Aguas de Inundación: Que son y porqué preocuparse
Fuente: Colaje imágenes Google
Antaño, las inundaciones y sus aguas eran fuente de calamidades primero, y después de fertilidad, por cuanto depositaban sedimentos ricos en nutrientes, y materiales minerales arrastrados por sus cauces, producto de la erosión del suelo aguas arriba. En la desembocaduras de las cuencas se disfrutaba así de suelos muy fértiles. Lamentablemente ya no es así ,si no todo lo contrario, como os anunciamos hace 16 años en nuestro post “El Sistema Cardiovascular de Gaia: La Manifestación de un Planeta Enfermo”. Las razones son tan simples como reveladoras. Al transformar la superficie de la Tierra, la acción humana ha cambiado las reglas del juego de Gaia y Gea. Como el ser humano ha sembrado la superficie emergida de sitios potencialmente contaminantes e infraestructuras que de arrasarse son sumamente peligrosas, actualmente los cauces acarrean muchos contaminantes algunos de los cuales contaminarán los suelos en la desembocadura. Sin embargo, las grandes avenidas e inundaciones arrasan todo lo que encuentran a su pasó más allá del cauce, y son un vertedero peligro más allá de los devastadores efectos iniciales. La noticia que os ofrecemos hoy da cuenta de ello, advirtiéndonos que el refrán de “tras la tempestad viene la calma”, debe ser reemplazado por otro da la siguiente guisa “tras la tempestad viene un baile dantesco y la desdicha”.
Tras muchos años de sequía y vrios veranos horripilantes, salpicados por insufribles holas de calor, batiéndose un récor tras otro, llegó un diluvio que inundó parte de España. Un hecho que en los últimos años comienza a ser habitual en muchas partes del mundo, como consecuencia de las sequías e inundaciones producto del calentamiento climático. Si han visto ya algunas imágenes del colaje grafico que encabeza esta entradilla, se pensará dos veces repetirlas, tras leer la noticia. Por esta razón, debe advertirse a los ciudadanos muy seriamente de todos los gravísimos riesgos que conllevan. De hecho, andar entre aguas inundables ya es un serio riesgo, por cuanto algunos de sus efectos en la salud publican provienen de contaminantes y patógenos. En muchos casos la gravedad dependerá de lo que han arrasado las aguas cauces arriba, como a veces empresas altamente contaminantes, cuyos productos después navegan libremente al ritmo de la tumultuosa corriente. Pero hay más mucho más. Por eso en el blog de mi entrañable hermanita “Consuelo Ibáñez”, es decir “Salud Pública y algo más” se trataban temas como este. Consuelo fue primero alumna de un máster y luego profesora del mismo impartido por un instituto mundialmente famoso en la materia. Hablamos del “Centros para el Control y Prevención de Enfermedades CDC”. Por esta razón, tras leer la nota de prensa que viene abajo, he consultado las paginas Web del CDC y afectivamente atesoran un contenido mucho más detallado que os conmino a visitar, por cuanto sus consejos y advertencias nos interesan a todos”. Las Indicaciones, ricas en detalles, recomendadas por el CDC podéis leerlas aquí: “Agua de la inundación después de un desastre o una emergencia” CDC.
Lamentablemente en el “Sur Global” las tragedias, producto de las secuelas de las inundaciones son ostensiblemente mayores que en los países del “Norte Global, por no decir tenebrosas, si por el calor y el mal drenaje ese veneno acuoso se estanca. Resulta lamentable que ese rico “Norte Global pueda ayude poco a paliar financieramente la reconstrucción de parte de las catástrofes, pero, además suele olvidarse de las victimas vivas cuando comienza su purgatorio en la Tierra Contaminada.
Juan José Ibáñez
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¿Qué hay en Floodwaters?
Las inundaciones causadas por huracanes, el aumento del nivel del mar, la ruptura de una presa u otras causas pueden contener una desagradable mezcla de patógenos, productos químicos y escombros.
Por Meghan Bartels on agosto 30, 2023
Cuando tormentas como el huracán Idalia, que azotó la costa del Golfo de Florida como un huracán de categoría 3 el miércoles, inundan áreas con una marejada ciclónica y lluvias torrenciales, las aguas de inundación resultantes representan riesgos importantes más allá del daño físico inmediato que causan. A medida que el agua se acumula en una región, ya sea que la causa sea los efectos de una tormenta, una falla de la presa o cualquier otra razón, recoge una serie de amenazas para la salud humana, incluidas bacterias, virus, productos químicos, escombros, líneas eléctricas caídas e incluso animales salvajes.
