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Fuente: Colaje imágenes Google

Miocroplásticos: ¿Qué sabemos hasta ahora?: Depende. ¿De qué? De las investigaciones que consultes.

Os hemos habado en diversos posts de vivimos en una plasticosfera.  Llueven del cielo micro y nanoplásticos, los ingerimos hasta en el agua embotellada, los transportamos en nuestros cuerpos y los secretamos también el medio ambiente. Circulan por tierra, mar y aire. La sociedad industrial hace uso de estos para los más disparados fines. Sin embargo, no son muchos los estudios que nos informen sobre los microplásticos en el suelo, agrícolas y no agrícolas. Hoy os ofrecemos cuatro noticias traducidas del suajili al Español-castellano, tres de las cuales nos informan de los miocroplásticos en el suelo y en los lodos de depuradora, que en algunos países aún se usan como fertilizantes agrícolas, sin mayores tratamientos.

Repitamos la pregunta: ¿Qué sabemos hasta ahora? Repetimos que más bien poco, excepto que, con toda seguridad dañan los suelos, ecosistemas y la salud pública. Me explico.

Resulta muy difícil cuantificar su volumen, extensión, etc., ya que densidad, tamaño, cuantía, etc. varían en función de la localidad, pero también de los cauces fluviales y dirección dominantes de los vientos que los transportan y depositan en otros lares, o en el mar y aguas subterráneas. Empero, como se señala en las noticias que os ofrecemos hoy también en, los paisajes de suelos que rodean los cultivos bajo plástico (muchos de los alimentos que allí se producen son denominados “ecológicos”….). Cabe recordar también que algunos vermicompost son producidos por el consumo de las lombrices de los mentados lodos de depuradora.

Pues bien, los artículos que mostramos hoy ofrecen cifras, esas que tanto gustan, empero que a menudo distan de dar una panorámica general de este “megaproblema”. Al mismo tiempo una de las nota de prensa en concreto señala que las raíces de los abedules los secuestran y pueden ser utilizados como fuentes de descontaminación (bioremediación). Sin embargo, una cuestión es que las raíces de un árbol (que además solo crece en ambientes templados y suelos húmedos) absorban miocroplásticos y logren secuestrar estos compuestos sintéticos, y otra bien distinta que lo haga de tal forma que palie significativamente su concentración en el medio edáfico. Del mismo modo, se menta como algún cereal puede realizar tal misión por lo cual……., otra vez a nuestros aparatos digestivos, heces, lodos de depuradora, suelos y alimentos, cerrando parcialmente el ciclo. No obstante, ingentes cantidades irán a parar a los fondos marinos.

¿Cifras?. Miren ustedes, cuando tras unas pocas medidas en sitios singulares nos proporcionan escasos datos, empero que ni tan siquiera la dimensión real del problema es meridiana, mal asunto. La información resulta interesante y os recomiendo leerla, pero las cifras variarán conforme avancemos en el estudio de este drástico problema. ¡Pocos arboles no dan lugar a un bosque! Os dejo abajo las cifras que me han llegado de dos estudios, y extraer las conclusiones vosotros mismos.  

Juan José Ibáñez

Continúa……

La investigación sobre la contaminación plástica se traslada tierra adentro

por la Universidad de Staffordshire; AGOSTO 17, 2022

Una nueva investigación destaca la creciente amenaza de los microplásticos para la agricultura mundial y la producción de alimentos.

Científicos de la Universidad de Staffordshire están impulsando la investigación para comprender la escala de la contaminación plástica en los suelos agrícolas y su impacto en todo el mundo.

Claire Gwinnett, profesora de Ciencias Forenses y Ambientales, explicó que «sabemos mucho sobre los microplásticos en los océanos y el agua dulce y estamos empezando a aprender más sobre los microplásticos en el aire, pero todavía sabemos muy poco sobre los microplásticos en los entornos terrestres«.

«Con el cambio climático, la presión del aumento de las poblaciones sobre la producción de alimentos y los riesgos para la seguridad alimentaria, se ha hecho evidente que es increíblemente importante que investiguemos esto».

En los últimos años, el uso de plásticos en la agricultura ha aumentado significativamente. Sin embargo, se estima que los microplásticos en el suelo tardan hasta 300 años en degradarse por completo. Se cree que su presencia altera las características del suelo, como su estructura, capacidad de retención de agua y comunidades microbianas, y que los microplásticos son, en parte, responsables de los efectos reductores de los cultivos.

El Grupo de Investigación de Fibras Forenses y Microplásticos de Staffordshire ha estado llevando a cabo varios estudios, incluida una revisión internacional sobre las presiones de la contaminación plástica en las regiones rurales, que destaca la necesidad de un análisis más amplio de los microplásticos terrestres para ayudar a reducir las amenazas ambientales y de salud pública.

