La excelencia en la investigación matemática
Las matemáticas españolas han experimentado un gran desarrollo en las dos últimas décadas, pasando de una situación residual a convertirse en una de las disciplinas científicas más relevantes en nuestro país. Sin embargo, necesitan todavía un impulso definitivo para colocarse en los primeros puestos de la investigacón mundial, lo que significaría que hubiera habitualmente matemáticos españoles invitados en los Congresos Internacionales de Matemáticos o que recibieran premios internacionales de prestigio. Y para llegar a esto, ¿qué instrumentos deberíamos crear y que acciones desarrollar para dar este salto cualitativo? Manuel de León, director del Instituto de Ciencias Matemáticas, centro Severo Ochoa de excelencia científica desde la primera convocatoria del programa reflexiona sobre el asunto.
Históricamente, España no ha tenido nunca una gran tradición en matemáticas, a pesar de la importancia de las mismas en cualquier ciencia y desarrollo tecnológico y a su papel trascendental en la enseñanza. De hecho, si consultamos en los mapas de la web de historia de las matemáticas MacTutor los matemáticos nacidos en la Península Ibérica, lo que encontramos son mayoritariamente matemáticos árabes y judíos. Lamentablemente, a unos y a otros, de una manera u otra, los expulsamos del territorio.
Volviendo a la actualidad, a pesar de este crecimiento que llega a significar un 4,2% de la producción matemática en revistas internacionales, las matemáticas españolas necesitan todavía un impulso definitivo para colocarse en la élite. Estar en esta élite significaría que hubiera habitualmente matemáticos españoles invitados en los Congresos Internacionales de Matemáticos (ICM en sus siglas inglesas), o que recibieran premios internacionales de prestigio. Y para llegar a esto, ¿qué instrumentos deberíamos crear y que acciones desarrollar para dar este salto cualitativo?
Evidentemente, una de las medidas sería crear centros de excelencia, que concentren en un mismo espacio matemáticos de gran calidad y jóvenes talentosos, sometidos a la influencia de un flujo de visitantes internacionales del más alto nivel. De esta manera, estos nuevos investigadores serán los protagonistas de ese salto tan deseado.
En el Instituto de Ciencias Matemáticas (ICMAT) trabajamos en esa dirección. El ICMAT es un proyecto singular en la historia de las matemáticas españolas. Sus raíces pueden trazarse hasta el Laboratorio-Seminario Matemático creado en 1915 bajo el cobijo de la Junta de Ampliación de Estudios, que continuó después tras la Guerra Civil en el Instituto de Matemáticas Jorge Juan, clausurado desgraciadamente en 1984.
Proyecto singular hacia la excelencia
El ICMAT se estructura como un instituto mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) con tres universidades de madrid: Universidad Autónoma de Madrid (UAM), Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) y Universidad Complutense de Madrid (UCM). Esto se traduce en que los investigadores provienen, en el porcentaje conveniado, de estas cuatro instituciones.
El centro comienza su andadura en 2005 dentro del proyecto de renovación del CSIC que se puso en marcha con los primeros planes estratégicos de la institución. Así, el entonces modesto Departamento de Matemáticas, que formaba parte del Instituto de Matemáticas y Física Fundamental (IMAFF), elaboró un Plan Estratégico 2006-2009, que fue evaluado por una comisión internacional. Esta Comisión recomendó la creación de un instituto de matemáticas en el CSIC. Una vez aprobada esta actuación, el CSIC acordó con UAM, UC3M y UCM la colaboración para un instituto mixto que aunara lo mejor de cada institución.
Un instituto de investigación necesita una sede permanente para alojar a los científicos, por lo que se decidió construir un edificio en el campus de la UAM. Estas decisiones tardaron un tiempo en materializarse: desde 2006, que se inició el proceso, hasta julio de 2010, cuando se hizo la entrega de nuestro fantástico edificio. En septiembre el edificio era ya adecuado para trabajar, y se inició el traslado de los investigadores.
