Primeras Reflexiones Sobre Nuestra Weblog
Primeras Reflexiones Sobre Nuestra Weblog
Hola a todos.
Como es costumbre todo nuevo año debe empezar con una declaración de buenos propósitos. En los primeros días del mes de Enero se suelen planificar las actividades que pensamos llevar a cabo durante el año que comienza. La realidad después nos pone en nuestro sitio y casi nunca llevamos a cabo los propósitos, pero en fin, es bueno empezar con la conciencia de que algo debe cambiar en nosotros si pretendemos seguir mejorando. Mis buenos propósitos de este año, en el campo de la weblog, son dos: primero, nuca más voy a hacer «alegatos» en favor de la Edafología, y segundo, las aportaciones serán más numerosas, aunque procuraré que sean más cortas.
El motivo de estos propósitos es que analizando los escritos enviados durante en pasado año y el número de visitas que la Weblog ha tenido, por cierto de alta aceptación, parece desprenderse que gustan más las cuestiones conceptuales: textura, estructura, intercambio iónico, etc., que las dedicadas a planteamientos más generales.
Este hecho me hace pensar que muchos de los visitantes a esta página están más interesados en conocer el suelo y su composición, que leer disquisiciones sobre la importancia de la Edafología en el panorama científico actual, tema este sin duda importante, pero seguramente para tratar en otros foros.
Dicho esto, también me gustaría animar a participar, bien con preguntas, bien con opiniones, a quienes tengan interés en los temas ambientales, ya que esto enriquecería el debate, que en el fondo es el objeto de este proyecto.
Como no quiero empezar faltando al propósito del nuevo año, termino con una cuestión de gran importancia para la ciencia del suelo, que es el concepto de horizonte.
Definir los horizontes y caracterizar sus propiedades es esencial para estudiar un suelo, ahora bien surge en este punto un problema de partida, y es determinar cuando una capa o estrato tiene características de horizonte genético, y cuando se le considera una capa de sedimentos sin relación edáfica con las capas sobreyacentes.
En próximas colaboraciones aclararemos alguno de estos conceptos. Espero vuestras intervenciones.
Antonio López Lafuente