Cualquier tiempo pasado fue mejor, a nuestro juicio, como matizaba el clásico. Pero ante el espectáculo de la mayoría de los actuales dirigentes occidentales, uno no puede por menos  de mirar al pasado y evocar figuras como Adenauer, De Gaulle,  Churchill, De Gasperi, Roosevelt, Spaak. En vez de ellos tenemos a  un circense señor de los mass media, a un Pinocho insular que miente más que habla, a un presidente que se aferra al cargo para no ir a la cárcel. Atacamos y con razón, a los tiranos, pero conviene de vez en cuando echar un vistazo a algunos dirigentes democráticos. La democracia de por sí no salva a nadie.

 

MIGUEL GARCÍA-POSADA

 

 

 

 

 

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Un comentario

  1. Si el Pinocho es Blair, le diré que su actitud respecto a Iraq es consecuencia de la obediencia debida emanada de la Poítica de Churchil, mal o bien que le pese a Inglaterra, desde la IIWW es un Estado más -los aliados no son cosa sólo de décadas.

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