El lema de la carrera investigadora: «Cuando seas padre comerás huevos».
Cuando me lo decían de niño me imaginaba los típicos huevos duros para el desayuno, en su huevera de porcelana. Bien es posible que esto se deba a la explicación que me dio mi madre tras comprobar mi asombro, porque la frase, de puro lapidaria que es, no se entiende del todo.