El profesor Gwinnett dice que «sabemos que los microplásticos en los suelos agrícolas son abundantes, variados y están influenciados por el uso de la tierra y las actividades agrícolas. Sabemos por un pequeño número de estudios que puede afectar a los organismos que viven en el suelo, como los gusanos y los colémbolos«.

«Los estudios sobre el efecto de los microplásticos en las plantas son aún más raros, pero también sabemos que afecta a los cultivos cultivados en estos entornos, así como al ganado que vive allí. Lo que necesitamos saber ahora es cuánto plástico hay y comprender mejor qué efecto está teniendo esto».

Ellie Harrison, investigadora de doctorado en el Staffordshire Forensic Fibres and Microplastic Research Group, está llevando a cabo actualmente una serie de estudios sobre los efectos de los microplásticos en los cultivos agrícolas comunes del Reino Unido. Ella dice que «la investigación sobre los impactos de los microplásticos en los suelos agrícolas realizada en la Universidad de Staffordshire ha demostrado que este contaminante puede causar una disminución en la tasa de germinación y cambios en la producción de semillas que podrían tener consecuencias negativas para la producción de alimentos«.

Un estudio reciente, realizado en asociación con la Universidad de Çukurova, ha investigado la cantidad de plásticos derivados de películas plásticas de invernadero desechables y tuberías de riego en suelos agrícolas en Turquía.

El profesor Gwinnett dice que «las películas de invernadero y las tuberías de riego son productos comúnmente utilizados en la agricultura y tenemos los mismos usos de plástico en el Reino Unido y en toda Europa. En lugar de ser eliminados, estos productos de plástico a menudo se dejan en campos donde experimentan desgaste y degradación por el sol, lo que descompone estos plásticos en microplásticos secundarios«.

«Nuestros resultados muestran que, a partir de años y años de uso de estos plásticos, los microplásticos se acumulan en el suelo y no se pueden eliminar«.

Se tomaron muestras de suelo de 10 lugares diferentes en la región de Adana /Karataş en Turquía. El número de micro, meso, macro y megaplásticos que se identificaron en el suelo donde se utilizó la película de invernadero y las tuberías de riego, fue aproximadamente 47, 78, 17 y 1.2 veces mayor que en las tierras de cultivo que no usaban plástico, respectivamente. Los hallazgos indicaron que los plásticos residuales disminuyeron en el suelo donde los plásticos usados se eliminaron después del uso. Los resultados tienen como objetivo guiar a los agricultores en una mejor gestión de los plásticos.

Un estudio adicional con la Universidad de Çukurova está investigando las prácticas y percepciones de los agricultores en Turquía para comprender cuáles son las barreras para adoptar medidas preventivas o enfoques más sostenibles.

La Universidad de Staffordshire ha estado llevando a cabo investigaciones similares en el Reino Unido en asociación con la Unión Nacional de Agricultores (NFU); Este estudio analiza la cantidad y los tipos de microplásticos en los suelos agrícolas del Reino Unido. Este es el primero de su tipo en el Reino Unido y tiene como objetivo comprender mejor el alcance de la contaminación por microplásticos en las tierras de cultivo.

El profesor Gwinnett agregó que «el uso de plástico en el sector agrícola puede ener beneficios dignos a corto plazo, pero los efectos a largo plazo no pueden ser ignorados. Esperamos que nuestro creciente cuerpo de investigación pueda usarse para informar a los tomadores de decisiones e impulsar un cambio real para salvaguardar la salud del suelo y el futuro de la agricultura».

La investigación fue publicada en Environmental Science and Pollution Research.

Los abedules eliminan los microplásticos del suelo FEBRERO 21, 2022

Más información: Rezan Gündoğdu et al, Plásticos derivados de películas plásticas de invernadero desechables y tuberías de riego en suelos agrícolas: un estudio de caso de Turquía, Environmental Science and Pollution Research (2022). DOI: 10.1007/s11356-022-21911-6

Información de la revista: Environmental Science and Pollution Research

Los abedules eliminan los microplásticos del suelo

por Forschungsverbund Berlin e.V. (FVB)

Con la ayuda de los árboles, los suelos contaminados con microplásticos podrían remediarse. Por primera vez, investigadores del Instituto Leibniz de Ecología de Agua Dulce y Pesca Continental (IGB) han demostrado que los abedules absorben microplásticos a través de sus raíces durante la fase de crecimiento. Buenas noticias, porque los suelos están muchas veces más contaminados con microplásticos que los océanos.

