¿Feliz Año Nuevo? Por el Respeto a los Derechos Ciudadanos

Vaya por delante que os deseo todo lo mejor para el próximo año que se nos viene encima. Si en 2008 nuestras autoridades alegaban que la crisis no duraría mucho, cuatro años después en numerosas partes del mundo, la vida del ciudadano va de mal en peor. Desafortunadamente, en otras, ni siquiera percibirán tales nefastos cambios macroeconómicos, por cuanto desde siempre, o al menos durante decenios, han sufrido pobreza y desolación en distinto grado. Estas son las dramáticas desigualdades del mundo que hemos ido construyendo con pertinaz perseverancia. ¿Feliz año Nuevo? Habrá que rezar, por cuanto las recetas de los líderes (conocidos y/o encubiertos) de la economía mundial hacen recaer todo el peso de un sistema descontrolado, (más que desregulado) sobre la ciudadanía. ¿Y los derechos de los ciudadanos?. No nos engañemos, si menguan día a día, pronto deberemos apelar a los principios más elementales de la “Carta de los Derechos Humanos” con vistas a defendernos para que algunos “no debamos” pagar para trabajar. Eso sí, todo tiene un límite. Los ciudadanos comienzan a manifestar su enojo por las más variopintas zonas del planeta.  Si se tensa mucho más la cuerda puede romperse. Las redes sóciales han convertido a los movimientos ciudadanos de indignados alrededor del mundo, en una piña que se manifiestan, más o menos al unísono. Avaaz (leer su manifiesto en este enlace) ya cuenta con diez millones de seguidores y Care2 alrededor de los 18 millones. Eso sí, los que defienden al capital depredador, esos que cacarean tanto lo de “¿desarrollo sostenible?”, consideran que todas estas decenas de millones de personas somos unos miserables analfabetos, o como dicen en España, “perroflautas”. Si la ciudadanía indignada es tratada como una turba de bestias deberemos reflexionar a cerca de la grandeza moral e incalculable sabiduría de los “expertos” que vociferan tales descalificaciones, en la conspiranoia de los TDT Parties, como apunta acertadamente Ignacio Escolar.  Sin embargo, como ciudadano de a pié, me congratulo que los españolitos fuéramos la mecha (o una de las más importantes de este movimiento de ciudadanos indignados, tras nuestro 15 M) de un movimiento global que sacude las conciencias de miles de millones de personas. No se trata de alcanzar el poder. No lo queremos, si no que lo detestamos. Tan solo luchamos por un mundo mejor, en donde los insaciables lobby del mercado no roben a manos llenas a los que menos poseen. La ley de San Mateo: “Porque a todo el que tiene, más se le dará, y tendrá en abundancia; pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará”, parece ser su lema de los depredadores de Wall Street.  Pero, ¿nos acordamos del Drama de Haití, o del de Somalia?, por citar dos meros ejemplos?. Si no es así (…) es que tan solo ofrecemos limosna para acallar nuestras conciencias.

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=Glny4jSciVI&feature=related[/youtube]

We are the World 25 for Haiti

Pues bien, esperemos que, “de algún modo”, aunque imperativamente pacífico, nuestros dirigentes logren frenar esta tremenda sangría. Habrá que estar atentos y recordárselo permanentemente ya que (…) son muy olvidadizos. Sin embargo, como ciudadanos debemos reconocer que también somos responsables. Cuando los bienes de consumo nos llegan en abundancia se nos nubla la vista. La mayoría de nosotros tan solo protestamos cuando nuestro el denominado estado del bienestar se derrumba. Debemos estar a las duras y a las maduras. Necesitamos ser “animales políticos” (tal hecho no implica militancia en partido político alguno como vociferan aviesas mentes),  aunque también dialogantes y respetuosos, lo cual legitima las demandas de un cambio hacia ese mundo mejor que tanto anhelamos. Vaya esta canción “We are the World” para felicitaros la noche vieja. Toquemos madera por el año que se nos avecina, pero luchando, siempre luchando, desde la legitimidad que otorga una batalla tan noble. Se que muchos considerareis que no maduro. En efecto, permanezco bajo el síndrome de Peter Pan, por cuanto cuando mis ojos de adulto observan lo que nos rodea, no puedo más que desear que mi mente y espíritu sigan siendo “niños”.

Nuestros recuerdos a los entrañables y nostálgicos abrazos para los amigos de Cuba, incluidos “Ma Norma” y “Pa Dionisio”. Al fin y al cabo, el pueblo Cubano ha hecho de penuria necesidad y esta les lleva al desarrollo sostenible, tema del que hablaremos en otro post. Como siga la economía en caída libre, pronto serán un ejemplo a seguir (soslayando cualquier connotación política).

La Felicidad se encuentra en el corazón, no en los bienes que atesoramos, aunque se nos olvidara hace ya demasiado tiempo.

Juan José Ibáñez

Un Pobre Infeliz

Enlace Directo a We are the World 25 for Haiti

http://www.youtube.com/watch?v=Glny4jSciVI&feature=related en inglés

Versión en Español, aunque en mi modesta opinión, de menor calidad.

http://www.youtube.com/watch?v=PwrkGtjj8b4&feature=relmfu

Compartir:

2 comentarios

  1. Juan José espero que este año que comienza te colme de salud, amor y, por qué no, de dinero si pudiera ser.
    Pero sobre todo deseo/espero que no pierdas el interés en mantener esta bitácora en la que nos acercas de forma altruista a ese mundo desconocido de la vida que late en ese «universo» que tenemos bajo nuestros pies.

    Un cordial saludo desde Benalmádena.

  2. Hola J.M.

    Muhas gracias. Yo también te deseo a ti todo lo mejor. Tranquilos que esta bitácora no desaparecerá aunque «pueda» cambiar de alojamiento. Ya se verá.

    Feliz año

    Juanjo Ibáñez

Deja un comentario