Comencemos señalando que si las clasificaciones de suelos de la USDA y la FAO (WRB) incluyen los sedimentos lacustres y litorales someros, no existe razón alguna para eliminar de la ecuación a los fluviales, a no ser que los arquitectos de ambas no supieran nadar en aguas corrientes. Francamente no me extrañaría. Pero vayamos al asunto que hoy nos ocupa y preocupa. En el año 2007 ya escribimos el post “el sistema cardiovascular de Gaia: la manifestación de un planeta enfermo” Hoy podría decir que conforme leo y leo más noticias relacionadas, se me antoja que se encuentra en estado crítico. Pero sigamos (…) Se hace creer al ciudadano que las depuradoras limpian todo tipo de contaminantes (químicos, físicos y biológicos).  Empero no es así. Tan solo, y en el mejor de los casos, se descontamina lo que se considera en un momento y lugar nocivo para la salud. No obstante, día a día descubrimos más compuestos peligrosos y en mayor cantidad y diversidad. Por un lado, tal hecho implica que vamos reconociendo que aun sabemos muy poco, pero por otro que cada vez añadimos más sustancias nocivas al medio ambiente y lo que es peor, muchas de ellas de “nueva generación”. Al igual que las leyes de la física nos informan de que “la materia no se crea ni se destruye”. Las sustancias que no se degradan permanecen, y como mucho cambian de ubicación respecto a donde fueron vertidas. Y como no paramos de añadir esas últimas en variedad y en cantidad (…) Y como una legislación ya de por sí precaria se incumple (…) impunemente (…) Quizás, conforme incrementa la lista de contaminantes emergentes, también lo hace la de enfermedades emergentes (….). Ahora bien, siempre nos enteramos tarde, mal y nunca, ya sea por nuestra ignorancia, la pasividad de las autoridades o (…) mejor no seguir. Como resultado de todo ello, seguimos empecinados en generar una biosfera-vertedero-envenenada. Eso sí, yo me pregunto, ¿no debería cambiar mi línea de investigación sobre diversidad de suelos por la de diversidad de contaminantes? Posiblemente me sea más fácil publicar en revistas de impacto. Tal vez atesore algún valor. Empero ya se el resultado a priori. Como en los ecosistemas naturales, tal diversidad incrementaría con el tiempo. ¿O no? ¿Se trataría de mala praxis científica? Prometo que el próximo post intentará ser menos ácido, dado que estamos inmersos en estas entrañables festividades.

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Un villancico contaminado. Fuente: Crónicas de un Pensador

Un día mi maestro y mentor Antonio Bello se quedó atónito al descubrir que por el grifo de “agua potable” de nuestro laboratorio, aparecían nematodos acuáticos que contaminaban las muestras que debíamos analizar. Hablamos de animales pluricelulares, que no de virus y bacterias, mucho más pequeños. Pero sigamos (…)

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Pescando contaminantes. Fuente: Treehugger

En mi viaje a Rusia de 2004, observé atónito que en San Petersburgo (recordemos que se encuentra “a la orillita del mar”), todos los pescados que se servían en los restaurantes eran de origen fluvial. Conociendo el estado de “cristalina pureza” de los caudales de los ríos de la mayor parte de los países pertenecientes a la antigua Unión Soviética, y cansado tras dos días de consumir carne generosamente regada con nata, me fui a un restaurante Mexicano y reservé mesas para los restantes días que debía permanecer en la ciudad. También tenía la intención de comprar algunas latas de caviar, empero recordé de nuevo el grado de contaminación que había leído en la prensa científica acerca de la contaminación de la mayoría de los lagos de Rusia y países asiáticos aledaños, en los que habitan los esturiones. En consecuencia, tan solo adquirí una. Los contaminantes deben ingerirse con prudencia ¿no?Luego ya sabemos que su bioacumulación (….) vía magnificación de la cadena trófica, los va concentrando poquito a poco, poquito a poco: sin prisas pero sin pausas. Este hecho parece soslayado de la primera noticia que os ofrecemos hoy. Como podréis observar en la segunda nota de prensa que os mostramos al final del post, los ríos de los denominados países desarrollados también son una cloaca. Y pensar que estamos en un continente que alardea de estar constituido por países desarrollados y respetuosos con el medio ambiente (…), por lo que cabe preguntarse: ¿que ocurrirá en los otros? Una de las fotos que incluyo en este post da cuenta de ello. ¡Sin comentarios!. Reiteremos que cuando uno ingiere una sustancia contaminada se va acumulando en nuestro cuerpo y a la larga (….). Empero si se trata de animales (que van bioacumulando tóxicos de los vegetales o animales que ingieren) el proceso de biomagnificación deviene en una ingesta “concentrada” de tan sabrosos elixires. Tras paladear tan nutritivos elementos, salimos complacidos del restaurante y tras respirar profundamente, inhalamos una nueva dosis de contaminantes, ya que la calidad del aire de una buena parte de las ciudades es tan venenosa como el tabaco (si  o más), superando con creces los límites legales (léase por ejemplo Madrid, Barcelona, Méxicxo D.F., etc. etc.). Sin embargo en la primera nota de prensa se nos informa que el inexorable incremento de los contaminantes de los lechos (o “suelos” fluviales) tan solo genera consecuencias al dragar ríos (se soslayan los embalses). ¿Dónde depositamos pues tales materiales que han dejado de ser inertes o inocuos para la salud?. ¿Qué ocurre cuando el agua pluvial los lixivia de nuevo a los ríos, acuíferos o el mar?