Hasta ahora, se sabe poco sobre cómo los microplásticos interactúan con las plantas terrestres de orden superior. Estudios recientes han demostrado que los microplásticos se absorben en las raíces de las plantas agrícolas como el trigo. Como parte de un proyecto interdisciplinario de vanguardia del estudio de arte con sede en Berlín, Studio Austen, el equipo de investigación del IGB y el Centro Alemán de Investigación en Geociencias (GFZ) ha demostrado por primera vez que las plantas leñosas de vida más larga absorben y almacenan microplásticos en su tejido.

Los abedules (Betula pendula Roth.) ya se han utilizado para remediar tierras contaminadas porque secuestran y almacenan contaminantes industriales y metales pesados en sus tejidos, lo que posteriormente permite la colonización de comunidades microbianas que descomponen los hidrocarburos poliaromáticos. Las raíces de esta especie arbórea crecen cerca de la superficie del suelo, donde se ha demostrado que la contaminación por microplásticos es más alta, lo que las convierte en una buena opción para el estudio.

Del 5 al 17 por ciento de las secciones de la raíz examinadas absorbieron microplásticos

Los investigadores etiquetaron cuentas microplásticas (5-50 μm) con tinte fluorescente y las agregaron al suelo de los árboles en macetas. Después de cinco meses, examinaron muestras de raíz utilizando fluorescencia y microscopía de escaneo láser confocal. Encontraron microplásticos fluorescentes en diferentes secciones y capas del sistema radicular. El porcentaje de secciones de raíces con partículas microplásticas varió de 5 a 17 por ciento en los árboles experimentales.

«La tasa de absorción de microplásticos y los efectos sobre la salud a corto y largo plazo de los árboles aún deben estudiarse. Pero este estudio piloto sugiere que el abedul tiene un potencial real para soluciones de remediación del suelo a largo plazo, incluida la reducción de la cantidad de microplásticos en el suelo y posiblemente en el agua«, dijo Kat Austen, autora principal del estudio que dirige Studio Austen y es coordinadora del proyecto IGB para el proyecto de ciencia ciudadana ACTION.

Contaminación de los suelos por microplásticos mayor que en los océanos

Más de 400 millones de toneladas de plástico se producen en todo el mundo cada año. Se estima que un tercio de todos los residuos plásticos terminan en suelos o aguas dulces. La mayor parte de este plástico se desintegra en partículas de menos de cinco milímetros, conocidas como microplásticos, y se descompone aún más en nanopartículas, que tienen un tamaño inferior a 0,1 micrómetros. De hecho, la contaminación por microplásticos terrestres es mucho mayor que la contaminación por microplásticos marinos, una estimación de cuatro a 23 veces más, dependiendo del medio ambiente. Las aguas residuales, por ejemplo, son un factor importante en la distribución de microplásticos.

De hecho, del 80 al 90 por ciento de las partículas contenidas en las aguas residuales, como las fibras de las prendas de vestir, persisten en el lodo. La mayor parte de los lodos de depuradora se incineran en Alemania. A nivel mundial, sin embargo, también se aplica en parte a los campos como fertilizante, lo que significa que varios cientos de miles de toneladas de microplásticos terminan en nuestros suelos cada año (fuente: Plastic Atlas 2020). Esta es la razón por la cual las concentraciones de microplásticos en el suelo de campo también son particularmente altas, al igual que en los bordes de las carreteras, porque la abrasión de los neumáticos es otra fuente importante de microplásticos.

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Los microplásticos no son solo un problema para el océano, también están en nuestros suelos.

Más información: Kat Austen et al, Inclusión de microplásticos en las raíces de los abedules, Science of The Total Environment (2021). DOI: 10.1016/j.scitotenv.2021.152085

Información de la revista: Science of the Total Environment 

Operado por Forschungsverbund Berlin e.V. (FVB) 

Los microplásticos están muy extendidos en los suelos de las zonas tropicales

Los microplásticos (MP) se refieren a partículas de plástico de <5 mm de tamaño. Los riesgos ambientales causados por los parlamentarios están aumentando. Como recursos fundamentales del sistema mundial de seguridad alimentaria, los suelos también se ven afectados por la contaminación por MP. Sin embargo, las características de distribución de los parlamentarios a través de diferentes usos de la tierra en áreas tropicales siguen siendo en gran parte desconocidas.

En un estudio publicado en Chemosphere, investigadores del Jardín Botánico Tropical Xishuangbanna (XTBG) de la Academia de Ciencias de China revelaron la presencia generalizada de microplásticos del suelo en áreas tropicales, desde ecosistemas artificiales hasta ecosistemas naturales, tanto en la capa superior como en la profunda del suelo.

Los investigadores eligieron dos ecosistemas naturales (bosques primarios y secundarios) y dos ecosistemas artificiales (plantaciones de caucho y banano) en la región tropical de Xishuangbanna como áreas de estudio. Midieron la abundancia, el tamaño, el tipo, la forma y el color de los parlamentarios en las capas superior (0-10 cm) e inferior (10-20 cm) del suelo.

