Departamento de Agroecología: Centro de Ciencias Medioambientales. CSIC
Artículo de Opinión
Reproducido de la Revista Camp Verd (La Revista d’Agricultura Ecológica, Nº 4, 2009).
Nota del Administrador del Blog. Antonio Bello, me ha solicitado que incluyera este (como aperitivo) artículo de divulgación suyo en nuestro blog. Se trata de un placer y un honor.
El modelo agroalimentario es un fracaso, está obsoleto yhay que cambiarlopuesto que los responsables de la política agraria se han limitado a acciones puntuales que han provocado gran parte de los desastres actuales(1, 2, 3).
Mi enhorabuena a Antonio por el artículo. No se puede decir más con tan pocas palabras y no entiendo como se puede intenter marginar a una cabeza así, de la que deberiamos estar orgullosos y de la que debería sacarse provecho. No sé donde están todos los que se llaman sus amigos y todas las personas que se han beneficiado en alguna medida de sus ideas. De lo que no cabe duda es de que tiene el respeto , la admiración y el agradecimiento del sector agrario y debería tener el de los gobernantes.
Le escribo desde una conocida agencia de comunicación. Estaríamos interesados en poder contactar con usted para poder facilitarle contenido de uno de nuestros clientes. Por ello agradeceríamos que nos facilitaran un correo y nombre de contacto.
Un saludo.
Estimada Sonia,
Gracias por tu comentario.
Me gustaría que me aclararas si te refieres al administrador del blog (quien te escribe) o a Antonio Bello. Supongo que será el último. Supongo que el Dr. Bello responderá afirmativamente. Pero en cualquier caso necesito tu aclaración para hablar con Antonio Bello y solicitarle su permiso, si fuera el caso. Por mi parte no habría problema
Un cordial Saludo
Juanjo Ibáñez
Sonia, tras tu mail, Ya le he pasado tus datos a Antonio Bello.
Un cordial saludo y gracias por interesarte por este serio problema.
Juanjo Ibáñez
María,
Ya sabes de sobra que yo fui un «disidente» de Antonio ya que nuestros carácteres chocaban por ser ambos muy fuertes, que no nuestras ideas.
Y sabes que aun así hemos mantenido mutuamente nuestra amistad y apoyo mutuo.
Efectivamente resulta muy lamentable que Antonio formara a decenas de personas, que muchas ellas sacaran sus plazas gracias a la sólida formación que les dio y su apoyo, que durante años corretearan a su alrededor como mariposas para sacar partido y que ahora «si te he visto no me acuerdo», cuando no le arremeten algunos con puñales por la espalda.
Y esto ya nos dice la moral, ética y catadura de muchos investigadores actuales, ¡sí!, esos que hablan de objetividad científica y dedican todos sus esfuerzos hacia la mejora de la sociedad. Jaja. Estamos criando cuervos. Y quizás también cobardes, ya que cada vez hay más miedo y más adulación al poder, caiga quien caiga, incluso a los que deben agradecerle «eternamente» poder disfrutar de un trabvajo tan maravilloso como el nuestro.
Yo que también «amo a la ciencia», aunque algunos me critican porque dicen que la ataco, me pregunto que tipo de «amor» atesoran esos personajillos parásitos, chupópteros y desagradecidos. Y tu y yo sabemos que son muchos, ya que Antonio fue incansable.
Que lástima. Su silencio y cobardía lo dice todo, contrastando con las varias asociaciones de agricultores que se ponen en contacto contigo, con Antonio e incluso conmigo horrorizados por el tema.
Son algunos de estos últimos los que comentan que Antonio era la excepción, más que la regla, entre los científicos de su ámbito. Y eso lo dice todo. Si luego los investigadores se lamentan de que los agricultores no colaboran, en lugar de acusarles de su falta de cultura científica, debían recapacitar sobre sus necias y lamentables actitudes.