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Y en los países más desheredados (…). Fuente Fishingfury.con

Si comparemos ambas notas de prensa, llama la atención la desigual valoración del riesgo llevada a cabo en la noticia procedente de España y la aportada por la Unión Europea.  Eso sí, a la postre la última termina incurriendo en el mismo error que la primera al defender la “eficacia” de la Directiva Marco del Agua de la Unión Europea. ¡Menos mal!. Resulta palmario que el uso del vocablo eficiente comienza a dejar de atesorar el sentido que todos tenemos del mismo. En la última noticia también nos advierte que la catalogación de los contaminantes peligrosos es exigua y obsoleta. Y tal hecho a pesar de que tan solo se estudiaron los contaminantes orgánicos (plaguicidas y fármacos), que no de los orgánicos (léase metales pesados y nanomateriales, entre otros) y biológicos (como virus y bacterias). Muchos de los tóxicos detectados se encuentran actualmente prohibidos. ¡Bendita eficiencia de la Directiva de Protección de Aguas!, ¿verdad? Retornando “once again” a la primera noticia, en donde se defiende que este tipo de contaminación fluvial no afecta a la salud humana, cabría recordar al entrevistado de que otros no piensan lo mismo. Así por ejemplo, uno puede leer, entre otras muchas denuncias científicas de la misma guisa que “Los peces de los ríos contaminados puede desencadenar el cáncer de mama”. En fin. Recuerdo aquel villancico navideño que escuchaba en mi infancia. “Pero mira como beben los peces en el río, pero mira como beben y vuelven a beber, beben y beben (….)”. Cambiamos pues la letra, ya que como las listas de sustancias tóxicas se encuentran siempre obsoletas (…), y reemplacemos “beben” por la más inocua de “se envenenan”. Y lo peor de esta afortunada sociedad tecnológica deviene que muchos de los denominados “contaminantes emergentes” proceden de lo que acertadamente” se denominan “productos inteligentes”. Y es que la inteligencia humana no tiene ni límites ni fronteras, ¿verdad? Ahora, sopesen las posibles consecuencias de esta nueva tecnología que promete ser muy, pero que muy renovable: Aguas residuales depuradas para frenar la salinización de acuíferos. ¿¿??. 

Pese a todo, seguimos persistiendo en nuestra estrategia de progreso tecnológico: primero comercializamos ciertos productos para a la postre descubrir que muchos de ellos perjudican al medio ambiente y/o a la salud. ¿Pasara lo mismo con los nanomateriales?. Eso sí, a nuestros políticos el concepto de “principio de precaución” no se les borra de la memoria. Y es que todo nuevo producto tecnológico es inocuo mientras no se demuestre lo contrario, ¡tarde, mal y nunca!.  Supongo que lo que en el fondo quieren decir es inocuo para las impresas que los comercializan. Pero es que estos chicos usan el vocabulario muy mal.

Y como se avecina la navidad no me resisto a que cantemos todos “a grito pelao” nuestro villancico preferido, eso si, cambiando los vocablos aludidos para no ser “obsoletos” ¿Y que hacemos la palabra con Díos?. ¿Quizás ¿reemplazarla por desarrollo? ¿Quizás por tecnología?, ¿tal vez por bobalización? ¡No se, no sé (…) Se admiten sugerencias.

Juan José Ibáñez

La Virgen está lavando
y tendiendo en el romero,
los pajarillos cantando,
y el romero floreciendo.

