Vivir en ciudades sostenibles: Desde Denver a Estocolmo y Hamburgo

Actualmente en nuestro planeta la mitad de la población mundial, vivimos en núcleos urbanos, y, de acuerdo a los estudios de la ONU esto corresponde a más de 3.000 millones de personas, cifra que aumentará sensiblemente en este siglo XXI. Evidentemente este incremento de la población urbana lleva consigo nuevas demandas y la necesidad, cada vez mayor, de hacer todo lo posible para que las ciudades que habitamos logren mantener la armonía entre los aspectos espacial, social y ambiental, es decir intenten ser más sostenibles.

Hablando de sostenibilidad me gustaría recoger las experiencias de tres ciudades: Una Norteamericana, Denver (Colorado) y otras dos en la vieja Europa, Estocolmo capital de Suecia y Hamburgo en Alemania, en relación a sus actuaciones y experiencias medioambientales.

Hace años pensar en la ciudad de Denver a 1.600 metros de altitud a los pies de las Montañas Rocosas, nos remitía inevitablemente a lo que Jane Jacobs en su libro: «Muerte y vida de las grandes ciudades americanas», era reflejo de desolados páramos de hormigón y asfalto. Sin embargo, en los últimos años esta ciudad ha iniciado un proceso de cambio con la contribución del movimiento smart growth (crecimiento inteligente) como avanzadilla. Que ha acelerado en Denver un renacer urbano para hacerla más sostenible, en esta transformación ha influido el empresario, geólogo y alcalde John Hickenlooper, quien en 2006 lanzó el Programa Greenprint: marcando el objetivo de reducir las emisiones de CO2 un 20% en cinco años. Hickenlooper consideró que era una labor conjunta de las empresas, las instituciones locales y asociaciones ciudadanas. La huella verde mide anualmente los programas en capítulos como las energías renovables, el transporte que incluye la construcción de carriles-bici que surcan el área metropolitana, la gestión de los residuos, la reforestación y el agua. Greenprint solicita también a los dos millones de habitantes del área metropolitna que hagan sus deberes en casa y cumplan con el juramento verde «on line»: prometo cambiar cuatro bombillas incandescentes por cuatro de bajo consumo, prometo cambiar el coche un día a la semana por la bicicleta o el transporte público, … Lo que da muestra que el compromiso medioambiental corresponde a todos.

Al otro lado del Atlántico, en Europa tenemos ciudades tenemos ciudades, que pueden dar buen testimonio en cuanto a responsabilidad ambiental. Ejemplos claros son Estocolmo y Hamburgo que el pasado mes de febrero 2009 han sido declaradas ganadoras del nuevo premio Capital Verde Europea. La capital sueca será la Capital Verde Europea en 2010, seguida por Hamburgo en 2011. Este nuevo premio de la Comisión Europea anima a las ciudades a mejorar su calidad de vida urbana, teniendo sistemáticamente en cuenta el medio ambiente en sus planes de urbanismo. Para ello deben cumplir con al menos 10 de los objetivos ambientales que son requerido:

  1. Contribución local a la lucha contra el cambio climático.
  2. Movilidad local y transporte de pasajeros.
  3. Espacios verdes abiertos al público.
  4. Calidad del aire.
  5. Contaminación acústica.
  6. Producción y gestión de residuos.
  7. Consumo de agua.
  8. Gestión de aguas residuales.
  9. Gestión sostenible de la autoridad local.
  10. Uso sostenible de la tierra.

El jurado ha estado compuesto por representantes de la Comisión Europea, la Agencia Europea del Medio Ambiente, el Consejo Internacional para las Iniciativas Ambientales Locales (ICLEI), la Federación Europea para el Transporte y el Medio Ambiente (T&E), la Unión de Capitales de la Unión Euopea y el Comité de las Regiones. El plazo de candidatura para el premio de 2012 se abrirá en septiembre de 2009. Merece la pena detenerse aunque sea brevemente en lo que nos muestran estas ciudades:

Estocolmo, ciudad en rápida expansión de 800.000 habitantes, se ha propuesto el objetivo ambicioso de ser una ciudad sin energías fósiles de aquí al año 2050. La ciudad dispone de un sistema de gestión integrada que garantiza que los paramétros ambientales se incluyan en el presupuesto, las operaciones de urbanismo y las actividades de información y control municipales.

Un 95% de la población aproximadamente vive a menos de 300 metros de zonas verdes que mejoran la calidad de la vida local, con actividades de recreo, purificación del agua, reducción del ruido y una mejora de la biodiversidad y de la ecología. La ciudad ha sido digna de elogios por su amplio programa de mejoras en dichas zonas, incluida la creación de más playas aptas para el baño. También cuenta con un sistema integrado e innovador de gestión de los residuos que supone altos porcentajes de reciclado, especialmente de los residuos biogradables, con sistemas subterráneos de vacio. Un sistema vanguardista de tasas por congestión ha reducido el uso del automóvil, incrementando el uso del transporte público y reducido las emisiones, y la ciudad puede enorgullecerse de haber reducido en un 25% las emisiones per cápita de CO2 desde 1990.

