El acceso a la biodiversidad mundial desde Internet: La hora del naturalista en las redes sociales

Se imagina sentado delante de su ordenador y poder tener acceso a la biodiversidad mundial, consultando cualquier dato de la naturaleza, desde genes a ecosistemas. O paseando por un jardín viendo un insecto, y poder identificalo a través de Internet, además de unirse a decenas de miles de usuarios o naturalistas de todo el mundo que aportarán sus observaciones para crear una gigantesca base de datos mundial que ayudará a entender los cambios medioambientales de las distintas regiones del mundo.

No piense que se trata de una Exposición en un Museo de Ciencias o de Tecnología, o que esta viendo una película de ciencia-ficción, o tal vez releyendo esas novelas sobre el futuro que tan famosas fueron en otras épocas. Se trata de un proyecto, que inició oficialmente su andadura durante la conferencia e-Biosphere -el pasado lunes 1 de junio en Londres- sobre la biodiversidad, y que podría estar funcionando a pleno rendimiento en una década. Para muchos supone que las redes permitirán la Observación de la Biodiversidad Mundial.

En este sentido, James Edwards, el organizador de la conferencia y director ejecutivo de la Enciclopedia de la Vida del Instituto Smithsoniano, ha comentado «solamente necesitaremos conectar bases de datos. Y contamos con sofisticadas herramientas informáticas para hacer eso posible, por lo que el sistema podría empezar a funcionar en meses». Edwards explicó que el proyecto es crear un Observatorio Virtual de la Biodiversidad Mundial. Ya que el sistema será gratuito y abierto a todo el mundo, cualquier usuario podrá acceder a través de Internet a una imagen de satéilte y obtener información detallada desde las especies de árboles presentes hasta los insectos que habitan en ese ecosistema o datos sobre el ADN de los microbios que viven en los insectos.

Asimismo ha indicado que la información sobre la biología y distribución de las especies de la Tierra es de gran importancia para la ciencia y nuestra calidad de vida. Y que el impacto de esa información aumenta en gran medida cuando se conecta y se pone a disposición de todo el mundo a través de Internet.

 Apoyando estas ideas el profesor Norman MacLeod, conservador de Paleontología del Museo de Historia Natural de Londres afirma que se trata de la «democratización de la información sobre biodiversidad«. Para él de hecho, es la gente local a la que acuden los científicos para hacer sus descubrimientos. Necesitamos asociarnos con ellos, es mucho más eficiente y productivo. Algunos de los elementos del observatorio que ya existen son ARKive (una base de datos de imágenes y vídeos de especies), Aquamaps (cartografia del ambiente marino) y el sistema de código de barras genético.

De este proyecto, Jesse Ausubel, director de programas de la Función Alfred P. Sloan de Nueva York, ha dicho que se puede comparar con la llegada a la luna «Hace 40 años, los astronautas tomaron fotografias de la Tierra desde la Luna. Desde e-Biosphere está creando un «macroscopio» que permitirá a miles de millones de personas observar desde Madagascar a la Luna».

Me gustaría finalizar, recordando la frase La ciencia avanza una barbaridad, (como afirmó Miguel de Unamuno) pues habría que añadir que con la ayuda de Internet, aún más. Pues cuando una rama del conocimiento se convierte en ciencia accesible a través de la red, como está ocurriendo con la ecología y su biodiversidad se produce un avance de forma exponencial: dos, cuatro, ocho, dieciséis, etc. Esto supone que como bióloga junto a mi cuaderno de campo en mis rutas por la naturaleza, también deberé llevar el portátil.

Les invito a que me cuenten sus opiniones.