11 de febrero desde mujeres STEM a grandes pensadoras
El 11 de febrero se celebra día internacional de la mujer y la niña en la ciencia, que este año se celebra el 10 aniversario, y que en palabras del Secretario General de la ONU que “la igualdad de género en el ámbito de las ciencias es crucial para construir un futuro mejor para todas las personas. Sin embargo, las mujeres y las niñas siguen enfrentándose a barreras y prejuicios sistémicos a la hora de emprender carreras científicas”.
Pero reflexionando, sobre este día internacional de la mujer y la niña en la ciencia, considero que debería ser extensible además a tantas mujeres pensadoras desde filosofas o sociólogas y muchas otras expertas en otros campos del conocimiento. Y enlazando con esta reflexión he recordado mi visita a la interesante Exposición Materia Interior de Jaume Plensa de la Fundación Telefónica en Madrid. Cuando entras en la exposición, te detienes y admiras estas extraordinarias esculturas, con importante presencia de rostros femeninos, y donde el escultor nos invita a reflexionar sobre la condición humana. Hay esculturas como María una figura femenina de ojos cerrados, que invita a la contemplación y la introspección, y mientras la contemplaba pensaba en filosofas como Victoria Camps que a través de sus libros como “Elogio a la duda” o Adela Cortina donde su libro ¿Ética o ideología de la inteligencia artificial?: El eclipse de la razón comunicativa en una sociedad tecnologizada, este libro aborda todos los aspectos clave del debate en torno a la IA: el deber ético de las tecnociencias, la geoestrategia del poder, los desafíos de la robótica, la libertad en la era digital y el control del espacio público por parte de los algoritmos y las tecnologías. Esta pensadora aúna filosofía y tecnología, mostrando como en la actualidad las fronteras del conocimiento no son islas separadas sino están conectadas, me ha hecho recordar la maravillosa escultura Iris, que es la diosa griega símbolo del poder de la comunicación y la conexión humana. En este mundo cada vez más interconectado, donde las distancias se acortan y las barreras se desvanecen como antes se indicaba.
De la exposición también me llamó la atención Invisibles que el escultor representa la metaformosis del ser humano con tres rostros de mujeres hechos de mallas de acero, que permanecen suspendidos en el aire, atravesados por la luz y detenidos en el tiempo, y que me ha hecho recordar r a la socióloga María Ángeles Durán que recibió el Premio Nacional de Sociología y Ciencia Política del CIS , su interés por el ámbito de las mujeres se refleja en artículos de investigación y libros como “La riqueza invisible del cuidado” Y que ha acuñado el término «cuidatoriado» que se refiere al grupo de personas que se dedica fundamentalmente a cuidar, caracterizado porque la mayoría son mujeres, no cobran remuneración por realizar su trabajo.
Comenzaba este post el 11 de febrero se celebra día internacional de la mujer y la niña en la ciencia que nos recuerda que sigue siendo prioritario cerrar la brecha de género en la ciencia y derribar estereotipos, promover modelos de conducta que inspiren a las niñas, apoyar el avance de las mujeres a través de programas específicos y fomentar entornos inclusivos mediante políticas y acciones que promuevan la inclusión, la diversidad y la equidad. Y me ha hecho recordar cuando asistí como socia a la Asamblea a AMIT (Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas) dedicada al “Espacio como oportunidad para las científicas” donde pude comprobar el gran paso dado por mujeres como Sara García, bióloga molecular y científica, participante en entrenamiento inicial como astronauta reserva en el Centro Europeo de Astronautas (EAC) o Isabel Pérez Grande, directora de Ciencia e Innovación de la Agencia Espacial Española (AEE).
Para finalizar, me gustaría recordar que los desafíos de este siglo XXI requieren perfiles diversos y complementarios, para afrontar los retos presentes y futuros se necesita ciencia, tecnología, ingeniería, filosofía, sociología, psicología, etc. etc. Por ello este año, que se celebra una década del día internacional de la mujer y la niña, puede ser un buen momento para detenernos y reflexionar que las personas científicas se complementan con diferentes miradas y perspectivas de grandes pensadoras de otras disciplinas, que eviten puntos ciegos en el conocimiento.
FELIZ DÍA 11 de febrero Internacional de la mujer y la niña en la ciencia!!!