Hamburgo, con 1,8 millones de habitantes, es una ciudad que dedica a sus compromisos ambientales una financiación adecuada. La calidad del aire es muy buena, existen varios programas de concienciación y se han adoptado objetivos muy ambiciosos de protección del clima, como la reducción de las emisiones de CO2 del 40% de aquí al año 2020 y del 80% para el 2050. Las medidas adoptadas incluyen unos valores de referencia para calcular la rentabilidad de las medidas de ahorro energético en los edificios públicos, con programas de sustitución del alumbrado, las calderas y los sistemas de refrigeración.

Casi un 100% de los ciudadanos de Hamburgo dispone de transporte público a menos de 300 metros. Existe asimismo una estructura sistemática de espacios verdes a los que los ciudadanos pueden acceder fácilmente. Hamburgo ha propuesto lanzar un «tren de ideas» en el que otras ciudades dispongan de un vagón para promocionar sus ideas, sus logros y sus planes futuros en materia ecológica.

Recordando al gran filosofo Ortega y Gasset y a su obra El Espectador, donde analiza que no se puede ser simple espectador de los acontecimientos, contemplando lo que nos gusta y criticando lo que no nos convence. Podríamos aplicarnos las mismas reflexiones en los temas de las ciudades sostenibles, no podemos ser simples espectadores, reclamando más compromiso para que se creen nuevos espacios verdes y más transportes públicos, si luego nosotros, hacemos uso excesivo del coche o no contribuimos con nuestro comportamiento a reducir consumos energéticos, etc. Para lograr que nuestras ciudades sean más sostenibles, debemos tener presente:

I pledge

You can

Together, contribuimos a la sostenibilidad

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9 comentarios

  1. Muy interesante la información, y en especial en el caso de Denver. Sería necesario que, aquellos que vivimos en las ciudades españolas, aprendieramos para forzar que nuestros Alcaldes se olviden de fastos y coches, para transformar nuestras áreas en ciudades no sólo sostenibles, sino vivibles

  2. Más que acertada su visión de la sostenibilidad en las ciudades, este no es un problema únicamente de las administraciones, es un problema también de todos los ciudadanos, somos nosotros los que debemos hacer "los deberes en casa".

    Viví cierto tiempo en Estocolmo y he visto que la ciudad se ha puesto manos a la obra para reducir su dependencia de las energías fósiles. Pero son los propios ciudadanos, no sólo las administraciones, los que ha decidido vivir en ciudades limpias. Ese debería ser un ejemplo para todos nosotros.

    Marc Reig

  3. Creo que es necesario un replanteamiento del concepto de ciudad sostenible. Como se indica en algún comentario anterior, quizás habría que ir pensando en crear una categoría de "ciudadanos sostenibles". Mi sensación es que buena parte de las conductas de los habitantes de las ciudades no se modifican por los logros, por pequeños que sean, que alcanzan las admnistraciones. Soy bastante crítico con las personas ante lo que veo cada día.

    Añado a las ciudades mencionadas "Friburgo, que se autodenomina "Ciudad más ecológica de Alemania".

  4. Aunque sea a duro golpe, me alegra saber que ya los ciudadanos nos hemos dado cuenta que hemos perdido la lucha de tener "cantidad de vida" por las razones que han marcado las estadisticas y debemos optar por la lucha de "calidad de vida". Ahi entra el papel de crear un sostenible dia dentro de nuestro ambiente conjugando desde las calles hasta nuestras casas. Lo que si me preocupa del boom de la responsabilidad civil es la carencia de educacion en muchos paises subdesarrollados como el mio (Republica Dominicana), ya que todavia estamos enmarcados en creer que esos loguitos que traen los productos que garantizan 3 segundos mas de vida, son solamente para industrias o peor aun, solo se enfoca la responsabilidad a la Administracion Gubernamental que aprovecha cualquier medida de aporte para publicitarse hacia su propio beneficio y no el comunitario.

    Como el egoismo hace que solo luchemos por nuestra vida, las campanas deberian sensibilizar mas alla, porque a veces pensamos que la vida termina cuando morimos, pero que le vamos a guardar a nuestros hijos y nietos? entonces nosotros, si nos convertimos en "ciudadanos sostenibles" como cito un companero anterior(frase que me encanto), debemos luchar por permitirle a nuestros descendientes, un pedacito de ciudad donde recuerden lo mucho que tambien nosotros nos divertimos en calidad plena, nuestra sangre sigue creciendo mientras sigan los descendientes de lo que un dia fuimos.

    Pero estamos caminando…..

  5. Me gustaria presentarles un plan de proyectos de reducción energía , este proyecto es muy grueso tiene 170 paginas ,les mando la presentación . INCREMENTO DE LA EFICIENCIA Y REDUCCIÓN

    DE LOS COSTES DEL ALUMBRADO PÚBLICO.

    EL PROYECTO ONTIN-SOL: DESCRIPCIÓN DE LA PROPUESTA.

