El liderazgo a través de pintoras extraordinarias
Siempre me ha gustado visitar museos de pintura, y cuando observo esas maravillosas obras de arte, no puedo sino emocionarme. Pero más allá de la emoción, me ha parecido interesante detenerme en las pintoras que a través de sus cuadros, han mostrado su liderazgo. Porque el liderazgo, va más allá de los numerosos artículos, informes, libros que nos ofrecen “sesudos análisis”, también es poder tener la posibilidad de ver la realidad mediante las increíbles miradas de estas mujeres, que reflejaron sus entornos y se atrevieron a ser visibles y mostrarlos a través de las bellas artes.
Comenzando por Sofonisba Anguissola, considerada la primera mujer pintora de éxito del Renacimiento. Cultivó el retrato y el autorretrato, estableciendo nuevas reglas en el ámbito del retrato femenino. A los veintisiete años se estableció en España, en la corte del rey Felipe II. Pero si nos detenemos en una de sus pinturas más famosas es un retrato de sus hermanas jugando al ajedrez, considerado un juego típicamente masculino en la época —muy asociado a la idea de racionalidad— en el que las mujeres jóvenes dominan el juego. El hecho de que pintase este cuadro nos da muestra de una mujer que mostró su liderazgo visionario en una época no caracterizado porque las mujeres desarrollaran estas actividades, como el ajedrez.
Varios siglos después, nos encontramos con Angelica Kauffmann fue una pintora suiza del periodo neoclásico centroeuropeo quien fue una de las fundadoras de la Royal Academy of Arts de Londres, este dato es sin duda sobresaliente, esta institución promueve el conocimiento, entendimiento y práctica de las artes visuales internacionalmente. Y que una pintora formase parte en sus inicios nos muestra un liderazgo ejemplarizante para otras mujeres, además de como a través de sus autorretratos muestra su autoconfianza.
Realizo un salto en el tiempo para detenerme en María Blanchard pintora española considerada la mejor exponente entre las pintoras del cubismo, hecho que muestra que fue una pionera. Pero es importante mencionar, que María nació con un problema físico, a consecuencia de la caída que sufrió su madre embarazada al bajarse de un coche de caballos. Esta malformación resultante de una cifoescoliosis con doble desviación de columna, condicionaría parte de su vida, pero que no fue obstáculo para pasar a la historia de la pintura, y nos muestra la superación o lo que hoy denominaríamos “resiliencia”.
Otras de las pintoras que no puedo dejar de mencionar es Georgia O’Keeffe artista estadounidense, conocida especialmente por sus pinturas de flores, rascacielos de Nueva York y paisajes de Nuevo México. O’Keeffe ha sido reconocida como la «madre del modernismo estadounidense”. Enseñó en Columbia College, Columbia, en donde completó una serie de abstracciones en carbón muy innovadoras, basadas en sus sensaciones personales. La destreza de O’Keeffe con diversos medios —pastel, carboncillo, acuarela y óleo—, combinada con su sentido de la línea, el color y la composición, produce obras engañosamente sencillas. Su confianza en el manejo de estos elementos hace que su estilo pictórico parezca espontáneo.
Finalmente, incluyo a Maruja Mallo, pintora surrealista española. Está considerada como artista de la generación del 27 dentro de la denominada vanguardia interior española. Pintora que represento una encarnación de la nueva mujer libre y emancipada. De hecho ella, formó parte de las conocidas como Las sin sombrero. Durante la década de 1920 trabajó, asimismo, para numerosas publicaciones literarias como la Revista de Occidente, La Gaceta Literaria o el Almanaque Literario, y realizó portadas de varios libros. Extendiendo su talento de líder.
Cómo se puede comprobar, estas pintoras comentadas son una “pequeñísima muestra” de las numerosas y extraordinarias pintoras que nos han dejado sus obras y han puesto de relieve, que su talento y su liderazgo caminaban juntos.
Me gustaría incluir un comentario inspirador de O’Keeffe “Se requiere valor para crear un mundo propio”, además yo añadiría que estas pintoras tuvieron un valor fuera de lo común, y agradezco poder sumergirnos a través de sus pinturas en las épocas que les tocó vivir, que sin duda, es una gran enseñanza.