Y esas amenazas solo aumentan a medida que el cambio climático hace que las inundaciones sean más frecuentes en todo el mundo. «Las inundaciones seguirán siendo un problema cada vez más común«, dice Thomas Frazer, ecologista de la Universidad del Sur de Florida, que estudia las inundaciones. «Nos enfrentamos a una realidad de aumento del nivel del mar, tormentas tropicales y huracanes más intensos y eventos de lluvia extrema en general».
Los materiales más pequeños en las aguas de inundación pueden ser los más peligrosos, dice Henry Briceño, un geólogo de la Universidad Internacional de Florida que estudia el agua. «Los problemas son cosas que, muchos de ellos, no se ven«, dice, citando en particular los patógenos y productos químicos que pueden acumularse en las aguas de las inundaciones.
Los patógenos a menudo provienen de sistemas de gestión del agua abrumados que desencadenan las salidas de aguas residuales, aunque las bacterias como las especies Vibrio que «comen carne» e infectan heridas también pueden viajar desde la naturaleza en el agua de mar. «Podrías inundar un sistema séptico; es posible que tenga un derrame de aguas residuales«, dice Frazer. «Así que hay una alta probabilidad de que se obtengan muchos contaminantes, patógenos potencialmente, en el agua«.
Ya sea que un área inundada sea urbana o rural, las aguas también pueden recoger una variedad de productos químicos que generalmente se mantienen alejados de los humanos, como el aceite de motor y los productos químicos de limpieza de las ciudades o los pesticidas y fertilizantes de las tierras agrícolas.
Otras amenazas son físicamente mayores. Las líneas eléctricas caídas pueden electrificar las aguas de la inundación, y las ramas de los árboles y otros restos pueden dañar a las personas que intentan moverse a través del agua, especialmente si esos restos están debajo de la superficie. «A menudo no se puede ver, y puede moverse rápidamente«, dice Frazer.
Las aguas de inundación también pueden transportar vida silvestre. En Florida eso puede incluir ejemplos tan dramáticos como caimanes. Más comúnmente, las inundaciones desplazan a animales como serpientes y ratas, o incitan a las hormigas de fuego a formar «balsas» de escape, masas flotantes de insectos dolorosamente urticantes.
La combinación básica de amenazas presentes en el agua de inundación es la misma en todo el mundo, dicen Frazer y Briceño, aunque la sopa exacta puede variar según las condiciones locales. En algunas áreas de África, Asia meridional y el Caribe, por ejemplo, se sabe que las inundaciones propagan las bacterias que causan la enfermedad diarreica del cólera.
En conjunto, no sorprende que el personal de emergencia recomiende que se mantenga alejado de las aguas de la inundación siempre que sea posible, incluso si está en un vehículo. Pero si bien es mejor evitar el contacto con el agua de la inundación, eso no siempre es factible para las personas que necesitan evacuar un área durante una emergencia y sus consecuencias, o para los rescatistas que intentan ayudarlos. Aún así, los expertos advierten a aquellos que lidian con inundaciones que no subestimen los peligros de esta agua.
«Nunca querrás ingerir aguas de inundación«, dice Frazer. «Definitivamente trata de tomar una ducha, un baño, lo que sea que necesites hacer lo antes posible. Solo desea reducir la exposición a patógenos y toxinas que podrían estar en esa agua; Quieres sacarlos de tu cuerpo». Si es posible, es mejor mantener cualquier lesión alta y seca. «Tenga cuidado con los rasguños y cosas así«, dice Briceño, «porque esos son lugares para que las bacterias y los patógenos ingresen a su cuerpo».
Cuando el agua de la inundación persiste, particularmente en regiones más cálidas, también puede convertirse en un caldo de cultivo tanto para patógenos como para mosquitos que pueden transportarlos, dice Frazer, por lo que las personas en áreas inundadas no deben bajar la guardia a medida que pasa el tiempo.
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Incluso para las personas que están lejos de los estragos de Idalia o del próximo gran huracán, es importante recordar que las inundaciones pueden ocurrir en cualquier lugar. «Las inundaciones vienen en todas las formas, no solo se limitan a nuestras áreas costeras. Lo vemos tierra adentro, tanto en áreas de baja elevación como en áreas de gran elevación», dice Frazer. «El problema general es geográficamente agnóstico«.
Ejemplo de post previos relacionados con la materia tratada en este post,
El Sistema Cardiovascular de Gaia: La Manifestación de un Planeta Enfermo
Contaminación del Suelo = Contaminación Marina (El Vertedero Oceánico)
Degradación ecológica de los márgenes Fluviales: Erosión, Contaminación, Obras de Acondicionamiento
Un Villancico Contaminado (Biosfera Envenenada por Tierra, Mar, Aire y Suelo)