Buscando la Sustentabilidad por Caminos Insustentables (y los Objetivos del Milenio)
Fuente: Colaje imágenes Google
¡Desolador! Cuando surgen problemas ambientales, primero aparecen los modelos de negocio y quizás, tan solo quizás, tras ellos se propongan “presuntos remedios”, la mayoría de los cuales terminan siendo un rotundo fracaso. Y así cualquier intento de alcanzar los objetivos de desarrollo del milenio termina siendo un rotundo fracaso. Tanto las multinacionales, como los gobiernos y agricultores insensatos son los responsables. Empero debemos tener en cuenta que todo el sistema económico ultra-neoliberal no podría sobrevivir sin destrozar GAIA y GEA y de paso nuestra salud. Si Milton Friedman levantara la cabeza, virtualmente tendría el impulso de cortársela de cuajo Y por si fuera poco, los poderes utilizan las noticias de la ciencia con vistas a aumentar la ceremonia de la confusión. Según la prensa y desde hace casi 20 años, leo multitud de noticias que dicen haber logrado, por ejemplo, desarrollos tecnológicos ultra económicos con vistas a potabilizar el agua, desalinizarla, cultivos contra la sequía, plásticos reciclables, plásticos compostables, y una lista interminable que, cuando no fallan, resultan ser peores remedios que las enfermedades que intentaban erradicar. ¿Os acordáis del fracaso de la agroenergética y sus biocombustibles?.
Comenzaremos por la producción del aceite de palma en Malasia. Pues bien, una vez reconocido por todos los expertos e instituciones internacionales la atrocidad que se estaba cometiendo, una década después siguen causando estragos en la salud, el clima y el medio ambiente general, tras deforestar maravillosas selvas pluviales pantanosas. Hace ya muchos años que redactamos el siguiente post: “Desastres Ecológicos Causados por la Agroenergética y Biocombustibles de Primera Generación: El Gran Incendio de los Histosoles de Indonesia”. Pues bien, me han salido canas, y seguimos con el mismo cuento. Obviamente no se trataba de biocombustibles para reducir las emisiones derivadas de los combustibles fósiles, que continua aumentando, sino un negocio asesino que sigue medrando. Fijaros en la siguiente frase que he extraído de una de las noticias que os he traducido hoy: “El aceite de palma es el aceite vegetal más producido y consumido del mundo y todo el mundo sabe que su producción puede dañar el medio ambiente. Pero, ¿tienen los consumidores la imagen completa? De hecho, reemplazar el aceite de palma con aceite de colza requeriría un aumento de cuatro a cinco veces en la cantidad de tierra necesaria”. Con toda sinceridad no me lo puedo creer “cuatro a cinco veces en la cantidad de tierra necesaria», ¿respecto a qué? Y además adelantándome a la noticia, del mismo modo se denuncia que los ciudadanos se encuentras mal informados ya que también se niegan a comprar los obtenidos por métodos sostenibles. Empero en la prensa se denuncia también constantemente como las empresas y especialmente las multinacionales (dejo para otro post el tema del glifosato de Monsanto/Bayer que también es tremendo, incluso a pesar de que en muchísimos países se encuentra “teóricamente prohibido”, salvo excepciones) mienten como bellacos. Y aquí os dejo hoy, para terminar otra nota de prensa al respecto “Un estudio muestra una mayor toxicidad en bolsas compostables que en el plástico convencional ”. Empero aquí no queda todo: ya que (aunque previamente había sido demostrado) señalan que “Además, las bolsas de plástico reciclado también mostraban mayores niveles de toxicidad que las convencionales, ya que también se añadirían aditivos plásticos para su reutilización. Oséase que al final del todo, ¿la mejor alternativa resulta ser el plástico sin reciclar? Ya sabemos lo que es la plasticosfera, pues sigamos ya no expandiéndola sino haciéndola más dañina.
Los que tenemos todavía el nivel adquisitivo poco deteriorado, y algo de conciencia ecológica, compramos, generalmente a precios mucho más caros los productos reciclados que los originales de papel y plástico. Ahora resulta que las bolsas compostables, envenenan todo. ¿Nadie las analizo?, ¿nadie hizo los estudios permitentes para testar su toxicidad antes de ser aprobados y salir al mercado? Resulta que nos gastamos más dinero por no contaminar, y en realizad contaminamos más el suelo y a nosotros mismos a precios desorbitantes, eso si ¿ecologicamente?.
Nos encontramos con el dilema tecnocientífico de la Inteligencia Artificial Generativa. Primero se lanza al mercado, luego se alerta a la ciudadanía que puede acabar con nuestra civilización, para seguidamente implementarla si o si, en los motores de búsqueda de internet, entre otros aparatitos, y seguidamente se crean “consejos de expertos” que tardan años en terminar sus sesudas disquisiciones a la hora de ofrecer a los legisladores sus recomendaciones. Tener en cuenta que mucho de sus miembros investigan la IA, mantenido agrias discusiones entre los más disparatados puntos de vista. ¡El mundo al revés! ¿La sostenibilidad volteada?.
Comienzo a pensar que ya me encuentro inmerso en el Mundo de Matrix.
