ábside del edificio de Villanueva, en la que ya se han colocado tres de las ocho esculturas que forman la colección de la reina Cristina de Suecia, y en él han participado el presidente del Patronato del Prado, Rodrigo Uría; el subsecretario de Cultura, Antonio Hidalgo; el director del Museo, Miguel Zugaza; y los presidentes de Dragados Obras y Proyecto y Constructora San José, Marcelino Fernández y Jacinto Rey, respectivamente.
El presidente del Patronato del Prado, Rodrigo Uría, ha querido decir «alto y claro» que el museo ha culminado «cinco años de excelencia gracias a Rafael Moneo, a las empresas constructoras y a la actitud excelente del personal del museo». Las Jornadas de Puertas Abiertas son la manera de celebrar con el público la ampliación del Prado, según Miguel Zugaza, a lo que contribuye la exposición de las fotografías de Struth.
Exposición dedicada a la pintura española del siglo XIX
Hasta finales de octubre, cuando se inaugurará la ampliación, el museo se dedicará «a probar las nuevas instalaciones y, en paralelo, se hará el equipamiento inmobiliario. A partir de julio se procederá al traslado de los diferentes servicios, así como al traslado de las obras de arte a los nuevos depósitos» y departamentos. En julio se iniciará también el montaje de la exposición Maestros modernos del Museo del Prado, dedicada a la pintura española del siglo XIX, con la que se inaugurará la ampliación. «Con esta exposición se acepta por primera vez la progresión histórica de las colecciones del Prado, que no se termina en Goya, sino que llega hasta principios del siglo XX», ha señalado el director del museo. De forma paralela, se presentará la colección de esculturas Las Musas de la reina Cristina de Suecia. Este grupo escultórico se situará en el claustro.
Con un coste de 152.356.775,87 euros, la ampliación del museo, proyectada y dirigida por el arquitecto Rafael Moneo, aumenta la superficie del Prado en más de un 50% (15.715 metros cuadrados útiles más que se suman a los 28.600 disponibles) y dota a la pinacoteca de las instalaciones, espacios y servicios que precisaba para adaptarse a sus necesidades en el siglo XXI.
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Creo que son las inversiones de este tipo las que deben realizarse y fomentar de una forma atractiva la cultura entre los ciudadanos, pudiendo tener todos las mismas oportunidades de crecer intelectualmente. Como bien recuerda, esta ampliación no se trata de algo nuevo, sino de mostrarnos contenidos que no habían estado antes expuestos para su disfrute.
Creo que el Museo del Prado necesitaba un apoyo. Visité la nueva ampliación en Abril, con lo que solo se podían ver las instalaciones y algunas obras de Thomas Struth, me pareció genial y curiosa la idea de que los guias fueran alumnos de arquitectura (lo explicaban muy bien) y lo que más me gustó fue el sistema de iluminación móvil, la distribución de la cafetería y, sobre todo, la puerta principal de Cristina Iglesias, impresionante! En cuanto pueda voy a ir a ver las exposiciones.