Tenía preparado para hoy otro post sobre el climagate, pero (…) Aunque la noticia no atesora ninguna gracia, permitirme que este post lo escriba con algo de ironía y sarcasmo. Y es que la verdad, un exceso de competitividad en la actividad científica nunca me ha parecido que sea la mejor forma de incentivar a los investigadores. Todo en su justo grado. Los excesos traen males consecuencias. Hablemos más de cooperación y menos de competitividad (sin menospreciarla). Leía esta mañana la prensa cuando me topé con la noticia que he recogido abajo del Rotativo “Publico”.  Ya reiteré en post anteriores que la competitividad en ciencia nunca debiera ser considerada como el principal criterio con vistas a promocionar la carrera de los científicos. Esa es mi opinión. Aquellos que no soportan la presión (y quizás sean unos genios) pueden terminar cometiendo fraude (u otros tipos de mala praxis científica), suicidarse (existen abundantes antecedentes), o como en este caso, sacar la pistola del cajón y liarse a tiros con el tribunal que le denegó la plaza. Este último caso, será siempre más viable en donde se permita a los ciudadanos la tenencia de armas, dicho sea de paso. No soy partidario de aprovechar titulares con vistas a incrementar nuestra depauperada audiencia. Ahora bien, reitero que discrepo con los procedimientos empleados para la promoción de los científicos. Considero que deben considerarse numerosas variables. Obviamente una de ellas es la competitividad, pero no la única a la que debiera prestarse atención.

Ala University Shooting

La detención de Amy Bishop: Fuente: Daily New

Y Amy Cogió sus pistolas liándose a tiros en el Centro Shelby de la Universidad de Alabama. ¿Por qué? Simplemente se le había denegado aquella mañana una plaza en su departamento de biología. Como pasaba de los cuarenta años (….) Como era considerada una estrella por los estudiantes (…), como había ganado un premio no hacía mucho tiempo (….). ¡A saber!. Eso sí, canceló las clases con los alumnos y les animó a que regresaran a sus casas. Estaba claro que Amy, sabía perfectamente lo que quería hacer aquella tarde y quien estaba en su punto de mira. Y así tres personas de su departamento cayeron asesinadas (incluido el jefe) y otras tres se encuentran heridas (alguna muy grave). Desde luego no pareció disparar a tontas y a locas. Igual hacía prácticas de tiro. Se consideraba liberal. ¡Menos mal!

¡Era neurobióloga!. Daba clases sobre estos temas, así como de otros más básicos: “anatomía y fisiología”. Trabajaba en colaboración con su marido que, hasta donde he llegado a leer, lo hacía a su vez para una empresa privada. Ambos fueron premiados por diseñar un incubador de tejidos portátil. No obstante, cuando he intentado buscar su CV, tan solo he encontrado una página muy pobre en “ISI papers”, aunque no puedo asegurar su veracidad y actualización. A pesar de su fama en la UAH de USA (que no la Española) como investigadora, las opiniones de los estudiantes en su papel docente eran más contradictorias. Eso sí, nadie parecía (por ahora) haber percibido señales de perturbación mental en esta profesora, formada en la afamada Universidad de Harvard,  que  se trasladó a Alabama en 2003, junto a su esposo. Pero pasemos de la noticia a lo que realmente me preocupa.

Ni todas las personas brillantes (no afirmo ni niego que Amy lo fuera) soportan la competitividad, ni todos los que a base de ella sobreviven e incluso alcanzan la fama son genios. Ya hemos reiterado que el fraude es una vía y las relaciones sociales “heterodoxas” otra. Y de eso doy fe a donde y quien haga falta. La ciencia requiere brillantez más que competitividad ¿alguien lo discute?. Seguro que muchos psicólogos estarán conmigo en que abunda gente con “mentes prodigiosas” que, por ser “muy sensibles”, fracasarían (de un modo u otro) en la jungla de la ciencia; esa en la que progresivamente “el todo vale” se hace sitio arrinconando otro tipo de valores. Y mientras tal proceso prosiga, estos casos, de uno u otro modo, aumentarán (a falta de armas, depresiones, suicidios, estrés psicosomático que puede terminar por generar enfermedades graves, como el cáncer, etc.). Atesoro amigos del CSIC que abandonaron sus carreras en vistas del mal ambiente que se vivía en algunos de sus departamentos en la “lucha por la supervivencia”. Casos de suicidios entre los jóvenes precarios también los ha habido. Empero en la ciencia jamás debiera primar la ultradarviniana ley de la selva. Pongamos tan solo un par de ejemplos personales para terminar.

