La comunidad de Madrid convoca sus Premios para científicos y humanistas

Premios con nombre propio que sirven de homenaje doble al premiado y a la personalidad histórica. Miguel Catalán fue

un espectroscopista, casado con Jimena Menéndez Pidal (hija del gran Ramón). Tuvo abundantes contactos en el mundo anglosajón, ya que realizó importantes investigaciones en el Imperial College de Londres. En su teoría de los multipletes se basaron ulteriores investigaciones internacionales, y en 1932 fundó en Madrid el Instituto de Física y Química, clausurado tras la Guerra Civil. Emigrado a los Estados Unidos, consiguió regresar en 1946. A quienes les extrañe que un cráter lunar se llame «Catalán», deben saber que se trata de un homenaje en relación a sus aportaciones a la astrofísica.

Julían Marías, padre de Javier, era el principal discípulo de Ortega y Gasset, quien también continuó su actividad en España después de la guerra. Sin embargo, a Julián  suspendió la tesis (¡dirigida nada menos que por Xabier Zubiri!) en 1942. Hay leyendas al respecto, y aunque se doctoró en 1951 nunca pudo ejercer en la universidad pública, siendo el director y espíritu del Instituto de Humanidades en Madrid tras la muerte de Ortega.

Ambos son modelos del compromiso con el conocimiento y el progreso de la sociedad en tiempos difíciles, y dan nombre desde hace tres ediciones a dos categorías de premios en disciplinas científicas y humanísticas, respectivamente: a la carrera científica y a investigadores menores de 40 años.Descargar Convocatoria

Los premios a la carrera científica consisten en 42.000 € en metálico para cada uno de los premiados, además de una medalla y un diploma acreditativos. Pueden ser propuestos investigadores en activo de universidades, aunque nunca por sí mismos.

Los premios a investigadores menores de 40 años consisten en 21.000 € en metálico para cada uno de los premiados, además de una medalla y un diploma acreditativos. Pueden ser propuestos investigadores en activo de universidades y centros de investigación radicados en Madrid, aunque nunca por sí mismos.

Se considerarán las candidaturas en base a los siguientes logros:

— Desarrollo de líneas de investigación novedosas y con proyección de futuro.

— Fundamentación de nuevas doctrinas o metodologías.

— Formación de escuela en los ámbitos científicos y académicos (solo en premios

a la carrera científica).

— Reconocimiento de patentes desarrolladas.