Contribución a la estadística. Wislawa Szymborska.
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Sea cual sea la causa última, raro es el día en que no nos vemos asaltados en los medios de comunicación por una o varias noticias sobre estadísticas variadas. Oficiales o no. Sobre economía o sobre saludes y enfermedades; sobre nuestros gustos y costumbres. Porcentajes, gráficos, tartas… Todo parece sometido al escrutinio de las estadísticas que parecen servir para denostar, para discutir, para opinar y, espero que algunas de ellas también, para actuar y para mejorar.
Samurai, Hamlet, Brigitte. Collage de Wislawa Szymborska
“Números insaciables que parecen haber enterrado la batalla de las ideas, abstracciones que ocultan millones de rostros preocupados, miles de tragedias personales. Sin embargo, a pesar de los abusos, no descreo de las estadísticas. Al menos cuando es iluminada por una gran poeta y salvada del pesimismo de sociólogos y economistas”
Palabras, estas últimas, de Belén Altuna, que se acaba refiriendo al poema Contribución a la estadística de la poeta polaca Wislawa Szymborska, Premio Nobel de Literatura de 1996, de cuyo fallecimiento se cumplirán 3 años el próximo 1 de febrero.
Wislawa Szymborska en 2009. (Wikipedia)
Contribución a la estadística es un poema fascinante sobre la condición humana a través del tránsito del discurso poético por la estadística descriptiva. La poeta toma cien personas y va asignando, en porcentajes, cualidades y comportamientos, virtudes y defectos.
Así, según Szymborska, cincuenta y dos son las que todo lo saben mejor y las prontas a ayudar, siempre que no dure mucho, hasta cuarenta y nueve. “Las capaces de ser felices: / como mucho, veintitantas, / las inofensivas de una en una, / pero salvajes en grupo: / más de la mitad seguro”. Junto con las cifras se nos muestran matices inteligentes y estudiadas imprecisiones. También se huye de ciertos dolorosos conocimientos: “las crueles / cuando las circunstancias obligan: / eso mejor no saberlo / ni siquiera aproximadamente”. Y el memorable final.
tarde o temprano,
dignas de compasión
noventa y nueve,
las mortales:
cien de cien.
Cifra que por ahora no sufre ningún cambio.
Encontramos una poderosa poesía que, resumiendo, en palabras de Fernando Savater, podría calificarse como: “reflexiva sin engolamiento ni altisonancia, de forma ligera y fondo grave, directa al sentimiento pero sin chantaje emocional”. (Ver Nota 1).
Demasiados pensamientos. Collage de Wislawa Szymborska
Pocas voces han sido capaces de incluir, con tanta gracia, soltura y claridad, la ciencia en la poesía como la gran poeta polaca, de la que en la sección poesía y ciencia están, además del presente, incluidos los poemas: ¿Y si todo esto?, El número pi y Movimiento.
En su breve discurso de recepción del Premio Nobel, (lo bueno si breve,…), reflexionaba acerca de la poesía y de la tarea del poeta y decía:
… La inspiración, cualquier cosa que sea, nace de un perpetuo no lo sé… Si Isaac Newton no se hubiera dicho no sé, las manzanas en su jardín podrían seguir cayendo como granizo, y él, en el mejor de los casos, solamente se inclinaría para recogerlas y comérselas. Si mi compatriota María Sklodowska-Curie no se hubiera dicho no sé, probablemente se habría quedado como maestra de química en un colegio para señoritas de buena familia y en este trabajo, por otra parte muy decente, se le hubiera ido la vida. Pero siguió repitiéndose no sé y justo estas palabras la trajeron dos veces a Estocolmo, donde se otorgan los premios Nobel a personas de espíritu inquieto y en búsqueda constante. (Ver Nota 2).
De dónde surge una fascinante conexión entre poesía y ciencia en la que, desde esta ventana en madrimasd, seguiremos indagando. Feliz año 2015.
Nota 1.
Contribución a la estadística es un poema bastante conocido que ha sido ampliamente reseñado y comentado. Lean, por favor, los artículos Contribución a la estadística de Belén Altuna y Ligeramente grave de Fernando Savater. Wislawa Szymborska, sonrisa y agonía en la poesía de Javier Rodríguez Marcos, además de reseña necrológica, alumbra la respuesta a la pregunta de para qué sirve un Premio Nobel.
Nota 2.
El discurso pronunciado por Wislawa Szymborsaka en la ceremonia de entrega del Premio Nobel, es una pequeña joya que vale la pena leer. Pongo enlaces al texto en inglés en la página nobelprice.org, y en español a la interesante página proyectandoleyendo.files.wordpress.com.