La agricultura en Latinoamérica para lograr una diversificación productiva la Región (Libro del BID)
Fuente: Colaje BID y Google Imágenes
“Apostar por la agricultura para lograr una diversificación productiva” es el título de un documento publicado por “Banco Interamericano de Desarrollo” con vistas a intentar engrasar la agricultura latinoamericana y obtener la seguridad alimentaria y mayores beneficios económicos y ecológicos para esta región. Abajo os dejo algunos documentos y enlaces. He observado que gran parte de las valoraciones en internet proceden de diferentes países haciendo énfasis en sus respectivos territorios, por lo que no es fácil elaborar una síntesis. En consecuencia, a falta de una mayor información, he elegido dos, por orden de aparición en Google. ¡Perdonarme los restantes!
Como sabéis los lectores más asiduos a esta bitácora, soy de la opinión que los documentos de las instituciones internacionales son políticamente correctos, pero no suelen ser seguidos por los países y empresas, en ningún continente del mundo. Sin embargo, dado que la mayor parte de los lectores sois latinoamericanos considero que publicitar esta documentación es importante para vosotros. Se incluyen casi todos los tópicos en boga alrededor del mundo, Sin embargo, me genera pánico (a falta de una lectura profunda) los comentarios vertidos sobre empresas extractivas por cuanto son fuente de crisis ambientales (a menudo con efectos sobre la salud pública de los moradores) y hasta el momento los principales beneficios van a parar a manos de multinacionales son sedes en otros países, secuestrando pingues beneficios a sus genuinos propietarios. ¡mucho cuidado por favor!
Del mismo modo, en dos publicaciones propias que podéis ver más abajo, y que se encuentran en acceso abierto, ya advierto que antes de pensar en el mercado global, estrechar los lazos en mercados regionales, bajo los auspicios de un gran acuerdo entre la Mancomunidad de países regionales, al estilo de la “Unión Europea” abriría muchas puertas con vistas a paliar ciertos problemas regionalmente y defender los intereses de todos vosotros en los foros internacionales, Banco Mundial y Fondo Monetario internacional.
Finalmente desear todo lo mejor en un entorno incierto que no va a cambiar para bien, visto las incertidumbres geopolíticas, así como por lo impredecibles eventos extremos que está causando el calentamiento climático, a través de las sequías e inundaciones que están azotando a la agricultura mundial y lo seguirán haciendo. A veces más vale prevenir que curar, garantizar al menos un cierto grado de autarquía y no obsesionarse por los mercados globales, sopena que luego se generen conflictos internos por la carestía o falta de alimentos. Vivimos en un mundo plagado de incertidumbre imprevisibles, como el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania ha mostrado, por no hablar lo que puede avecinarse con el cambio climático, con sus inmensos perjuicios para la agricultura y ganadería, ¡en todo el mundo!.
Espero que el texto sirva de ayuda a los que aún no lo conozcan.
Juan José Ibáñez
Continúa……..
NUEVOS HORIZONTES DE TRANSFORMACIÓN PRODUCTIVA EN LA REGIÓN ANDINA
Apostar por la agricultura para lograr una diversificación productiva
Conectar a la agricultura con nuevas oportunidades económicas puede impulsar el desarrollo de Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela, tomando en cuenta el peso del sector en el crecimiento económico y el empleo, y su probada resiliencia ante choques adversos como la pandemia.
En esta publicación se abordan los desafíos transversales para materializar los beneficios del agro, retos estructurales de larga data relacionados con su reducida productividad, cuellos de botella como la limitada infraestructura multimodal de apoyo y algunos aspectos institucionales. También ofrece una reflexión sobre ajustes en las prioridades y plazos de acción ante el cambio climático, y formas de impulsar la equidad de género y empoderamiento de las mujeres en este sector productivo.