Hace unos 15 años, mantuve una tormentosa polémica en el Comité Científico Asesor de la Presidencia del CSIC con un afamado ecólogo de la Institución. Según el, solo debían entrar los mejores, es decir aquellos que publicaban más y mejores ISI papers, entendiendo por tales los aceptados por revistas de mayor factor de impacto. Para esta persona, los taxónomos del Organismo dejaban mucho que desear porque eran muy malos, lo que se traduciría por una escasa producción de ISI papers. Le reproché que no en todas las disciplinas científicas se podían alcanzar las mismas producciones, así como que había muchos ISI papers lamentables. De ahí salté a otra cuestión relacionada que me preocupaba sobremanera, que explicaré en el siguiente párrafo. Por otro lado, si muchos jóvenes son adiestrados para competir sobre todo, el mal ambiente y las peleas, primarían sobre la cooperación y la calidad de las investigaciones. De guiarse por la supervivencia del más apto (léase competitivo, léase número de ISI papers por año), muchas líneas de investigación del CSIC desaparecerían, perdiendo aquél buena parte su carácter multidisciplinar. De hecho así ocurre, y la edafología es una de ellas. Sabía que mi desiderata pasaría al limbo del olvido, tarde o temprano.

Un Sistema de I +D + i no puede ni debe basarse sobre criterios como los aludidos. Investigadores brillantes requieren rodearse de colaboradores trabajadores y escasamente conflictivos que acepten su liderazgo, sin cuestionarlo. Empero tal modo de proceder generaría que siempre fueran considerados como segundones, es decir científicos de segunda división. Y tal percepción no les ayudaría a prosperar. Dicho de otro modo, cuando existen demasiados gallos en un gallinero, los problemas, malas prácticas y abusos van en detrimento de la cacareada excelencia. Un Sistema de I + D + i es mucho más que una mera colección de competidores y productores feroces. Se trata de eso mismo: “un sistema” en el que cada cual cumple un cometido que va en beneficio del conjunto. El todo es más que la suma de las partes.

Empero, tal percepción no es compartida por los que suelen aparecer en los medios de comunicación, No es lo que reclaman los científicos españoles tras los recortes de presupuestos  en materia de investigación (año 2010). Parece ser, que para ellos mejorar el sistema acaba con la valoración de los papers y la “pasta”. Mal asunto. La serenidad, perseverancia, tiempo y perspectiva generan muy buenos frutos a la larga. Un colega puede no producir durante años y emerger un día con una investigación de grandes repercusiones, ya sea en materia de ciencia básica y/o aplicada. Si a finales del siglo XX y principios del XX, hubieran primado los criterios actuales de valoración científica, posiblemente muchos héroes actuales de la ciencia no habrían desarrollado sus carreras. No se les recuerda por la cantidad de papers publicados, sino quizás por tan solo uno, o dos, o tal vez tres. Cuando se trabaja en investigaciones de moda, en detrimento de las que no lo están en ese momento, ya que hay más pasta y vías para prosperar, se desquebraja el edificio (o sistema) de la ciencia. Tarde o temprano se echan de menos a expertos de ámbitos que desaparecieron (o que se encuentran en vías de extinción). Se trata de esa enfermedad crónica conocida por “publica o perece”.

Hace pocos años hice la única intentona de ascender en el escalafón de mi institución. Mi CV era el segundo en número de publicaciones y el primero en citaciones. El concurso de méritos estaba dotado de 4 plazas. Veamos que pasó de acuerdo a dos miembros del tribunal que a la postre me comentaron lo sucedido.

1ª Plaza: Candidato elegido 4 votos, Ibáñez 3

2ª Plaza: Candidato elegido 4 votos, Ibáñez 3

3ª Plaza: Candidato elegido 4 votos, Ibáñez 3

4ª Plaza: Candidato elegido 4 votos, Ibáñez 3

¿Cuál era mi pecado para esos cuatro miembros del tribunal?: En mi especialidad (la edafología) la mejor revista a penas pasa de un factor de impacto 2, mientras que en otras del área de recursos naturales tal número es calderilla. ¿Son mejores los científicos que investigan en ciertas materias cotizadas que otros que lo hacen en otras que lo son menos? ¡No!. Hablamos de disciplinas distintas. De no ser así edafólogos, geomorfólogos, expertos en vegetación, etc. etc., seríamos la escoria del sistema. Falacia vergonzosa y vergonzante.

