De acuerdo al  Frozen Ground Data Center, los suelos permanentemente helados (pero no necesariamente todo el año hasta su superficie) ocupan una extensión del 24% de las tierras emergidas del hemisferio norte y el 12% del total edafosférico. Tal hecho es debido a la asimétrica distribución de las masas de tierra bajo climas subárticos y boreales, por cuanto su extensión en el hemisferio sur resulta ser mucho menor. En cualquier caso, su asociación con Histosoles (turberas)  y gleysoles (suelos hidromórficos o con problemas de encharcamiento) genera que el carbono secuestrado por los paisajes de suelos a estas elevadas latitudes sea mucho mayor, en términos porcentuales, que en el resto de la edafosfera (salvo algunas excepciones de carácter regional).  Jamás en la historia de la edafología se había prestado tanta atención a un tipo de edafotaxa poco apto para las producciones agrarias, pastorales y forestales. Sin embargo, debido al calentamiento climático, su deshielo puede generar la emisión de ingentes cantidades de CO2  y metano a la atmósfera,  lo que aceleraría la salida de gases de invernadero en proporciones desorbitadas desde el suelo. De ser cierto tal proceso, podría devenir en una catástrofe de enormes magnitudes a nivel global. Las temperaturas ascenderían a mayor velocidad, al igual de que el nivel del mar, entrando en un ciclo de retroalimentación positiva cuyas dramáticas consecuencias aun está por evaluar.  Sin embargo, debido a la ausencia de inventarios adecuados, así como por nuestros escasos conocimientos de su estructura y dinámica de los edafotaxa helados (Criosoles), existen opiniones muy dispares sobre las relaciones entre el cambio climático y el permafrost. Hoy os hablaremos de su distribución geográfica actual. En sucesivos post analizaremos su pasado, así como las características de estos singulares tipos de suelos. 

 

Deshielo estival

Criosol landacape. Fuente: Nacional Geographic

 

En verdad que en la prensa científica se han publicando recientemente artículos de investigación de cuyos resultados se desprenden conclusiones muy dispares, desde las más alarmistas, hasta otras en las que se defiende que su posible velocidad de deshielo y resiliencia al cambio climático es mucho menor de lo esperado. Bajo este panorama, hasta los propios edafólogos andamos un tanto confundidos. Este es el motivo, por el que retornaremos a hablar en los próximos post sobre el tema, mostrándoos unas y otras hipótesis, mejor o peor sustentadas por evidencias empíricas. Ya hablamos de Criosoles (suelos helados en sentido estricto) y permafrost (vocablo más genérico y que además incluye a los submarinos) en los siguientes post previos.

 

Concepto de Permafrost y Suelos Helados. ¿Cual es la Diferencia?

Suelos Helados y Crioturbación: Criosoles o Gelisoles

Suelos, Cambio Climático y Permafrost

Secuestro de Carbono Orgánico de los Suelos del Mundo: Mapa Mundial de Distribución

Suelos De las Regiones Circumboreales: Mapas de Distribución geográfica

Sapropeles Submarinos y Cambio climático

Suelos y Vegetación de la Región Biogeográfica Ártica de Europa (Bioma Tundra)

 

 

En el Manual de Clasificación de suelos de la WRB (2006-2007) se nos informa de lo siguiente acerca de su distribución a nivel global.

 

CRIOSOLES

Los Criosoles comprenden suelos minerales formados en un ambiente de permafrost. Cuando hay agua presente, ésta ocurre principalmente en forma de hielo. Los procesos criogénicos son los procesos formadores de suelos dominantes. Los Criosoles se conocen ampliamente como suelos con permafrost. Otros nombres comunes para muchos Criosoles son: Gelisoles (Estados Unidos de Norteamérica), Cryozems (Federación Rusa), Suelos Criomórficos y suelos Polares de desierto.

 

 

Distribución Regional de los Criosoles: Geográficamente, los Criosoles están en los círculos polares de ambos hemisferios. Estos cubren un estimado de 18 x 106 km2 o cerca del 13% del área de la superficie global. Los Criosoles ocurren en las regiones permafrost del Ártico y también se extienden por la zona sub-ártica, son discontinuos en la zona boreal y son esporádicos en las zonas montañosas más templadas. Las principales áreas con criosoles se encuentran en Rusia (10x 106 km2), Canadá (2.5x106km2), China (1.9x106km2) y Alaska (1.1x106km2), y en partes de Mongolia. Más pequeñas ocurrencias han sido reportadas de regiones permafrost en el norte de Europa, Groenlandia y las áreas libres de hielo de la Antártica

 

Los Criosoles son a menudo encontrados junto a Histosoles y Gleysoles. Criosoles en materiales de textura gruesa y sobre recientes depósitos aluviales y coluviales, pueden ocurrir junto con Podzoles, Planosoles y/o Cambisoles. En algunos sitios los Criosoles se encuentran en pendientes de cara al norte en áreas de elevada altitud; las pendientes de cara al sur, normalmente no tienen suelos permafrost.

