Además de los contaminantes habituales de todas las corrientes de agua, de las que hablamos en las anteriores contribuciones, tenemos los producidos por las industrias y los plaguicidas agrícolas.  Por cierto la región de los Tuxtlas en este aún bello estado, tiene un lugar nada honroso a escala mundial con unos de los suelos mas contaminados por agroquímicos, resultado del cultivo intensivo del tabaco.  Por otra parte los ríos y arroyos mexicanos también se encuentran muy contaminados. Entre todos ellos sobresale el Río Blanco, que posee el ingrato record para Veracruz de ser el más polucionado cuando menos a nivel nacional.

 

 

 

Una rica paella que puede estar contaminada, los camarones con mercurio y el arroz con …

 

Así en la zona de Piedras Negras, donde se utilizan sus aguas para el riego, se realizaron en los años 80´s del siglo pasado, determinaciones de plaguicidas organoclorados y ftalatos en muestras de arroz y suelos. Los contaminantes hallados con mayor frecuencia en arroz fueron heptacloro, HCB, g+HCH y p’p’-DDE, variando de 0.87 a 7.15 nano gramos por gramo. En el suelo fueron p’p’DDT y productos de su transformación como p’p’DDE, p’p’DDD y ftalatos de dimetilo, dietilo y dibutilo. Los ftalatos son plastificantes usados en la industria, entre otros del PVC. Tanto los clorados como ftalatos tienen alta estabilidad química y elevada persistencia. Además se bioacumulan en los tejidos grasos de los seres vivos, según nos recuerdan Álbert et al. (1988).

 

Adicionalmente, se hicieron determinaciones de residuos de plaguicidas organoclorados en leches deshidratadas y maternizadas. Resulta que todas las leches del mercado nacional, presentaron residuos de siete u ocho pesticidas organoclorados, siendo mayores (desde 10 a 45 veces más) en las maternizadas. Estas exceden en un 100% el máximo permisible por FAO/OMS, de acuerdo con Álbert y Viveros (1988).

 

 

 

La leche maternizada en México esta aún mas contaminada que la común.

Fotografía Fuente: www.uchicagokidshospital.org/images/gs/up_0038.jpg

 

Otro ejemplo de las consecuencias del manejo inadecuado del agua residual, resulta ser la extracción de pectinas, durante un tiempo prolongado (más de 15 años), en la Llanura Costera de Tecoman Colima. La EPA (1997) señala daños recientes causados en estas planicies (consideradas además como ambientes frágiles) por un manejo irresponsable de las aguas residuales. Así las concentraciones de Sodio (Na) en los horizontes superiores es mayor en áreas irrigadas con agua industrial, donde se han incrementado de 1.78 a 3.74 veces. La concentración de cloro (Cl) es de 2.04 a 3.8 veces mayor. La diferencia principal entre suelos no irrigados e irrigados con aguas industriales es que en estos últimos el Na y Cl en solución se presentan en todo el perfil.

 

Pero cuando menos en un pozo de observación, el contenido de Nitratos ya es superior al límite aceptable. Dado que los nitratos son muy solubles, en combinación con las texturas gruesas del suelo, la lámina de agua residual aplicada junto a la aportación pluvial, existe un alto riesgo de que dichas moléculas se lixivien a capas inferiores del suelo, contaminando las aguas freáticas. Lo anterior resulta ser de gran importancia en el abastecimiento público de aguas, ya que puede ocasionar problemas de metahemoglobina en infantes. Además a todo ello hay que añadir los perjuicios que altos valores de pH por efecto del Na y acumulaciones de sales tienen en los suelos (Pérez-Zamora, 2002). Donde se ha abusado de los fertilizantes nitrogenados, es muy probable que sus mantos freáticos tengan contenidos peligrosos de nitratos. Esto sobre todo en cultivos intensivos como hortalizas para exportación y monocultivos como la caña de azucar.