Pero mira como beben
los peces en el río,
pero mira como beben
por ver al Dios nacido.
Beben y beben y vuelven a beber,
los peces en el río
por ver a Dios nacer.

La Virgen se está peinando
entre cortina y cortina,
sus cabellos son de oro,
el peine de plata fina.

Pero mira como beben
los peces en el río,
pero mira como beben
por ver al Dios nacido.
Beben y beben y vuelven a beber,
los peces en el río
por ver a Dios nacer.

La Virgen va caminando
por entre aquellas palmeras,
el Niño mira en sus ojos,
el color de la vereda.

Pero mira como beben
los peces en el río,
pero mira como beben
por ver al Dios nacido.
Beben y beben y vuelven a beber,
los peces en el río
por ver a Dios nacer.

Descubren que los sedimentos del Ebro albergan un 30% de los fármacos del río

El Instituto Catalán de Investigación del Agua (ICRA) ha detectado por primera vez que un 30% de los restos de fármacos presentes en el río Ebro se hallan en los sedimentos y partículas sólidas, un nuevo riesgo para el ecosistema acuático, especialmente en caso de riadas o dragados.

FUENTE | Agencia EFE; 29/09/2011

El director del ICRA, Damià Barceló, ha presentado el estudio «Ocurrencia y distribución de fármacos en agua superficial, en sólidos en suspensión y en sedimentos de la cuenca del río Ebro«, que ha sido publicado en la revista internacional «Chemosphere«.

Barceló ha destacado que este 30 % adicional de contaminación por restos de fármacos encontrada en el río Ebro es probablemente extrapolable a todas las cuencas fluviales y no supone un riesgo directo para salud de las personas.

El estudio ha detectado la presencia de 43 tipos de fármacos en el río, con concentraciones medias de entre 50 y 100 nanogramos por cada litro de agua de cada producto.

Los antiinflamatorios, como el ibuprofeno, y los antibióticos son los fármacos más abundantes y provienen de las depuradoras que no eliminan totalmente los medicamentos de las aguas residuales, tanto de los usos humanos como de la ganadería.

Damià Barceló ha explicado que el mayor riesgo medioambiental se produce en los peces que están en permanente contacto con las partículas sólidas y pueden consumir los restos de los fármacos, con efectos que, aunque no han sido estudiados, podrían causarles un engorde anómalo, problemas de movilidad o disfunciones cardiovasculares.

«Un humano tendría que beber 10.000 litros de agua directamente del río, sin depurar, para que le hiciese alguna clase de efecto«, ha señalado Barceló para aclarar que el riesgo para la salud humana es escaso.

Entre los que más que concentración de fármacos presenta está el río Arga, tras pasar por Pamplona, y el Ega.

Los investigadores del ICRA consideran que su descubrimiento es muy importante en el caso de que se tenga que dragar el río, pues se removerían los sedimentos con los restos de fármacos adheridos y éstos se convertirían en partículas que los peces podrían ingerir.

El estudio forma parte del proyecto Consolider-Ingenio 2010-2014 (SCARCE), que sufraga el Ministerio de Ciencia e Innovación con 4,5 millones de euros, y que incluye, además del estudio de la cuenca del Ebro, también las del Llobregat, el Júcar y el Guadalquivir, con problemáticas muy diferentes.

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¿Hay que actualizar la lista de sustancias peligrosas para los ríos europeos?

Un grupo de científicos europeos ha realizado un nuevo estudio con el que han detectado una serie de plaguicidas perniciosos para los ecosistemas fluviales. En su opinión, estos deberían añadirse a la lista de sustancias químicas clasificadas como de riesgo en la Directiva Marco del Agua de la Unión Europea.

FUENTE | CORDIS: Servicio de Información en I+D Comunitario; 19/10/2011

El equipo de científicos, procedentes de Bélgica, Alemania, España, Francia y Eslovaquia, presentó en la revista Science of the Total Environment sus resultados procedentes del análisis de 500 sustancias orgánicas halladas en las cuencas de cuatro ríos europeos importantes. Descubrieron que la contaminación por sustancias químicas orgánicas es un problema extendido por toda Europa. Además averiguaron que el 38 % de dichas sustancias se encuentran en concentraciones que podrían ser letales para los organismos que habitan dichas cuencas fluviales.

