Los mapas del cólera
La utilización de mapas como herramientas en epidemiología empezó en el siglo XIX con la llegada a Europa de la segunda pandemia de cólera. Aunque las causas de la enfermedad aún no se conocían, y se creía que la enfermedad la producían “miasmas” que se transmitían por el aire, los mapas publicados en 1831 y 1832 (como el que se muestra en la figura, o los que se muestran en (Koch, 2014)) indicaban que la epidemia no surgía aleatoriamente en uno u otro lugar, sino que progresaba siguiendo rutas precisas que coincidían con campañas militares o rutas comerciales, es decir que se transmitía de un lugar a otro siguiendo los movimientos de grupos de viajeros. En 1854 John Snow, que no creía en los “miasmas”, representaba los casos de cólera que se estaban produciendo en ese momento sobre un plano de Londres y conseguía identificar un foco local de la epidemia (comentado por Miguel aquí). Desde entonces la elaboración de mapas epidemiológicos se ha ido enriqueciendo con la recogida sistemática de datos, la informatización, y la utilización de Sistemas de Información Geográfica. La incorporación de información sobre serotipos ó genotipos añadió una nueva capa de complejidad, y permitió trazar las rutas seguidas por diferentes clones de un mismo patógeno. Ya en este siglo, la secuenciación de genomas completos abre el campo de la filogeografía genómica, que aporta un aumento importante a la resolución de los mapas en lo que se refiere a la información genética.

Mapa de las dos primeras pandemias de cólera por el cartógrafo añemán Carl Ferdinand Weiland, litografía coloreada a mano y publicada en hoja suelta. Los colores indican los años en los que se detecta el cólera en cada país. CHOLERA-KARTE oder Uebersicht der progressive Verbreitung der Cholera seit ihrer Erscheinung im Jahr 1817 über ASIEN, EUROPA under AFRICA. Weimar: Verlag des Geographischen Instituts, 1832. Obtenida de https://bostonraremaps.com/inventory/rare-cholera-map-weiland/