 

 

 

Lesiones cerebrales con melanoma con metastastasis y hemorragias

provocadas por metahemoglobina Fuente: anatpat.unicamp.br/Dsc33466+.jpg

 

Podemos concluir que tan solo después de que se hayan tomado en cuenta todas las precauciones técnicas y sanitarias, el riego con aguas residuales debe considerarse como un factor de desarrollo, en lugar de subdesarrollo. Por otra parte, cuando se presentan altas precipitaciones, y como consecuencia tenemos las grandes avenidas o crecidas de los ríos (que a su vez provocan las inundaciones), los problemas se agudizan más aún.

 

Las inundaciones.

Si una de las consecuencias de erosión del suelo son las inundaciones y entre las más famosas tenemos las del Río Nilo, sin las cuales difícilmente se hubiera desarrollado la civilización egipcia. Estos eventos, son una fuente importante de los sedimentos ricos en nutrientes que fertilizaron durante siglos los suelos de sus riveras forma natural, hasta que la locura tecnológica engendró de la Presa de Asuan. Pero ejemplos menos conocidos existen alrededor de todo el mundo. Uno de ellos es el estado de Tabasco, cuyos suelos medio en broma se dice que son de Chiapas. Es sabido que la parte alta de los ríos tabasqueños se encuentra principalmente en ese estado.

 

 

 

Presa de Asuán Fuente: www.enciclopedia.com/…/85/Presa_alta_Asuan.jpg

 

 En Veracruz sucede un fenómeno similar en la cuenca del Río Papaloapan. Tal hecho reviste mayor importancia debido a los cotidianeidad de los fenómenos ciclónicos en la región. Así, se han observado precipitaciones de 217 a 233 litros por metro cuadrado en un día, (una lámina de algo mas de dos metros de espesor), según nos narra Tejeda (2006), cuando la suma de los promedios de lluvia acumulada en varios años, en ciudades como Xalapa (Veracruz) es 1.5 metros.

 

Las mentadas inundaciones antiguamente permitieron la expansión y fertilización de la edafosfera en los causes y desembocaduras de dichas vías fluviales. Sin embargo, este proceso natural ha sido perturbado con el despliegue de diversos tamaños y tipos de presas, que impiden el flujo de los sedimentos tanto hacia tierra firme como al mar (Velasco y Ramos, 2006).

 

En los dos últimos casos citados, enormes presas se han convertido en reservorio o trampas de sedimentos, aunque de momento son generadoras de energía eléctrica para el resto del país. Al problema de los represamientos cabría añadir el ocasionado por las infraestructuras portuarias y el sellado del suelo, con carreteras, urbanismo, etc.

 

Aunque existen instrumentos como la batimetría de embalses, inclusive en México, Chávez y López (2006), avisan que se carece de los estudios integrales necesarios de las cuencas hidrológicas, que permitan hacer prospecciones de la erosión geológica y la inducida por el ser humano, que nos informen de la localidad idónea para ubicar embalses, así como de sus estados de colmatación por los sedimentos atrapados, como nos comentó Juanjo Ibáñez en dos post previos:

 

Las Presas y Embalses: Una Bendición para la Humanidad y un Desastre Ecológico

Una Nueva Perspectiva de la Alteración del Ciclo Hidrológico Global por el Impacto Antrópico (los Suelos)

 

  

 

Typha latifolia, europea, aunque las especies americanas son muy similares.

 