Banco Interamericano de Desarrollo
Banco Interameticano de Desarrollo
AUTORES Castilleja Vargas, Liliana; Gutiérrez Juárez, Priscilla; Laura, Luis F.; Serrudo, Luis Fernando
FECHA; May 2023; Español (4393 descargas)
Ver en línea; Descarga; DOI: http://dx.doi.org/10.18235/0004920
Sin lugar a duda, la agricultura juega un papel importante en el desarrollo económico y social de los países andinos por su importancia socioeconómica, en la seguridad alimentaria y por su potencial para contribuir a un crecimiento más inclusivo y sostenible. Una actividad milenaria que ha moldeado la forma de vida de las comunidades andinas y continua formando su destino. El sector ha mostrado su resiliencia y su potencial para contribuir a la economía, a pesar de choques como el de la pandemia COVID-19.
Actualmente este sector abre un abanico de oportunidades para la diversificación productiva, inclusión social y las metas climáticas suscritas. Como lo plantea este libro, lo anterior es posible a través de esquemas productivos inclusivos y amigables con el medio ambiente que ayuden a reducir las emisiones de carbono generadas por este sector, atendiendo aspectos como la acelerada deforestación y el uso eficiente de los recursos hídricos, y sobre todo generando beneficios, socioeconómicos y ambientales, que superar los costos.
Para materializar estos beneficios se requiere abordar desafíos estructurales de larga data relacionados con la reducida productividad del sector, cuellos de botella como la limitada infraestructura multimodal de apoyo, aspectos de corte institucional, ajustar las prioridades y plazos de acción ante la amenaza del cambio climático, e impulsar la equidad de género y empoderamiento de las mujeres en la agricultura. A lo largo del libro, se presentan espacios de oportunidad para aumentar la inclusión de las mujeres agricultoras y contribuir a su empoderamiento y desarrollo; mitigar el impacto del cambio climático en la agricultura, incluyendo cultivos esenciales; catapultar la diversificación productiva y el posicionamiento de la oferta agrícola andina en mercados nicho y de alto valor agregado, incluyendo super alimentos, el sector forestal y Agtechs.
Conectar al sector agrícola con nuevas oportunidades económicas es uno de los grandes objetivos en materia de políticas públicas de los países de la región. En este sentido, existe una oportunidad en los países andinos para lograr desarrollar cadenas de valor brindando múltiples ventajas que van desde la mejora de la productividad del sector, la creación de empleo, el impulso al sector exportador y su impacto en la balanza de pagos, hasta la generación de prosperidad, bienestar y calidad de vida para la población, en particular de las zonas rurales. Apostar por la agricultura es una estrategia donde todas las partes ganan. Es momento de tomar acción y materializar los beneficios para todos.
La receta del BID para lograr una transformación productiva en el país
El banco entregó un reporte en el que analiza los retos en áreas como la agricultura, los encadenamientos, los servicios y las industrias extractivas.
LAURA LUCÍA BECERRA ELEJALDE
La agenda global apunta a la construcción de economías descarbonizadas en las próximas décadas y el éxito para los diferentes países dependerá de las decisiones que tomen para ello.
(Vea: Costos de transportadores subieron 11% a final de año).
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) presentó ayer el reporte ‘Nuevos horizontes de transformación productiva en le Región Andina’, en el que destacó algunos retos de Colombia y la región, en cuatro áreas: agricultura, encadenamientos productivos, el sector de servicios y las industrias extractivas.
(Vea: Qué porcentaje de emisiones de CO2 es provocado por la agricultura).
Allí enfatiza en que, tras la ratificación del Acuerdo de París, en 2021, el mundo puso en marcha una agenda de descarbonización que ha llevado a la región a enfrentar grandes retos, y también oportunidades.
“Estos son los sectores que han estado en el centro del debate por lo que sucedió en la pandemia. El agro fue el que más creció, los servicios son el mayor empleador en la región; las cadenas productivas toman relevancia por las disrupciones que sufrieron y las industrias extractivas están en el centro de esa transición”, destacó Osmel Manzano, economista líder para la región del BID.
(Vea: Agricultura sigue en vilo ante la escasez de los fertilizantes).