Y como dice La Ley de Campoamor: Y es que en el mundo traidor / nada hay verdad ni mentira: / todo es según el color / del cristal con que se mira.
¡Corramos un estúpido velo!
Juan José Ibáñez
Continúa…………
¿Hay más en el aceite de palma que la deforestación?
Por Staff Writers; Gottingen, Alemania (SPX) 26 de septiembre de 2023
Los hallazgos de este estudio son importantes, ya que proporcionan información sobre cómo se puede alentar a los consumidores a lidiar con elecciones de alimentos complejas y a menudo controvertidas. «Los consumidores tienen un tiempo limitado para sopesar los atributos sociales, ambientales o de salud de los productos«, dice Sophie-Dorothe Lieke del Departamento de Economía Agrícola y Desarrollo Rural de la Universidad de Gotinga.
El aceite de palma es el aceite vegetal más producido y consumido del mundo y todo el mundo sabe que su producción puede dañar el medio ambiente. Pero, ¿tienen los consumidores la imagen completa? De hecho, reemplazar el aceite de palma con aceite de colza requeriría un aumento de cuatro a cinco veces en la cantidad de tierra necesaria.
La investigación dirigida por la Universidad de Gotinga investigó las actitudes, creencias y comprensión sobre el aceite de palma del público en general en Alemania, y cómo esto se vincula con el uso de la tierra. Los investigadores muestran que a las personas les resulta difícil conocer las consecuencias de sus elecciones de compra, incluso cuando se proporciona información adicional. Los resultados fueron publicados en Sustainable Production and Consumption.
Para este estudio, los investigadores primero realizaron una revisión en profundidad de la literatura sobre los efectos del «cambio indirecto del uso de la tierra» para evaluar los efectos del cambio de la producción de aceite de palma. El «cambio indirecto del uso de la tierra» se refiere a los efectos sobre el medio ambiente debidos al cambio de uso de la tierra resultante del aumento de la demanda de determinados cultivos agrícolas o biocombustibles. Luego realizaron una encuesta en línea sobre una muestra de 1.247 personas en la población alemana.
Entre otros temas, las preguntas cubrieron la importancia general del aceite de palma en la industria alimentaria y exploraron cómo se sentía la gente sobre la afirmación «libre de aceite de palma» en comparación con una etiqueta de certificación, las consecuencias del cambio de uso de la tierra y las comparaciones con el uso de otros aceites vegetales. Luego midieron el efecto de proporcionar a los consumidores información adicional en forma de dos infografías separadas: una sobre el aceite de palma en general y la otra sobre el cambio indirecto del uso de la tierra específicamente. Los resultados mostraron que la información y el etiquetado del producto pueden producir una imagen confusa y engañosa para los consumidores. La provisión de información adicional influyó en las respuestas, pero el efecto fue pequeño. Los clientes se sintieron atraídos por la etiqueta «libre de aceite de palma».
Mostraron más confianza hacia él y lo percibieron como superior tanto desde el punto de vista de la salud como del medio ambiente, incluso si para este último el aceite de palma producido de manera sostenible podría ser una opción más respetuosa con el medio ambiente. Después de recibir la información adicional, muchos consumidores todavía eran escépticos sobre los beneficios potenciales del aceite de palma producido de manera sostenible en comparación con otros aceites vegetales como la soja, el girasol y el aceite de colza.
Los hallazgos de este estudio son importantes, ya que proporcionan información sobre cómo se puede alentar a los consumidores a lidiar con elecciones de alimentos complejas y a menudo controvertidas. «Los consumidores tienen un tiempo limitado para sopesar los atributos sociales, ambientales o de salud de los productos», dice Sophie-Dorothe Lieke del Departamento de Economía Agrícola y Desarrollo Rural de la Universidad de Gotinga.
Lieke agrega: «Nuestra investigación muestra que muchos encuentran la información abrumadora y quieren una guía clara y confiable. Esto podría ser en forma de introducción de una «etiqueta ecológica» que no solo recogería las diferencias en los sistemas de producción, sino que también ayudaría a guiar a los compradores a tomar decisiones más informadas sobre el impacto ambiental que tienen sus compras«.
Informe de investigación: ¿Pueden los consumidores entender que hay más en el aceite de palma que la deforestación?
Malasia culpa a los incendios indonesios por la neblina y la mala calidad del aire (terradaily.com)
Malasia culpa a los incendios indonesios por la neblina y la mala calidad del aire
Ppr AFP Staff Writers; Kuala Lumpur (AFP) 30 de septiembre de 2023
Cientos de incendios forestales en Indonesia han causado neblina que ha empeorado la calidad del aire en partes de Malasia, dijo el principal funcionario ambiental de Kuala Lumpur, una afirmación que Yakarta negó el sábado.
Los brotes de incendios forestales que arrojaron smog en 2019 hicieron que Malasia dijera que presionaría a Indonesia para combatir el problema anual, que a menudo es causado por incendios encendidos para despejar tierras agrícolas.
El director general del Departamento de Medio Ambiente de Malasia, Wan Abdul Latiff Wan Jaffar, dijo que los incendios estaban empeorando la contaminación del aire en la costa oeste del país y en Sarawak, en la parte malaya de la isla de Borneo.
