Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia : Una mirada de nuestro propósito
Hace unos días mientras buscaba una información relativa a los cambios de esta sociedad digital, recordé que ya los filósofos afirmaron “todo cambia nada permanece”, o “lo único que no cambia es el cambio”. En este escenario, la gestión de la incertidumbre se ha convertido en una actividad que nos mantiene en alerta, y que está afectando a nuestro propósito vital, generando incluso episodios de ansiedad.
Todo esto me ha hecho recordar que dentro de unas semanas el 11 de febrero Día Interncional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, asunto del que ya escribé en otros posts: La difusión de las carreras STEM a través del cine y La mirada social hacia las mujeres STEM. Pues bien este próximo 11 de febrero de 2025 se celebrará el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia y cuya temática se dirige a la salud mental en mujeres STEM y que muestra que las mujeres en la ciencia se enfrentan a desafíos únicos que afectan su salud mental, vinculados a la desigualdad de género, la discriminación y la conciliación familiar. Algunos estudios concluyen: “que las mujeres presentan mayores tasas de ansiedad y depresión, lo que puede influir en su bienestar a largo plazo en el ámbito académico y de investigación. Además, la presión por equilibrar la vida profesional con las responsabilidades familiares incrementa el estrés en las investigadoras, afectando su salud mental de manera significativa. “
En mi opinión esto es preocupante, y aprovechando que estoy leyendo el libro Método Ikigai de los autores Héctor García y Francesc Miralles, nos explica como el Ikigai nos ayuda a lograr un equilibrio entre nuestro pasado, presente y futuro para desarrollar todo nuestro talento y poder cumplir nuestros propósitos desde la serenidad. Este hecho me conduce a cuestionarme que está pasando con las niñas que ahora están formándose y estudiarán carreras STEM: ¿tendrán en los próximos años estos problemas de salud mental, que es la temática del día 11 de febrero?, y si es así, tod@s deberíamos reflexionar si podemos cambiar el rumbo, apostando por una vida que contemple que nuestro cerebro es orgánico y un auténtico prodigio enigmático de la evolución. Pues el actual escenario, tenemos que tomar decisiones importantes que nos afectarán a nuestra salud mental.
Tal vez en algún momento de nuestras vidas, deberíamos tener tiempo para reflexionar sobre cuál es nuestro propósito y buscar un equilibrio. Pues, la mayoría vamos cambiando en función de las diversas circunstancias y situaciones profesionales y personales que aparecen en nuestro entorno, saltamos obstáculos y no reflexionamos. En una época vertiginosa donde el tiempo es el bien más preciado, a menudo nos montamos en cualquier tren cuyo control no es nuestro, sin detenemos un poco en el andén, para tener una visión más holística y panorámica, ver los matices que nos rodean.
Para finalizar, incluyo una reflexión de la neurocientífica Rita Levi-Montalcini, Premio Nobel de Medicina y Fisiología en 1986, por el descubrimiento del factor de crecimiento nervioso (NGF), afirmó: “He tratado siempre de conciliar dos aspiraciones irreconciliables (según el gran poeta Yeats): la perfección en la vida o la perfección en el trabajo. Lo logré optando por cierta imperfección en la vida y en el trabajo. Y al descubrir el placer que le procuraban ambas actividades, descubrió que eso, la imperfección, era lo que más se ajustaba a la naturaleza humana”.