    La necesidad actual de promover iniciativas de claro contenido medioambiental, a fin de corregir los desequilibrios ecológicos generados por la actuación despreocupada del hombre durante décadas de desarrollo económico e industrial a espaldas del concepto de sostenibilidad, y la urgencia en la implantación y generalización de nuevos sistemas energéticos que resulten satisfactorios para las exigencias del actual orden económico y social, y que sean capaces de conciliar la idoneidad de la fuente energética que se pretende promover con relación a los bienes que se tratan de preservar, junto con un ineludible deber de ahorro de los recursos utilizados, obligan a la Administración Pública, pero también a los ciudadanos a tomar conciencia y a emprender iniciativas responsables en materia energética.

    Es claro, en primer lugar, que la Administración ostenta el deber de impulsar distintas iniciativas responsables, porque es a la Administración a quien corresponde la organización y dirección de la sociedad, y en esa medida se entiende que tiene o debe tener una clara conciencia de las necesidades existentes y debe actuar para atender las mismas.

    Con su actuación la Administración no sólo realiza lo que debe ser hecho, sino que además, y como muy bien sabe, su actuación posee un importante valor ejemplarizante frente a los ciudadanos.

    Pero en esta materia también los ciudadanos tienen un deber de actuación en responsabilidad y pueden tratar de promover iniciativas, bien de valor o alcance individual, bien de valor o alcance general, siendo necesario en este caso, quizás, buscar la implicación de la propia Administración, como consecuencia de la especial naturaleza de la iniciativa que se pretende promover.

    En este planteamiento es en el que debemos incardinar el proyecto de eficiencia y ahorro energético ONTIN_SOL, que presenta la empresa COMERCIAL DE IMPORTACIÓN Y EXPORTACIÓN DE ONTINYENT SA.

    El alumbrado público representa una importante partida del total consumo eléctrico de las ciudades, estimándose cercano al 50% del presupuesto total de gasto previsto. Las actuaciones en este ámbito se han materializado hasta la fecha en la sustitución del tipo de bombillas de las luminarias, en aras a conseguir una importante reducción de la contaminación lumínica de las ciudades y en asegurar la utilización de materiales que sean más idóneos para preservar el medio ambiente.

    El proyecto ONTIN-SOL representa un paso cualitativamente más innovador y más avanzado con relación a los objetivos a corto y medio plazo planteados por algunas de las más grandes ciudades españolas dentro del marco establecido por el Gobierno en la Estrategia Española de Cambio Climático y Energía Limpia, Horizonte 2007-2012-2020.

    Se trata implantar a gran escala una nueva tecnología de alumbrado público que se incardinaría absolutamente en los criterios de máxima eficiencia, ahorro y sostenibilidad energéticos. Para dicha implantación se plantea el desarrollo de una experiencia piloto por la que la Administración pueda comprobar la idoneidad del proyecto planteado y la oportunidad económica, social y medioambiental de su implantación.

    El sistema consiste en la implantación de sistemas de farolas de captación solar y en algunos casos provistos con un sistema mixto dotado con un pequeño aerogenerador, así como con sistema LED en sus luminarias, que pueden mantenerse conectadas a la red ya existente para los casos de emergencia, pero que en razón a sus características técnicas pueden localizarse perfectamente aisladas a red cumpliendo con las necesidades de alumbrado del área en que sean localizadas

    Esta experiencia piloto de estudio y verificación de resultados ha de estar incardinada en la política o estrategia local medioambiental de apuesta por las energías renovables en sus diversas manifestaciones. Para ello, se sugiere que el Gobierno Local, sensibilizado con las necesidades medioambientales y el ahorro energético, proponga la firma de un convenio de colaboración con la empresa que plantea el Proyecto ONTIN-SOL, a fin de evaluar sobre el terreno los resultados de eficiencia y ahorro energético que se plantean en el estudio, en una o varias zonas predeterminadas y en un plazo de tiempo determinado.

    Enrique Garcia Moya enrique@ciexon.com 961910241

  6. En Estocolmo es interesante que la ciudad tenga un sistema de gestion integrada que garantiza que se incluya en el presupuesto,las operaciones de urbanismo y las actividades de información y control municipales, operaciones urbanas que diseña una serie de estrategias donde destaca una mejor comunicacion que busca informar y concienciar a los habitantes para alcanzar una mejor calidad de vida.

  7. La Declaración de Estocolmo es un conjunto de principios que abogan por el derecho al desarrollo sostenible o sustentable y a la protección del medio ambiente .
    me parese una muy buena idea que los paises se reunan para crear proyectos para la conservación, y protección del Medio Ambiente.

  8. yo pienso que el hombre es a la vez obra y artífice del medio que lo rodea, el cual le da el sustento material y le brinda la oportunidad de desarrollarse intelectual, moral, social y espiritualmente.
    – La protección y mejoramiento del medio ambiente humano es una cuestión fundamental que afecta al bienestar de los pueblos y al desarrollo económico del mundo entero…..
    – El hombre debe hacer constante recapitulación de su experiencia y continuar descubriendo, inventando, creando y progresando. Esta capacidad del hombre de transformar lo que lo rodea, utilizada con discernimiento, puede llevar a todos los pueblos los beneficios del desarrollo. Aplicado erróneamente o imprudentemente, el mismo poder puede causar daños incalculables al ser humano y a su medio.

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