Como ya comentamos en un post anterior, el estudio de los suelos acuáticos a penas ha sido abordado por los edafólogos, por cuanto una buena parte de las taxonomías edafológicas solo tienen como objeto de estudio los terrestres (no sumergidos) y las turberas (edafotaxa orgánicos no sumergidas o tan sólo de forma temporal), pero no a los que se encuentran permanentemente bajo el agua. También os informamos que la antigua clasificación de Kubiena (1953), fue tremendamente innovadora en este aspecto, clasificando tanto los suelos subacuáticos como sus tipos de materia orgánica (humus). En este post, repasaremos brevemente la clasificación de los tipos de humus subacuáticos realizadas por la escuela germana (Kubiena, Lundqvist, 1927 y otros).

 

 

 

Dy (izquierda) e Gyttja  eutrófica (derecha)

Fuente: Kubiena, 1953, CSIC

 

Resulta muy difícil encontrar bibliografía en Internet sobre este tema, por cuanto tales clasificaciones y terminologías, en gran medida, han caído en el olvido. Los términos que permanecen aislada y esporádicamente en la bibliografía, en lo concerniente a los tipos de humus subacuáticos, son los siguientes: Dy, Gyttja y Sapropel. Sin embargo, no he logrado detectar en mínimo de consenso entre los expertos, ofreciéndose de ellos definiciones muy dispares. Os expondré para comenzar unos ejemplos:

 

Sapropel y Gyttja y Sedimentos de origen orgánico

Pueden diferenciarse dos grupos: aquellos que están constituidos por acumulaciones de partes duras de los organismos  -y que no han sufrido un verdadero transporte-  y los que están formados por el depósito de las partes blandas.  A los primeros corresponden los sedimentos de diatomeas, que se localizan en lagos de regiones frías, ya que el desarrollo de estos organismos está favorecido por temperaturas bajas. En verano se forma una capa de diatomeas, en las aguas superficiales, que al alcanzar un grosor determinado (unos pocos milímetros) se hunde (Kukal, 1971). Además de las frústulas de diatomeas se encuentran en estos depósitos fragmentos de plantas, limos y arcillas.

 

Las partes blandas de los organismos que viven en un lago, al morir éstos, se acumulan y lo hacen generalmente junto con los sedimentos más finos; una vez depositadas comienzan a sufrir procesos de descomposición. En unos casos estos procesos tienen lugar en condiciones oxidantes, mientras que otras veces se realizan en ausencia de oxigeno. Los productos resultantes son de varios tipos, dependiendo de la naturaleza de la materia orgánica original y de las características físico-químicas del medio. Los más importantes son el sapropel y la gyttja; el primero se forma como producto de alteración, en condiciones reductoras, de macrofitas, mientras que la gyttja deriva de materiales ricos en grasas y proteínas, procedentes principalmente de organismos planetonicos, cuya alteracion se realiza en condiciones oxidantes (Kukal, 1971). No se sabe, sin embargo, si en la naturalaza del producto final tiene más importancia el material original o el modo de alteración.

 

 

Información extraída de la obra: «Estratigrafía», de Inmaculada Corrales, Juan Rosell, Luis Sánchez, Juan A. Vera y Lorenzo Vilas. Ed. Rueda, Madrid, 1977.

 

 

 

Sapropel, Dy y Gyttja

6.1.3. DESCRIPCIÓN Y CLASIFICACIÓN

La utilización de corers transparentes permite una inspección ocular inicial del sedimento in situ, en particular de su estructura vertical. Algunas características conspicuas como el color, consistencia, tamaño de grano, composición, presencia de restos vegetales o animales, y sus cambios en profundidad, deben ser registradas oportunamente. Esto permite una clasificación directa, como la basada en Naumann (1931):

1) Fracciones orgánica e inorgánica bien mezcladas, granos pequeños:

a) poco contenido orgánico, bien oxigenado, gris o marrón grisáceo: GYTTJA

b) contenido orgánico alto, anaeróbico, negro, olor a sulfhídrico: SAPROPEL

2) Fracción orgánica dominante, blando (como gel), color marrón sucio: DY

 

 

Gytia: (Del sueco gytija): Barro o lodo semipútrido de color verde-grisáceo originado en turberas y aguas interiores (con entrada de oxígeno). La formación marina correspondiente es la Mudde.

 

En el cuadro de abajo (lamento no haber podido conseguir una imagen más nítida), se ofrece un análisis comparado, es decir la correspondencia entre los tipos de humus subacuáticos, semiterrestres y terrestres, que os puede ayudar a fijar conceptos, aunque seguramente algunos edafólogos no estén de acuerdo. 