Sector agropecuario
El estudio revisa la situación de los países andinos y sus múltiples similitudes. Para Colombia se destaca como la agricultura se perfila como un sector con alto potencial. Durante el año de pandemia (2020), mientras el PIB nacional se desplomó, el sector agropecuario creció a una tasa del 2%.
(Vea: Consolidando el papel de la agricultura hacia la COP28).
Sin embargo, los retos en productividad persisten.
“Colombia es el único país con crecimientos recientes en la productividad agropecuaria, pero en el resto de la región las brechas persisten. En general es un desafío. Y a ello se suman los impactos del cambio climático”, destacó Manzano.
Entre las recomendaciones del BID está proveer infraestructura estratégica y abordar la agenda institucional pendiente, para simplificar la vida de los agricultores.
El BID hizo un estudio de 13 cadenas productivas en la región, e identificó los cuellos de botella.
Encadenamientos
Los encadenamientos productivos son otra de las necesidades.
Manzano destacó que la región no solo está poco insertada en las cadenas globales, sino que tampoco se ha afianzado una integración regional, y que se debe trabajar en la armonización de reglas. También se refirió a la necesidad de avanzar en la digitalización y el acceso a crédito para que las pymes se puedan insertar en estos sistemas. Además, el informe enfatiza en la importancia de la inversión extranjera, y destaca el rol de entidades como ProColombia en la promoción del país.
Los servicios
Los servicios, por otro lado, se destacan como el principal empleador, pero también con desafíos en productividad. Estos fueron altamente afectados la pandemia, y uno de los cuellos de botella en la región es la baja digitalización. Pese a ello, el reporte destaca que tan solo en Colombia el sector tiene el potencial de contribuir con 1,7 millones puestos de trabajo adicionales para el año 2050, con un énfasis especial en ramas de computación o subcontratación de procesos empresariales.
Industrias extractivas
El último gran desafío es la transformación de las industrias extractivas. Que para el país resulta crucial no solo por la agenda del Gobierno actual sino a futuro. El BID destaca la importancia de generar un valor compartido entre la industria, las comunidades en áreas mineras, la ciudadanía y las administraciones locales. Y propone que el proceso de descarbonización impulse el potencial de aumentar la demanda de metales como cobre, níquel y grafito. Por ello propone una mayor exploración de estos metales en Colombia.
“El sector está en el centro de la transición, y todavía tenemos brechas institucionales en la región. Hay que hacer una trabajo en la agenda institucional para generar confianza; obviamente hay una tarea de diversificar los ingresos fiscales y hay que apoyar el desarrollo de capacidades del sector e incentivar la adopción de tecnología”, dijo.
LAURA LUCÍA BECERRA ELEJALDE
PERIODISTA PORTAFOLIO
Nuevos horizontes de transformación productiva en la Región Andina”.
Los países andinos pueden aprovechar una serie de oportunidades para su transformación productiva y hacer frente a eventos globales que están impactando sus procesos de producción. La apuesta en sectores como la agricultura, encadenamientos productivos, servicios e industrias extractivas tiene el potencial de contribuir a la diversificación de las economías de Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia y Venezuela.
Compartimos el prólogo de la publicación escrito por TOMÁS BERMÚDEZ Gerente General Departamento de País del Grupo Andino
LaRegión Andina se encuentra en un momento en el que la toma acertada de decisiones se torna indispensable. Luego del Acuerdo de París, el mundo ha puesto en marcha una agenda de descarbonización; es posible que existan desafíos en su implementación, pero el mundo ha decidido avanzar en esta dirección. La región se enfrenta a grandes retos, pero también a muchas oportunidades.
Las materias primas relacionadas con combustibles fósiles representan un cuarto de las exportaciones de la región y contribuyen en más de 10% a los ingresos fiscales.
