SELECTIVIDAD

 

La selectividad hace tiempo que dejó de cumplir su misión; no selecciona nada, es solo un trámite aduanero mediante el que la Universidad conserva sus teóricos privilegios de alta institución. De un examen que se puede aprobar con 4, compensado con las notas del bachillerato, ustedes dirán qué puede pensarse. Y de una selección que selecciona al noventa  por ciento de los aspirantes, lo mismo cabe decir. Desde 1974 -hace ya más de treinta años-la  Administración no ha hecho más que poner paños calientes. Pero la única alternativa viable es  o un buen examen final de Bachillerato o el examen de ingreso por Facultades. Otras soluciones, como la de los expedientes, las entrevistas, etcétera, son impensables en nuestro deprimido contexto.

 

MIGUEL GARCÍA-POSADA

Compartir:

Un comentario

  1. "Alta tensión en los hogares españoles", rezaba una hoja parroquial, Miguel, distribuida por las calles, al día de empezar la fiesta selectiva.

Deja un comentario