«La calidad general del aire en el país muestra deterioro», dijo en un comunicado emitido el viernes.
«Los incendios forestales que ocurren en la parte sur de Sumatra y las partes central y sur de Kalimantan (Borneo), Indonesia, han causado que la neblina cruce las fronteras», dijo.
La declaración dijo que las imágenes satelitales mostraron 52 «puntos calientes» de incendios forestales en Sumatra y 264 en Borneo, según un informe del Centro Meteorológico Especializado de la ASEAN (ASMC), con sede en Singapur, que rastrea la neblina que afecta al sudeste asiático.
El ministro de Medio Ambiente de Indonesia respondió a las afirmaciones.
«El hecho es que no hay neblina transfronteriza», dijo Siti Nurbaya Bakar a la AFP el sábado, compartiendo imágenes de ASMC que, según dijo, solo mostraban neblina en Sumatra y Borneo.
«¿Ellos (Malasia) se refieren a los datos de puntos calientes? ¿No saben la diferencia entre puntos calientes y puntos de fuego? Si (tú) no lo sabes exactamente, no hables descuidadamente».
Dijo que Yakarta revisaría y castigaría a las compañías si el gobierno encuentra incendios forestales en sus áreas de concesión.
Los bomberos en la isla occidental indonesia de Sumatra combatieron grandes incendios de turberas este mes que cubrieron Palembang, una ciudad de casi dos millones de personas, en neblina durante semanas.
Los incendios indonesios tienen lugar todos los años durante la estación seca, pero estos son los peores desde 2019, cuando obligaron a casi 2.500 escuelas a cerrar en toda Malasia.
Los incendios en 2015 también estuvieron entre los más mortíferos registrados, cubriendo el sudeste asiático con humo tóxico durante semanas y causando que muchas personas se enfermaran, las escuelas cerraran y los vuelos fueran cancelados.
La gran mayoría de los incendios forestales de Indonesia tienen lugar en Sumatra y Borneo, que se divide entre Indonesia, Malasia y Brunei.
Indonesia y Malasia han llevado a cabo la «siembra de nubes», que utiliza productos químicos en un intento por inducir la lluvia, en intentos anteriores de combatir los incendios.
La contaminación con microplásticos que cae sobre las ciudades y llega hasta los pulmones
Un estudio muestra una mayor toxicidad en bolsas compostables que en el plástico convencional
Un estudio, liderado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), muestra un alto nivel de toxicidad en las bolsas de plásticos compostables, que aumenta con la fotodegradación, es decir, al incidir los rayos ultravioletas en ellas.
Compuestos tóxicos
Para la investigación, liderada por científicos del Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA-CSIC), del Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC) y de la plataforma Susplast, y publicada en la revista Journal of Hazardous Materials, se realizó una extracción de las bolsas para analizar los compuestos tóxicos que podían ser liberados al medioambiente.
Durante el estudio se evaluó la toxicidad de dichos compuestos con líneas celulares de pez cebra en tres situaciones distintas: directamente, a partir de las muestras de las bolsas; tras una simulación de envejecimiento de las bolsas con rayos ultravioleta (fotodegradación); y mediante los pequeños fragmentos de las bolsas que quedaban después de convertirse en abono o compost de calidad.
Finalmente, se analizó el abono resultante del proceso de compostaje de las bolsas.
Porte precisa que la hipótesis es que los fabricantes “añaden aditivos químicos para elaborar las bolsas biodegradables que podrían ser especialmente tóxicos”.
Además, las bolsas de plástico reciclado también mostraban mayores niveles de toxicidad que las convencionales, ya que también se añadirían aditivos plásticos para su reutilización.
Las bolsas de plástico biodegradables, que actualmente podemos encontrar en la sección de fruta y verdura de los supermercados cuentan con el sello “OK compost”, que indica que cumplen con las características y la legislación vigente para ser compostables industrialmente.
Toxicidad en el abono
El estudio liderado por el IDAEA-CSIC demuestra que la toxicidad observada en las bolsas compostables se traslada al abono durante el proceso de biodegradación, lo que repercute en la acumulación de contaminantes, que pueden afectar al medioambiente e impactar negativamente en la salud de la población.
López considera necesario investigar exhaustivamente la migración y la ecotoxicidad de estos nuevos materiales y establecer un buen marco normativo, basado en la evidencia científica, que asegure la inocuidad de los mismos antes de que lleguen al mercado.
“Necesitamos una interacción abierta y transparente con las empresas que permita avanzar en el desarrollo de materiales que, además de ser más sostenibles, sean seguros”, añade. ¿¿¿????
Los compuestos químicos concretos añadidos a estas bolsas compostables no se han podido identificar en el estudio, ya que muchos aditivos están protegidos por patentes.
“A pesar de que cada fabricante puede añadir unos aditivos diferentes a sus productos, hemos observado que todas las bolsas biodegradables tienen niveles similares de toxicidad”, aclara Tiantian Wang, primera autora del estudio e investigadora predoctoral del IDAEA-CSIC. EFEverde