La nueva ley de financiación de RTVE desata la polémica
La aprobación del proyecto de Ley de Financiación de
El citado proyecto renuncia a la inclusión de publicidad como forma de financiar al grupo público. De esta forma se prevén aportaciones vía Presupuestos Generales –como venían produciéndose hasta el momento-, una tasa del 3% de los ingresos anuales de los operadores de televisión privada y otra del 0,9% de los ingresos comerciales de los operadores de telecomunicaciones. Asimismo, la financiación de la televisión pública nacional se completará a través del 80% de la tasa sobre la reserva de dominio público del espectro radioeléctrico y de los ingresos derivados de la comercialización de sus productos y servicios.
Las primeras críticas contra este modelo de financiación no se han hecho esperar. Ante ellas, el Gobierno ha declarado que este sistema está inspirado en el modelo de
Por su parte,
Esteban Mayoral, presidente del sindicato de medios de comunicación APLI (Asociación Profesional Libre e Independiente), ha manifestado su preocupación por la aprobación del proyecto y la posible repercusión en la situación actual de los profesionales de los medios. Esta agrupación independiente, que representa a entidades como RTVE, Telecinco, ONO, ABERTIS TELECOM o EFE, considera que las nuevas medidas adoptadas no satisfacen a nadie.
Otras dieciséis asociaciones del sector se han sumando a las protestas, reuniéndose a principios de esta semana en la sede de
Eliminar la totalidad de la publicidad en TVE supone disminuir en un 24% la publicidad en televisión. Estas asociaciones temen que serán los ciudadanos los que al final pagarán los 550 millones de euros del presupuesto de RTVE, que hasta ahora provenía de las empresas en forma de ingresos publicitarios. Además, denuncian que 4.637 empresas se verán afectadas en su productividad, una situación que se traducirá en una pérdida de 18.000 puestos de trabajo. Se prevé que las empresas más perjudicadas serán aquellas cuyos productos se dirigen al público infantil de
Es evidente la necesidad de una reforma en el sistema de financiación de