Quizás, por todas estas razones, en la ciencia actual se consume demasiado dinero y se generan pocos “cambios de paradigma” en el sentido que al término le otorga Thomas Kuhn. De aquí que algunos hablen de la “decadencia de la ciencia”. Quizás por eso el ciudadano confunde excelencia con biotecnología y biomedicina. Quizás por eso, la ciencia en España no termina de despegar: Quizás por eso se hace mala divulgación científica (pérdida de tiempo para muchos que le resta tiempo de dedicación a la investigación de vanguardia: dicho por una becaria predoctoral en un foro de discusión) y no culturizamos al ciudadano debidamente sobre el valor de la ciencia. Eso que lo hagan otros (….)

Y un día (alguien con razón o sin ella) se enfunda las pistoleras y arremete en una “balecera” contra los que le (la) juzgan. Y que conste que no estoy justificando a Amy.

Juan José Ibáñez

Una profesora mata a tiros a tres miembros de la Universidad de Alabama

Tres miembros del departamento de Biología de la Universidad de Alabama, en Huntsville, murieron hoy en un tiroteo perpetrado, al parecer, por una profesora. «Hemos confirmado la muerte de tres personas y tres heridos», dijo un portavoz de la policía de la universidad.

Fuentes de la Universidad citadas por el diario «The Huntsville Times» dijeron que una profesora de biología, identificada como Amy Bishop, ha sido detenida «sin incidentes» en relación con el tiroteo que ocurrió en el Centro Shelby de actividades científicas de la universidad.

Según medios locales de información el tiroteo habría ocurrido después de que a la mujer, una científica especialista en neurología, se le negara la titularidad en el cargo de profesora de la universidad. Añadieron que también ha sido detenido el esposo de la mujer aun cuando no se le considera como sospechoso.

Fuentes del hospital de Huntsville informaron de que las tres personas heridas fueron llevadas a ese centro de atención médica y que dos de ellas se encuentran en estado crítico.

Los medios locales dijeron que el incidente ocurrió en la tarde durante una reunión de miembros de la facultad de biología, y que la policía de la universidad acordonó el edificio después de evacuar a todos los estudiantes. En el edificio había pocos estudiantes y ninguno resultó herido, según manifestó Ray Garner, portavoz de la universidad.

En su sitio de Internet, la universidad informó de que se habían cancelado todas las clases del viernes y alentó a los estudiantes a regresar a su casa.

Dos de las tres personas que resultaron heridas se encuentran en estado crítico. La sede de la Universidad de Alabama, en Huntsville, cuenta con alrededor de 7.500 estudiantes. El incidente ocurrió una semana después de que Huntsville fuera sacudida por la muerte a balazos de un estudiante de secundaria a manos de uno de sus compañeros. «Esta es una universidad muy segura. Nada como lo que experimentamos hace una semana. Esta ciudad no está acostumbrada a los tiroteos y a un número múltiple de víctimas», indicó Garner.

Los motivos del tiroteo y la forma en que ocurrió están bajo la investigación del Departamento de Polícía de Huntsville, dijeron fuentes oficiales. En esa investigación también participa el alguacil del condado de Madison, donde se encuentra la universidad. El incidente tiene también lugar al cumplirse dos años de que un estudiante matara a cinco de sus compañeros en la Universidad de Northen Illinois.

Enlaces recomendados

National Post

Perfil de Amy Bishop

DailyNews

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5 comentarios

  1. Juanjo y eso que no tuvo la circunstancia muy mexicana donde un expresidente aceptó que la impunidad era parte importante del poder presidencial. Lógicamente de ahi para abajo en la escala del poder también es tolerada de forma similar. A pesar de ello algunos colegas (muy pocos)logran destacar, pero podrian ser mas los que aportaran, sin esa horca caudina. Así que imaginaos las circunstancias de algunos que admiramos.

  2. Me ha gustado mucho tu post: una nota de sensatez entre los ruidos de la jungla.

  3. Gracias Carlos :). Un día una amiga vasca, nacionalista independentista, hablaba conmigo tranquilamente de «su» problema. Tras terminar, me comentó que yo era del «2%». Parece ser que así llaman a los baketos que entendemos su punto de vista, aunque no lo compartamos. Pues lo mismo diría en este caso. Tu pareces ser de «otro» 2%, ya que los que tienen papers me tatacan y los que no tienen (o pocos) aplauden. Todavía espero encontrar a gente con todos los gallifantes que compartan mis tesis. Todo esto no me dice mucho a favor de nuestro colectivo ;).

    Saludos

    Juanjo Ibáñez

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