A vueltas con la Ecoinnovación

Desde hace décadas, la innovación se ha convertido en la piedra filosofal que puede favorecer la competitividad de las empresas y solucionar parte de los problemas de la crisis económica. En los últimos años a la innovación, como también le ha ocurrido a otros términos, se le ha añadido prefijo Eco, generando el concepto Ecoinnovación.

La  Innovación ecológica: hace referencia a la puesta en marcha de productos, procesos u otras soluciones que puedan contribuir a la protección del medio ambiente o de un uso más eficiente de los recursos.

Pues bien, acabo de leer un informe del Eurobarómetro, que fue presentado en el X Foro Europeo de Eco-innovación  celebrado en Birmingham (Reino Unido). En este se indica lo que en tantas ocasiones se ha reiterado, que las empresas de la UE tienen que apostar por la innovación ecológica, por todos los beneficios que genera tanto para las empresas como para el medio ambiente. Entre los datos que incluye el Eurobarómetro  destaca que de entre las PYMES encuestadas que habían introducido algún tipo de innovación ecológica en los últimos dos años, más del 40% reconocía que esa inversión se había visto compensada por una reducción en el uso de materiales, de hasta un 20% por unidad de producción.

El informe también señala que el principal obstáculo que impide que las empresas puedan invertir en innovación ecológica son las limitaciones económicas y financieras  en general, y la incertidumbre de la demanda del mercado y la falta de financiamiento externo, en particular. En este sentido, el Eurobarómetro de la UE señala que las autoridades públicas tienen un papel crucial que desempeñar para ayudar a las PYMES a superar estos obstáculos de cara a que sean capaces de adoptar medidas eficaces de innovación ecológica, y apoyar la puesta en marcha de planes de financiación que puedan promoverlas.

El valor de la ecoinnovación, también viene siendo señalado por el Comisario Europeo de Medio Ambiente, Janez Potocnik, quien ha manifestado «el uso eficiente de los recursos es una necesidad para las empresas y por ello la eco-innovación es una herramienta clave para convertir este reto en una oportunidad de negocio».

 Cuando leo estas observaciones y recomendaciones me parece que estoy ante un déjà vu . Ya son bastantes estudios realizados en relación a que la ecoinnovación es clave para sobrevivir en este siglo XXI. Y una y otra vez, volvemos a mostrar las mismas limitaciones para que las empresas apuesten por esta innovación ecológica, y que también pueden aplicarse a  la innovación en general, que de forma muy detallada recoge el Informe Cotec 2011, presentado el 1 de junio en Madrid.

Me gustaría finalizar con un deseo, si la mayoría de expertos conocen los obstáculos para poder ecoinnovar, por qué no intentamos lograr que estas dificultades vayan desapareciendo. Gracias

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