La región tiene todavía un potencial no desarrollado en cobre, litio y otros materiales; minerales necesarios para esta transición, que hoy en día representan un 20% de las exportaciones. A esta realidad, se suman las consecuencias de la pandemia. Más allá de los altos costos en términos de pérdidas de vida humana y de actividad económica, la pandemia ha traído también impactos estructurales.
En particular, la pandemia ha significado una puntada de inflexión para la digitalización y la automatización, al punto que en pocos meses se ha adoptado un nivel de tecnología digital acelerado que en condiciones prepandémicas habría tomado varios años.
Adicionalmente, la pandemia significó una disrupción importante en las cadenas logísticas a nivel mundial, lo cual ha llevado a la necesidad de un reposicionamiento de estas. Finalmente, el sector servicios se vio particularmente afectado por la pandemia y algunos de estos efectos van a continuar en el largo plazo.
Este sector es el mayor empleador de la región y, por lo tanto, estos choques tienen impactos sociales significativos. Todos estos desafíos llegan en un momento particular para la región.
Luego de crecer a un promedio del 4,2% entre los años 2000 y 2014, el crecimiento de la región se ha desacelerado. Este crecimiento de principios de siglo fue crucial: la región pasó de ser una región donde el 58% de la población vivía en condiciones de pobreza a convertirse en una región donde el 72% de la población es de clase media.
La perspectiva de crecimiento de largo plazo para la región es del 2,9%. Este crecimiento no será suficiente para mejorar las condiciones de vida de la población, sobre todo en un contexto donde, a raíz del surgimiento de esta nueva clase media, el Estado registra nuevas demandas y necesidades sociales que no va a lograr satisfacer. Aun antes de la pandemia, se observaron movimientos sociales importantes en la región, que es necesario abordar, y que se han exacerbado con la realidad actual pos-COVID.
No es la primera vez en la historia de nuestra región que se destaca la importancia de la transformación productiva. Es un tema recurrente en el debate político de la región. Sin embargo, podría decirse que el origen de este debate proviene principalmente de la “abundancia” en la región de bienes primarios y el deseo de contar con una estructura productiva más diversificada y de evitar los vaivenes del mercado de estos bienes.
Esta vez, el debate viene impuesto por cambios tecnológicos externos que están afectando, y seguirán haciéndolo, a los productos que vende la región. Por lo tanto, la transformación pasa a ser una necesidad. En el pasado, la región no ha sido ajena a choques derivados de cambios tecnológicos externos, por ejemplo: la crisis del guano, la del caucho y más de una crisis del café.
Un elemento común de esas crisis fue la falta de anticipación y las importantes consecuencias económicas y sociales generadas por ellas. No obstante, hay que resaltar que la crisis del café de finales del siglo pasado fue manejada de forma distinta en Colombia y se produjeron cambios estructurales importantes, gracias a un esfuerzo de coordinación, lo que indica la importancia de anticipar estas transiciones y no solo pensar en ellas cuando se está en medio de una crisis.
Como se recalcara anteriormente, se abren oportunidades para América Latina. Lamentablemente, la región también ha experimentado periodos de bonanzas mal administrados como, por ejemplo, las diversas crisis de deuda ocurridas luego de estas etapas de prosperidad.
Por todo ello, resulta fundamental plantearse cómo encarar este cambio estructural que está ocurriendo en el mundo y su impacto en la región. Aunque algunos de los cambios ocurrieron de manera imprevisible, en particular los derivados de la pandemia, una ventaja es que se trata de una transición anunciada. Por lo tanto, la región puede planificar cómo abordarla.
Este trabajo del Departamento del Grupo Andino del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) busca aportar ideas para esta reflexión. Esta publicación no pretende ser un tratado exhaustivo de cómo afrontar la transición. Desde el BID hemos venido haciendo algunas recomendaciones sobre decisiones de política que deben tomarse ante este contexto, así como sobre los compromisos adquiridos por los países. Adicionalmente, algunos laboratorios de ideas ( think tanks ) de la región también han venido planteando propuestas sobre esta transición. Por ende, lo que buscamos con este trabajo es complementar dichos planteamientos.
