El matemático enamorado. William Rankine.
Enlace a El matemático enamorado en poesía y ciencia
Resulta bastante impactante la figura de William John Macquorn Rankine, autor de El matemático enamorado, con su feroz melena, sus grandísimas patillas que se hacen barba y la amplia túnica; todo ello en negro, dando sensación de una profunda humanidad. (Ver Nota 1).
Alexander Macfarlane nos lo presenta, en la monografía Lectures on Ten British Physicists of the Nineteenth Century, (ver Nota 2), como escocés antiguo; de pura cepa, (“He was by descent a Scot of Scots ), perteneciente a los Rankines de Carrick, linaje descendiente, a su vez, del rey Roberto I de Escocia, que antes de su ascensión a la corona había sido Conde de Carrick.
William Rankine (1820 – 1872) fue uno de los más ilustres científicos del siglo XIX. Ingeniero eminente y físico imaginativo, fue, junto con Rudolf Clausius , William Thomson y Lord Kelvin, uno de los pioneros de la termodinámica.
Rankine desarrolló una teoría completa del motor de vapor y, en general, de todos los motores térmicos. Sus manuales de ciencia y práctica de la ingeniería fueron usados muchas décadas después de su publicación en las décadas de 1850 y 1860. Publicó centenares de artículos y notas sobre cuestiones de ciencia e ingeniería desde 1840 en adelante, y sus intereses fueron notablemente variados incluyendo, en su juventud, la botánica, la teoría musical y la teoría de números y, en su madurez, la mayoría de las ramas principales de la ciencia, la matemática y la ingeniería. Fue un entusiasta cantante, pianista y violoncelista aficionado que componía sus propias canciones humorísticas.
Hasta aquí, la introducción del artículo dedicado a William Rankine en Wikipedia; en la que pueden encontrar más detalles sobre su importante labor como ingeniero en prácticamente todas las ramas: civil, hidráulico, naval y mecánico; asicomo sus eminentes aportaciones científicas al desarrollo de la termodinámica. (Ver Nota 3).
William Rankine como poeta
Poco se dice, sin embargo, de su faceta literaria, en la que resulta ser un agradable escritor de fábulas y un notable poeta aficionado. En 1874, dos años después de su fallecimiento, se editó su obra literaria en Songs and Fables en la que se recogieron 19 poemas o canciones y 7 fábulas. (Ver Nota 4).
La primero de los poemas del libro es The Mathematician in Love, composición de 8 estrofas de 5 versos que contiene una de las primeras ecuaciones de amor conocidas. El poema es canónico en su forma; perfectamente medido y rimado tiene un punto de vista humorístico delicioso: «graziosa e spiritosa opera», como lo define Marco Fulvio Barozzi en el estupendo blog de ciencia y literatura Popinga en el que se incluye, por cierto, la versión en italiano del poema.
He seleccionado cuatro de las ocho estrofas del poema; la primera y las tres últimas. En la primera estrofa – estrofa I – se plantean los arduos trabajos del matemático enamorado para comprobar si el objeto de su amor – esa joven mujer, atractiva y fascinante – es perfecto desde la geometría ideal que deberían tener sus ángulos y sus ratios para lo que, según se nos dice, se peleó, escribió o garabateó formulas y funciones con aspecto de jeroglífico.
La antepenúltima y la penúltima estrofas es donde se plantean la matemática del amor y la del matrimonio. (Ver Nota 5)
Fijémonos en las variables independientes del amor, tal y como se indica en la VI estrofa: belleza, buenas maneras y fortuna; siendo la última no circunstancial sino, según el poeta, esencial.
“Let x denote beauty,-y, manners well-bred,-
“z, Fortune,-(this last is essential),-
A continuación se plantea la ecuación del amor o, mejor dicho, la ecuación de «la inclinación al amor»: L, que responde a una función potencial y de la que el propio poeta indica su forma en la edición mencionada de Songs and Fables, tal y como aparece en la parte superior de la figura siguiente.
En la parte inferior de la figura vemos la integral de la función de la estrofa VII que da lugar al matrimonio M. Resulta llamativo, y creo que heterodoxo, que t sea no sólo tiempo sino, también, persuasión: la poesía es así.
En la estrofa final se llega al cenit del optimismo matemático con la proclamación de la capacidad de predicción de los afectos femeninos mediante el Álgebra: ¿por qué no? si ya hemos sido capaces de predecir el errante curso de la luna.
Uniformes de dragones
El poema y el ensueño acaban cuando un joven militar de uniforme, de un regimiento de dragones, le levanta la chica al matemático que queda confuso y afligido. La vida misma o un baño de vulgar realidad.
¿De dónde vino, como ocurrió y cual es el significado de El matemático enamorado? No sabemos muy bien. Podría ser un sueño y, siguiendo al mencionado Marco F. Barozzi, «No está claro si el matemático enamorado es una persona real, un puro divertimento de autor o uno de tantos capítulos escolares de rivalidad entre matemáticos e ingenieros».
Queda el poderoso artefacto humorístico, poético y científico: el memorable poema de William Rankine.
Notas y enlaces
1. Habiendo mencionado El matemático enamorado en algunas de la presentaciones públicas de poesía y ciencia, tenía la sensación de que debía estar en la sección. Me había echado para atrás el hecho de no existir ninguna traducción al castellano. Me he atrevido a traducir, no la totalidad del texto, sino sólo cuatro de las ocho estrofas de que consta el poema. Espero que sirva hasta que alguien con mejor conocimiento del inglés realice la traducción completa del poema que, como digo, está por llegar.
2. El texto de Lectures on Ten British Physicists of the Nineteenth Century se puede visualizar en el enlace https://archive.org/details/lecturesontenbri00macfrich. Junto con Rankine aparecen en el libro Maxwell, Tait, Thomson, Stokes y Herschel, entre otros.
3. En encyclopedia.com se puede acceder a una buena descripción de la trayectoria y biografía científica de Rankine; en el enlace: http://www.encyclopedia.com/people/science-and-technology/technology-biographies/william-john-macquorn-rankine
4. Hay que hacer notar que esta faceta poética de Rankine no es aislada entre los científicos victorianos; el matemático James J. Sylvester y el físico James C. Maxwell fueron asimismo poetas notables. (Ver en este blog la entrada sobre el Poema de amor de un telegrafista de Maxwell). En muchos lugares de internet podemos encontrar el texto completo de The Mathematician in Love; por ejemplo, en la página web de la Universidad de Toronto en el enlace https://tspace.library.utoronto.ca/html/1807/4350/poem1699.html. El texto completo de Songs and Fables se puede visualizar en el enlace https://archive.org/details/songsandfables01rankgoog
5. Un extenso análisis del poema con referencias a diversas interpretaciones del mismo se encuentran en el artículo dedicado al poema en la curiosa e interesante Homeolpedia que es la Encyclopedia of Human Thermodynamics, Human Chemistry and Human Physics.