Al fin y al cabo nos pagan los ciudadanos con sus impuestos y no nuestras instituciones, que no dejan de ser meras correas de trasmisión, a nenudo muy mal engrasadas. ¿A quien debe uno pleitesía?.
Un abrazo
JuanjoIbáñez
Todo muy lamentable.
De hecho, si es muy lamentable que los que se supone velan por la seguridad y el desarrollo de las diferentes sociedades se encuentren orientados mas hacia la corrupción, y al consumismo de los agroquimicos, transgenicos y demas «super productos».
Aca en Mexico existen pocas personas que estan intentando aplicar la investigación participativa, sin enbargo, vamos a pasos muy lentos (a mi parecer) ya que hemos tenido difernetes intentos, y muchos de ellos han sido fracasos debido a el poco interes y especialmente el seguimiento. De lo más actual, que he escuchado sobre la investigación participativa es de Tomas Villasante de la universidad complutense y me parce que realmente es un gran avance, claro esta que sería necesaria una verdadera aplicación en su metodología.
Estoy totalmente deacuerdo en el hecho de que la agroecología es una forma de vivir, y creo que es por ello, pues hay que dejar de lado muchas «comodidades» de nuestros tiempos, que se tienen tantos fracasos. Pero, hay que seguir intentando una armonia con nuestro entorno y un verdadero desarrollo. Hace tiempo (discutiendo con unos prof.) llegamos a la conclusión de que un verdadero desarrollo no es la aplicación constante de nuevas tecnologías, sino el bienestar en la forma de vida.
Gracias por este espacio y las interesantes publicaciones
Estimado Xicotencatl, si leiste el post de este dia, notaras que ha habido en México personas que han trabajado en ese sentido. como el Efraim Hernández Xolocotzi. Esta el Dr. Carlos Alberto Ortiz Solorio y la pleyade de alumnos de ambos. En la Conafor de México tenemos el PROCYMAF o Desarrollo Forestal Comunitario, basado en Plan de Acción Comunitario. E
[…] ¡Qué bárbaro!. Tal actividad se denomina cartografía social, que tiene mucho que ver con la investigación participativa en agronomía (IPA) y la gestión del territorio. No cabe duda que las TIC, nos ofrecen un instrumento interesantísimo de diálogo con las etnias […]
[…] Investigación participativa en agronomía (IPA) y gestión del territorio […]
Mi enhorabuena a Antonio por el artículo. No se puede decir más con tan pocas palabras y no entiendo como se puede intenter marginar a una cabeza así, de la que deberiamos estar orgullosos y de la que debería sacarse provecho. No sé donde están todos los que se llaman sus amigos y todas las personas que se han beneficiado en alguna medida de sus ideas. De lo que no cabe duda es de que tiene el respeto , la admiración y el agradecimiento del sector agrario y debería tener el de los gobernantes.
Le escribo desde una conocida agencia de comunicación. Estaríamos interesados en poder contactar con usted para poder facilitarle contenido de uno de nuestros clientes. Por ello agradeceríamos que nos facilitaran un correo y nombre de contacto.
Un saludo.
Estimada Sonia,
Gracias por tu comentario.
Me gustaría que me aclararas si te refieres al administrador del blog (quien te escribe) o a Antonio Bello. Supongo que será el último. Supongo que el Dr. Bello responderá afirmativamente. Pero en cualquier caso necesito tu aclaración para hablar con Antonio Bello y solicitarle su permiso, si fuera el caso. Por mi parte no habría problema
Un cordial Saludo
Juanjo Ibáñez
Sonia, tras tu mail, Ya le he pasado tus datos a Antonio Bello.
Un cordial saludo y gracias por interesarte por este serio problema.
Juanjo Ibáñez
María,
Ya sabes de sobra que yo fui un «disidente» de Antonio ya que nuestros carácteres chocaban por ser ambos muy fuertes, que no nuestras ideas.
Y sabes que aun así hemos mantenido mutuamente nuestra amistad y apoyo mutuo.