 

 

 

Foto de un Glacic Histosol

Turbera con permafrost

 

Manejo y uso de Criosoles

La actividad biológica natural e inducida por el hombre en los Criosoles está confinada a la capa superficial activa que se deshiela cada verano y también protege al permafrost subyacente. La remoción de la capa de turba sobre el suelo o de la vegetación y/o el disturbio de la superficie del suelo generalmente conduce a alteraciones de la profundidad del permafrost y a cambios ambientales rápidos y dramáticos, con posible daño a estructuras creadas por el hombre. La mayoría de las áreas de Criosoles en Norteamérica y Eurasia están en estado natural y soportan suficiente vegetación para pastorear animales, tal como el caribú, reno y buey almizclero. Grandes manadas de caribú todavía migran estacionalmente en la parte norte de Norteamérica; las manadas de renos son una industria importante en las vastas áreas del norte.

 

 

 

Mapa del Mundo de Criosoles, Fuente: Wikimedia Commons

 

Como muchos de vosotros sabéis, existen dos versiones de la clasificación de la WRB, una de 1998 y otra de 2006-2007. Sobre la primera, la FAO editó un libro muy didáctico que llevaba por título Lecture Notes on Major Soils of the World en el que se informaba de  la morfología, génesis, clasificación, geografía, aptitudes de uso, etc., de los diferentes tipos de suelos, conforme a aquella versión. El problema consiste en que solo se encuentra en la lengua del imperio, es decir en suahili. Sin embargo, por iniciativa propia, Francisco Javier Manríquez Cosío, del INEGI (México) la tradujo al español castellano. Pronto la colgaremos para que disfrutéis de ella, ya que hasta la fecha no ha sido posible por motivos logísticos y/o domésticos. Desafortunadamente, no se ha realizado una publicación semejante ajustada a la WRB (2006-2007). En cualquier caso, para los fines que nos proponemos, el arduo e ingrato trabajo llevado a cabo por Francisco Javier Manríquez Cosío nos permite ampliar la información, pudiendo añadir unas líneas sobre la relación entre Criosoles y calentamiento climático.  

 

El calentamiento global y los Criosoles Ha sido predicho que el calentamiento climático causará un incremento significativo de la temperatura en las áreas del norte. Los Criosoles contienen mucho carbono orgánico y actúa como reductor de carbono en el clima actual. Si el CO2 contenido en la atmósfera pudiera duplicarse, el calentamiento de las regiones circumpolares podría alterar el régimen termal de los suelos e incrementar la profundidad de la capa activa. Esto podría mejorar fuertemente la descomposición de la materia orgánica del suelo; el carbono previamente fijado, podría ser liberado a la atmósfera como dióxido de carbono y metano y acelerar el calentamiento global aún más.

 

 

 

Mapa del Mundo del Permafrost: Tendencias en la Ingeniería

 

Patrones de distribución en el paisaje a escala continental:

Como puede observarse en el mapa de distribución de los paisajes de permafrost que os ofrecemos en la figura de arriba, podemos distinguir groseramente tres áreas de distribución conforme se alejan del polo norte. En la primera (azul intenso) forman una matriz más o menos continúa (cubren más del 90% del espacio geográfico). En la segunda banda, hacia el sur, comienzan a ser gradualmente menos abundantes  (entre el 90 y el 10% de la superficie), alternando con otros tipos de suelos o edafotaxa que no se encuentran congelados. Finalmente, en azul muy claro se muestran los territorios en donde el permafrost tan solo aparece aisladamente en localidades muy concretas que favorecen la congelación permanente del agua en el suelo. Más al sur, aparecen manchas aisladas en las regiones montañosas y plateaux o paramos a gran altura. Pues bien, cabría esperar que el derretimiento del permafrost, junto con su consiguiente encharcamiento y emisión de gases con efectos de invernadero (anhídrido carbónico y metano) comenzara en el sur y avanzara hacia el norte. Sin embargo, es muy posible que el proceso real no se ajuste a un modelo tan sencillo. En otras palabras tal patrón podría ser mucho más complejo. No obstante, habrá que esperar a que futuros avances científicos nos permitan progresar mucho más en el conocimiento de la estructura y dinámica de estos sistemas.

 

 

 

Criosoles y turberas Geoforma de Pingo Fuente: ISRIC

 

Continuara………

 

Juan José Ibañéz   

Francisco Javier Manríquez Cosío (INEGI México)

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9 comentarios

  1. PIENSO QUE TODOS DEVERIAMOS HACER CONCIENCIA DE LO QUE ESTAMOS VIVIENDO Y HACER ALGO PERO YA PORQUE ESTA POLUCION HAMBIENTAL NOS ACABARA HA TODOS NO NADAMAS A LOS QUE SE DESASCEN DE SUS PRODUCTOS QUIMICOS,NUCLEARES O RADIAOCTIVOS POR ESO DEVEMOS HACER CONSIENCIA A TODA LA HUMANIDAD Y DAR A CONOCER ESTE TIPO DE ARTICULOS,ME GUSTARIA RESIVIR Y COMPARTIR INFORMACION POR MEDIO DE MI MAIL.
    BASTANTE INTERESANTE ESTE TEMA GRACIAS.

  2. al igual q el compañero jose soto, creo q debemos crear conciencia no por nosotros si no por nuestras nuevas jeneraciones pues, ellos ban hacer los unicos perjudicados.todavia estamos a tiempo de hacer algo por conservar nuestra tierra y nuestro planeta pues, ya q unos de los factores q intervienen en la formacion del suelo y q yo considero es el mas importante es el hombre.

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