Encontraron que el tamaño dominante de los microplásticos del suelo era de <1 mm y las formas principales eran fragmentos y fibras, con colores azul, amarillo y verde-azul. La mayoría de los microplásticos eran polietileno, rayón y polipropileno.

La abundancia de microplásticos en la capa superior del suelo (0-10 cm) fue significativamente mayor que en las capas profundas del suelo (10-20 cm). Por lo tanto, la contaminación por MP puede estar aumentando seriamente en el suelo superior en áreas tropicales.

Además, el efecto del uso de la tierra sobre la ocurrencia y las características de los microplásticos fue mucho mayor que la profundidad del suelo y sus efectos interactivos. La abundancia de parlamentarios en las plantaciones de banano fue aproximadamente 10 veces mayor que en las plantaciones de caucho, y 18 veces mayor que en los bosques secundarios y primarios.

Además, el tamaño de los microplásticos en la capa superior del suelo en el bosque secundario fue mayor que el de las plantaciones de banano y los bosques primarios, mientras que no se detectó ninguna diferencia de tamaño entre los cuatro tipos de uso de la tierra en la capa de suelo profundo.

El estudio sugirió que la contaminación por microplásticos ya ha sido un problema emergente en todos los principales usos de la tierra en áreas tropicales.

«La contaminación por MP en los ecosistemas artificiales es más grave que en los ecosistemas naturales. Pedimos medidas y políticas efectivas para controlar la contaminación por MP en áreas tropicales», dijo el Dr. Xu Guorui de XTBG.

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Las personas con EII tienen más microplásticos en las heces, según un estudio

Más información: Guorui Xu et al, Contaminación por microplásticos del suelo bajo diferentes usos de la tierra en los trópicos, suroeste de China, Chemosphere (2021). DOI: 10.1016/j.chemosphere.2021.133176

Información de la revista: Chemosphere 

 

Los microplásticos siguen causando estragos en nuestro medio ambiente

por la Universidad de Murdoch

Una nueva investigación y las imágenes capturadas por científicos de la Universidad de Murdoch muestran cuán dañinos son los microplásticos para el medio ambiente con partículas que representan una amenaza potencial para los organismos cuando se ingieren.

Un nuevo análisis que utiliza un nuevo método de elutriación, un estudio de caso sobre la abundancia y la distribución espacial de los microplásticos, dirigido por la Jefa de Disciplina de Ciencias Ambientales y de conservación Jennifer Verduin, muestra que los microplásticos se acumulan a una densidad de 43 partículas por kilogramo de sedimento.

«Los plásticos son polímeros sintéticos y, debido a sus propiedades únicas, los plásticos se utilizan ampliamente en una amplia variedad de envases, aplicaciones industriales e incluso cosméticos«, dijo el profesor Verduin.

«Cuanto más tiempo permanezcan los materiales plásticos en el medio marino, los procesos de meteorización y desintegración generarán un número creciente de materiales microplásticos más pequeños (menos de 5 mm de longitud), incluidas las fibras de la ropa, las redes marinas, etc.

«Estos microplásticos son fácilmente transportados por la acción de las olas y las corrientes oceánicas. Una vez depositados en las playas, también pueden ser transportados por el viento para acumularse en zonas concretas«.

Con motivo del último día de julio libre de plástico, el Instituto Harry Butler de la Universidad de Murdoch organizó a 37 empleados y estudiantes para participar en una mañana de limpieza en Woodman Point como parte del movimiento global que inspira a las personas a reducir su uso de plástico y contribuir a un medio ambiente más limpio.

Dos buzos desafiaron el agua fría que recorre el fondo del lecho oceánico en busca de basura, lo que resultó en la eliminación de casi 100 kg de basura del océano, la playa y las dunas, lo que ayudó a reducir el riesgo para la vida silvestre marina y terrestre de muerte, lesiones y enfermedades causadas por contaminantes cuando se dejan en el medio ambiente.

Poco menos de una cuarta parte de la basura total recolectada eran reciclables, como vidrio, plásticos duros y latas de aluminio.

El 76% restante estaba compuesto por productos de desecho no reciclables como cuerdas, líneas de pesca, vasos de plástico, bolsas de plástico, goma, bolsas de caca para perros y contenedores para llevar.

Se sabe que muchos de estos contaminantes dañan o matan a la vida silvestre directamente, o se descomponen en microplásticos que causan más daño a la fauna marina.

Destino final aguas profundas: el impacto de los microplásticos en el fondo oceánico es aún mayor de lo que se suponía

Operado por Murdoch University 

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