 

 

 

Humus subhídrico, semiterrestres y terrestres

 

En el enlace que os proporciono a renglón seguido puede bajarse un documento en pdf, aunque escrito en Suahili, que ofrece más información sobre la materia: Clasificación de sedimentos lacustres: Sapropel, Dy y Gyttja. Siguiendo a Ludqvist (1927) e incluyendo algunos aspectos comentados por Kubiena en su libro, así como consideraciones de otros de autores posteriores, intentaré ofrecer (con muchas limitaciones) una caracterización de los tipos de humus mencionados:

 

Gyttja: fangos blandos, en un ambiente neutro (pH entorno a 7), consistentes de una mezcla de compuestos orgánicos y minerales finamente divididos, derivados principalmente de la deposición del plankton en los lechos lagunares. Abundan los coprolitos, es decir los productos fecales de los organismos acuáticos que ingirieron previamente biomasa, necromasa y partículas minerales. Recordemos que los Chernozems terrestres son ricos en coprolitos de las lombrices. Los organismos bénticos, realizan un intenso proceso de edafoturbación (mezcla de materiales), de tal modo que tienden a difuminar cualquier tipo de estratificación, sedimentaría, o no. La Gyttja aparece tanto en lagos oligotróficos (pobres en bases) como eutróficos (ricos en bases y de pH más elevado), siendo mayores los volúmenes depositados y el contenido de materia orgánica en los últimos. De acuerdo a Kubiena, no presentan olor putrefacto, o este no es muy intenso, siendo el color de los sedimentos bastante negruzco o gris, o gris-pardo.   Aparecen fundamentalmente en lagos de gran tamaño con una considerable biomasa de organismos planctónicos.

 

 

 

Sapropel laminado por deposición de estratos cíclicos:

 

Dy: Son tipos de sedimentos u horizontes orgánico-minerales característicos de los lagos ditróficos (muy pobres en bases y de pH bajo). Su color es parduzco y tacto gelatinoso. Se encuentran repletos de los mencionados coprolitos, pero sobretodo de coloides húmicos. Atesoran un mayor contenido en materia orgánica que la Gittja y su razón C/N (Carbono/Nitrógeno) es más elevada.  Al contrario que el tipo anterior, los Dy se presentan fundamentalmente en lagunas pequeñas y someras. En las que abundan plantas acuáticas (especialmente en los márgenes). En otras palabras la necromasa que se descompone procede de especies vegetales  vasculares en su mayoría, y no de organismos planctónicos. Por estas razones, abundan más los ácidos húmicos (en sentido amplio) procedentes de su descomposición que los coprolitos asociados a la estructura y dinámica de las comunidades de microorganismos que pululan en las masas de los cuerpos hídricos. Las aguas de estos últimos tienden a tener un color pardo.

 

Sapropel: material de color negro muy rico en materia orgánica formados sobre sedimentos de lagos que están sujetos a condiciones reductoras o anóxicas (falta de oxígeno) durante gran parte del año. En consecuencia, abundan las moléculas en estado reducido, como el metano y el sulfuro de hidrógeno. Por estas razones, las comunidades macrobentónicas son muy pobres o prácticamente ausentes. Los coprolitos también son escasos. Debido a la presencia de las dos sustancias aludidas, su olor es desagradablemente putrefacto.

 

Sedimentos minerales o poco orgánicos: Podríamos decir que equivaldrían a los horizontes ócricos de los suelos emergidos. Estos incluyen un material semejante a las rocas margosas, es decir un precipitado de calcita, más o menos encostrado en lagos y corrientes de aguas duras (muy carbonatadas); sedimentos ricos en ácido silícico procedente de los esqueletos de diatomeas, espículas de esponjas, etc.; fangos ocres; fangos rojizos con abundancia de sesquióxidos de hierro hidratados del tipo de la limonita, etc.  Como veis, su clasificación  parece estar basada en las sustancias minerales disueltas en el aguas, las cuales a su vez dependen en gran medida de los sustratos litológicos por los que ha transcurrido previamente.     

 

Sinceramente, reitero que me ha resultado muy difícil encontrar material en la Web (e incluso en formato papel), por lo que debéis considerar este post como un bosquejo que debe ser enriquecido, al menos por los estudiantes universitarios y profesionales. No pude hacer mucho más en un solo día. Tan solo comentar que muchos de estos tipos de sedimentos orgánicos, más o menos tratados, se comercializan como enmiendas orgánicas e incluso como cosméticos (por ejemplo, mascarillas faciales basadas en el sapropel).

 

Juan José Ibáñez

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5 comentarios

  1. chevere este estudio x fabor enviarme información a mi correo gracias.

  2. El artículo está genial y me sirve para enfocar un trabajo de edafología que estoy preparando. muchas gracias

  3. Gostei muito da reivisão, porém não consegui quase nada da bibliografia original citada, exceto Schnurrenberger et al 2003.

    Por favor, caso vc tenha bibliografia sobre classificação de sedimentos orgânicos (sapropel, gyttja e dy), tipo Naumann (1931), Kubiena (1953), Lundqvist (1927), etc., gentileza enviar.

    Desde já agradeço,

    Melissa.

  4. Hola que tal, me ha gustado la información que tienes sobre los tipos de humus acuático, tienes alguna referencia de donde pueda obtener más información al respecto?…y por ultimo no te molestaría si me basó en tu información para publicar en mi blog…

    saludos

    SCCA

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