El trabajo contó con 8,4 millones de euros y otros 10 millones de euros de financiación de la Comisión Europea adjudicados respectivamente por los proyectos MODELKEY («Modelos para la evaluación y la predicción del impacto de contaminantes clave del medio ambiente sobre los ecosistemas y la biodiversidad marinos y de agua dulce») y OSIRIS («Estrategias optimizadas para la evaluación de riesgos de sustancias químicas basada en ensayos inteligentes»), ambos pertenecientes al área temática «Desarrollo sostenible, cambio planetario y ecosistemas» del Sexto Programa Marco (6PM) de la UE.

Una de las tareas del proyecto consistió en la construcción de una base de datos con 5 millones de registros sobre datos físico-químicos. El estudio se centró en contaminantes orgánicos registrados en más de 750 000 entradas de análisis de agua de las cuencas de los ríos Elba (República Checa y Alemania), el Danubio (que atraviesa 10 países europeos), el Escalda (Bélgica) y el Llobregat (España). Se trata del primer estudio en el que se ha desarrollado un sistema para clasificar los contaminantes orgánicos según criterios de evaluación y la necesidad de tomar medidas al respecto.

El objetivo de la Directiva Marco del Agua es que las masas de agua superficiales y subterráneas alcancen en 2015 un buen estado químico y medioambiental. Este estado se evaluará según una lista de 33 contaminantes prioritarios. Habiendo más de 14 millones de sustancias químicas a la venta, de las cuales 100 000 se producen a escala industrial, el control de las mismas ha de reducirse a una escala aceptable. De este modo recae sobre la comunidad científica discernir cuál de ellas son más peligrosas.

Este tipo de investigación es básica para que la Directiva se mantenga actualizada. En la actualidad la lista no incluye la mayoría de las sustancias que plantean riesgo, y sí muchas otras que están prohibidas desde hace tiempo y ya no se utilizan.

En su estudio, el equipo de científicos clasificó 73 compuestos como contaminantes prioritarios potenciales, dos tercios de los cuales eran plaguicidas. Estos son productos fitosanitarios que se usan para proteger los cultivos frente a enfermedades, plagas y malas hierbas. Los plaguicidas más problemáticos fueron diazinón, prohibido ya en Austria y Alemania, así como azoxistrobina y terbutilazina, todavía permitidos en Centroeuropa.

«Ninguno de estos plaguicidas está en la lista de 33 contaminantes prioritarios a controlar por las autoridades pertinentes de toda Europa», explicó Carsten von der Ohe, del Centro Helmholtz de Investigación Medioambiental (UFZ, Alemania) y autor principal del estudio. «La terbutilazina es un compuesto cuya estructura está muy relacionada con los contaminantes prioritarios simazina y atrazina, cuyo uso está prohibido. Este es un ejemplo claro de cómo modificaciones estructurales pequeñas en productos químicos pueden aparentemente mejorar su estado químico sin llegar a reducir el peligro que suponen para los sistemas acuáticos

Uno de los compuestos que se registran con más frecuencia fue el di(2-etilhexil) ftalato (DEHP), un suavizante artificial que puede perjudicar a la fertilidad y que será prohibido en la UE a partir de 2015. Otro suavizante que aparece a menudo en la base de datos es el bifenol-A (BPA), que según investigaciones también reduce la fertilidad.

El equipo también manifestó que, a pesar de estos inconvenientes, sus descubrimientos muestran la eficacia de la Directiva Marco del Agua de la UE, pues un tercio de los contaminantes clasificados como prioritarios hace unos años ya no suponen una amenaza para los ríos estudiados. Por lo tanto, a pesar de que en el estudio se manifiesta la necesidad de actualizar la lista con regularidad, el hecho de que algunos plaguicidas puedan tacharse de la lista significa que se está avanzando en el sentido adecuado.

Para más información, consulte:

Centro Helmholtz de Investigación sobre el Medio Ambiente (UFZ)
http://www.ufz.de/index.php?en=11382

Categoría: Resultados de proyectos

Fuente: Centro Helmholtz de Investigación sobre el Medio Ambiente (UFZ)
Documento de Referencia: Carsten von der Ohe, P., et al. (2011) A new risk assessment approach for the prioritization of 500 classical and emerging organic microcontaminants as potential river basin specific pollutants under the European Water Framework Directive.

Códigos de Clasificación por Materias: Coordinación, Cooperación; Políticas; Protección del medio ambiente; Recursos hídricos y gestión; Desarrollo sostenible ; Legislación, reglamentación; Seguridad; Investigación científica; Aspectos sociales

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