Las inundaciones a pesar de los beneficios que hemos reportado, acarrean consecuencias poco estudiadas. Los edafólogos sabemos sobradamente que, en los suelos calcáreos con deficiencias de Fe, la inundación provoca la reducción del Fe y lo torna asimilable. Sin embargo, una aproximación más sofisticada consiste en abordar un análisis enzimático. Se ha observado que la actividad de la fosfatasa ácida (APA) no varía tan dramáticamente como el P total en suelo, pero es diferente en el detritus propio de cada uno de los tipos de vegetación, de las comunidades afectadas. La de la APA en suelo y detritus era mayor en el área de Panicum. En este género de pastos muy común sobre todo en áreas pastoriles, la especie maximun es conocido como Guinea o Privilegio. Mientras que la ß-ß-glucosidasa resultaba serlo en la de Typha, con diferencias temporales significativas. Este taxon biológico es común en áreas inundadas casi permanentemente. Las diferencias en el tiempo, periodo fenológico y la duración de la inundación desempeñan un papel importante en la actividad de las enzimas. Así, fue en los enclaves del Panicum y de Cladium, los que al inundarse alcanzaron la anaerobiosis mas tarde, dentro de su estación de crecimiento. Los datos de este estudio indican cambios en el ciclo biogeoquímico de los elementos en los suelos y de los detritus asociado a las comunidades de la vegetación en las áreas del cargamento histórico de nutrimentos (Prenger y Reddy, 2004).

 

Debido a la localización inadecuada de muchas plantas industriales que producen residuos o compuestos tóxicos, actualmente las inundaciones pueden devastar muchas de ellas, generando graves contaminaciones cuenca debajo de suelos y aguas, como por desgracia acaba de ocurrir este año en China. Tal desastre supone un serio gravamen para la salud pública al impedir beber a los habitantes de la zona y comprometer el futuro de toda la cadena alimentaria.   

 

Citas Selectas.

Albert, L. A., y A. D. Viveros. 1988. Residuos de plaguicidas organoclorados y ftalatos en muestras de arroz y suelo de Piedras Negras, Veracruz. BIÓTICA.

 

Albert, L. A., P. Vega, G. Aguirre-Beltrán y P. Aldana-Torres. 1988. Residuos de Plaguicidas organoclorados en leches deshidratadas y leches tipo maternizadas. BIOTICA. 13(1-2): 59-67.

 

Chávez L. S., y A. D. Álvarez A. 2006 Batimetría, sedimentos y ambientes de depósito en la laguna costera de Guásimas Sonora, México. Investigaciones Geográficas. Bol. Inst. Geogr. UNAM. México D.F. Agosto 60: 7-21.

 

Pérez-Zamora, O., 2002. Efecto de la aplicación de aguas residuales industriales en las propiedades físicas y químicas del suelo . Agrociencia. 36 (3): 279-290. 2002.

 

Prenger J. P. and K. R. Reddy (2004). Microbial Enzyme Activities in a Freshwater Marsh after Cessation of Nutrient Loading Soil Sci. Soc. Am. J. 68:1796-1804.

 

Tejeda M. A. 2006. Panorámica de las inundaciones en el estado de Veracruz, durante 2005. En Inundaciones 2005 en el Estado de Veracruz. Universidad Veracruzana, COVECYT. Xalapa Ver.

 

Velasco T. J. y G. Ramos P. 2006. Agua: símbolo de vida y muerte en el bajo Papaloapan. En Inundaciones 2005 en el Estado de Veracruz. Universidad Veracruzana, COVECYT. Xalapa Ver.

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2 comentarios

  1. Estimado Dr. Ibáñez, estoy leyendo todo su blog sobre epistemologia y me parece sencillamente genial. soy estudiante de doctorado (en ciencia de materiales) y estoy cursando esta materia y leer tus notas me ayuda muchisimo!

    Gracias Juanjo por ayudarnos a entender en que lio nos metemos y como son las cosas realmente.

    Te cuento que te leo desde San Nicólás, Bs. As., Argentina, y que les estoy pasando a mis compañeros tu direccion de blog para que te lean tambien.

    Gracias!!

    Un abrazo

    Nicolás

  2. Te agradezco mucho tus palabras Nicolás. Me ayudan a seguir escribiendo para vosotros. Eso sí, este no es un blog de epistemología sino de suelos (edafología, pedología). Sin embargo, añadí un pequeño curso de filosofía y sociología de la ciencia por cuanto creo que son imprescindibles en la formación de los jovenes científicos.

    Cordiales saludos desde España.

    Juanjo Ibáñez

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