Efectivamente resulta muy lamentable que Antonio formara a decenas de personas, que muchas ellas sacaran sus plazas gracias a la sólida formación que les dio y su apoyo, que durante años corretearan a su alrededor como mariposas para sacar partido y que ahora «si te he visto no me acuerdo», cuando no le arremeten algunos con puñales por la espalda.
Y esto ya nos dice la moral, ética y catadura de muchos investigadores actuales, ¡sí!, esos que hablan de objetividad científica y dedican todos sus esfuerzos hacia la mejora de la sociedad. Jaja. Estamos criando cuervos. Y quizás también cobardes, ya que cada vez hay más miedo y más adulación al poder, caiga quien caiga, incluso a los que deben agradecerle «eternamente» poder disfrutar de un trabvajo tan maravilloso como el nuestro.
Yo que también «amo a la ciencia», aunque algunos me critican porque dicen que la ataco, me pregunto que tipo de «amor» atesoran esos personajillos parásitos, chupópteros y desagradecidos. Y tu y yo sabemos que son muchos, ya que Antonio fue incansable.
Que lástima. Su silencio y cobardía lo dice todo, contrastando con las varias asociaciones de agricultores que se ponen en contacto contigo, con Antonio e incluso conmigo horrorizados por el tema.
Son algunos de estos últimos los que comentan que Antonio era la excepción, más que la regla, entre los científicos de su ámbito. Y eso lo dice todo. Si luego los investigadores se lamentan de que los agricultores no colaboran, en lugar de acusarles de su falta de cultura científica, debían recapacitar sobre sus necias y lamentables actitudes.
Al fin y al cabo nos pagan los ciudadanos con sus impuestos y no nuestras instituciones, que no dejan de ser meras correas de trasmisión, a nenudo muy mal engrasadas. ¿A quien debe uno pleitesía?.
Un abrazo
JuanjoIbáñez
Todo muy lamentable.
De hecho, si es muy lamentable que los que se supone velan por la seguridad y el desarrollo de las diferentes sociedades se encuentren orientados mas hacia la corrupción, y al consumismo de los agroquimicos, transgenicos y demas «super productos».
Aca en Mexico existen pocas personas que estan intentando aplicar la investigación participativa, sin enbargo, vamos a pasos muy lentos (a mi parecer) ya que hemos tenido difernetes intentos, y muchos de ellos han sido fracasos debido a el poco interes y especialmente el seguimiento. De lo más actual, que he escuchado sobre la investigación participativa es de Tomas Villasante de la universidad complutense y me parce que realmente es un gran avance, claro esta que sería necesaria una verdadera aplicación en su metodología.
Estoy totalmente deacuerdo en el hecho de que la agroecología es una forma de vivir, y creo que es por ello, pues hay que dejar de lado muchas «comodidades» de nuestros tiempos, que se tienen tantos fracasos. Pero, hay que seguir intentando una armonia con nuestro entorno y un verdadero desarrollo. Hace tiempo (discutiendo con unos prof.) llegamos a la conclusión de que un verdadero desarrollo no es la aplicación constante de nuevas tecnologías, sino el bienestar en la forma de vida.
Gracias por este espacio y las interesantes publicaciones
Estimado Xicotencatl, si leiste el post de este dia, notaras que ha habido en México personas que han trabajado en ese sentido. como el Efraim Hernández Xolocotzi. Esta el Dr. Carlos Alberto Ortiz Solorio y la pleyade de alumnos de ambos. En la Conafor de México tenemos el PROCYMAF o Desarrollo Forestal Comunitario, basado en Plan de Acción Comunitario. E
[…] ¡Qué bárbaro!. Tal actividad se denomina cartografía social, que tiene mucho que ver con la investigación participativa en agronomía (IPA) y la gestión del territorio. No cabe duda que las TIC, nos ofrecen un instrumento interesantísimo de diálogo con las etnias […]
[…] Investigación participativa en agronomía (IPA) y gestión del territorio […]