La presente publicación analiza aquellos sectores que pueden verse beneficiados o afectados por esta transición: agricultura, encadenamientos productivos, servicios e industrias extractivas. El estudio busca hacer una propuesta para generar oportunidades en estos sectores. Asimismo, el trabajo aborda la realidad de la digitalización y cómo se pueden aprovechar sus beneficios en la región.
Para concluir, una agenda de transición productiva es una agenda de empleo. Sin embargo, es importante que sea un empleo inclusivo; por ello, los temas de inclusión forman parte esencial de esta investigación. Con esto se complementa el reciente estudio del Departamento sobre las acciones en temas transversales (como infraestructura, regulación, entre otros) que deben tomarse en consideración en la región para alcanzar un mayor crecimiento.
Esperamos que esta sea una fuente de diálogos sobre la transición productiva que complementen la acción del Banco para asistir y colaborar con nuestros países miembros para lograr el objetivo común.
Algunas contribuciones del autor en Researchgate (acceso abierto)
Ibáñez, J. J. 2017. Revista de la Facultad de Ciencias. Universidad Nacional de Colombia. Artículo Editorial. 6 (2): 8-10. Rev. Fac. Cienc., Volumen 6, Número 2, p. 8-10, 2017. ISSN electrónico 2357-5549. ISSN impreso 0121-747X.
DOI: https://doi.org/10.15446/rev.fac.cienc.v6n2.68651. Libre acceso desde https://revistas.unal.edu.co/index.php/rfc/article/view/68651/63043
Ibáñez, J. J. 2018. La Ciencia en Latinoamérica: Tendencias y patrones Revista de la Facultad de Ciencias Vol. 7 (1): 23-39. Universidad Nacional de Colombia. Artículo Invitado. DOI: https://doi.org/10.15446/rev.fac.cienc.v7n1.69409. Libre acceso desde: https://revistas.unal.edu.co/index.php/rfc/article/view/69409/63680
Ibáñez, J. J. 2018. Revista de la Facultad de Ciencias. La Unión Hace la Fuerza: Bases para un pleno desarrollo de la indagación científica en Latinoamérica. Univeridad nacional de Colombia Artículo Invitado. Rev. Fac. Cienc., 7(2): 44-61, 2018. ISSN electrónico 2357-5549. ISSN impreso 0121-747X. https://doi.org/10.15446/rev.fac.cienc.v7n2.72721.
Ibáñez, J.J. 2019. Los suelos y la agricultura ecológica en la era de la postverdad (artículo de reflexión) Suelos ecuatoriales 49 (1 y 2): 96-110 ISSN 0562-5351 e-ISSN 2665-6558. http://unicauca.edu.co/revistas/index.php/suelos_ecuatoriales/article/view/109
Ibáñez, J. J. 2010. El concepto de suelo, su clasificación y representaciones canónicas. Conferencia Magistral, XV Congreso Colombiano de la Ciencia del Suelo “El Suelo: Soporte de la Biodiversidad y Producción en Agroecosistemas Tropicales”. Hotel de Pereira, Pereira-Risaralda. Octubre 27-28 y 29 de 2010. Sociedad Colombiana de la Ciencia del Suelo.
Ibáñez, J. J. 2010. Blogosfera, Edafosfera y Divulgación Científica: Compromiso Social de la Ciencia del Suelo. Conferencia Especial. Comisión de la Ciencia del Suelo. XV Congreso Colombiano de la Ciencia del Suelo “El Suelo: Soporte de la Biodiversidad y Producción en Agroecosistemas Tropicales”. Hotel de Pereira, Pereira-Risaralda. Octubre 27-28 y 29 de 2010. Sociedad Colombiana de la Ciencia del Suelo.
-Ibáñez, J.J. 2012. Comité Editorial de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional de Colombia.
- Miembro Honorario de la Sociedad Colombiana de la Ciencia del Suelo por sus aportaciones relevantes a la ciencia del suelo.