Se trata de una infraestructura pensada específicamente para las matemáticas, con 14.000 metros cuadrados, con un magnífico salón de actos, seis aulas de diferente capacidades, una extraordinaria biblioteca y un centenar de amplios y luminosos despachos. Sin duda, y así lo corroboran los numerosos visitantes, es una de las mejores infraestructuras matemáticas en el mundo.
Recursos humanos para impulsar el cambio
Esta sede supone el primer pilar para la búsqueda de la excelencia. Y el segundo pilar lo constituyen, evidentemente, los investigadores. El ICMAT se ha ido nutriendo fundamentalmente durante los últimos años de investigadores del Programa Ramón y Cajal: casi un tercio de todos los investigadores del programa en matemáticas han pasado por el ICMAT, unos se han quedado y otros se han instalado definitivamente en otras instituciones tras su paso por el centro. Por otro lado, el resto de personal ha sido elegido por un proceso selectivo llevado adelante por la Agencia Nacional de Evaluación y Prospectiva (ANEP). En consecuencia, todos los investigadores son de gran calidad, y su interacción puede generar resultados sorprendentes.
Finalmente, el tercer pilar de la excelencia lo conforman la gestión y la planificación. Esta planificación se inició en el primer Plan Estratégico 2006-2009 ya mencionado, se mejoró en el segundo Plan Estratégico 2010-2013 (evaluado también por una comisión internacional) y se consolidó con la presentación al Programa Severo Ochoa. La obtención del galardón de Centro de Excelencia Severo Ochoa no ha sido fruto de la casualidad sino de un trabajo intenso de muchos años en búsqueda de la calidad. La obtención del galardón ha supuesto también la puesta en marcha de una estructura de gestión impensable hasta hacía poco tiempo. Ahora el instituto afronta su tercer Plan Estratégico 2014-2017.
La excelencia es una palabra de la que se ha abusado en España, pero al contrario de las opiniones de algunos, sí se puede definir y se puede constatar. Por ejemplo, podemos ver reflejada la excelencia en los seis investigadores jóvenes del ICMAT que han conseguido ERC Starting Grants, los proyectos europeos más prestigiosos, por encima de centros como la Universidad de Oxford, la Universidad de Cambridge o el Imperial College. O también en las redes europeas e internacionales del más alto nivel en las que participa el ICMAT. Asimismo, los cinco Laboratorios ICMAT liderados por cinco prestigiosos matemáticos de Estados Unidos y el Reino Unido que se han puesto en marcha recientemente servirán para incrementar la capacidad formativa y la presencia internacional del centro. De la misma manera lo hará la primera Escuela de Verano del Instituto Clay de Matemáticas (CMI, en sus siglas inglesas) financiado por la Fundación Clay que se celebrará en el ICMAT en 2014.
Hoy en día el instituto recibe anualmente más de 250 visitantes internacionales, en sus actividades científicas en poco mas de dos años han participado unos 1300 matemáticos de todo el mundo y organiza o co-organiza más de 140 seminarios científicos al año. En fin, cifras alcanzadas a velocidad de vértigo y que no dejan de crecer.
Esto supone que estamos ante un centro que es decisivo para que las matemáticas españolas den ese salto cualitativo y se conviertan en referentes mundiales. Esta es una vocación clara del instituto, y en ese sentido desea colaborar con toda la comunidad matemática española para compartir las buenas prácticas.
Finalmente, siendo conscientes de la importancia de transmitir a la sociedad su investigación, colaborar en la divulgación de las matemáticas y despertar nuevas vocaciones, el ICMAT está desarrollando una importante labor en estos temas que lo han convertido sin duda en el referente nacional. Y más allá de los eventos de divulgación, el ICMAT interactúa con estudiantes de Secundaria; este año 2013 hemos recibido a escolares de 4º de la ESO a los que hemos mostrado como funciona un centro de investigación en matemáticas. La experiencia ha sido magnífica y la repetiremos anualmente. Recomendamos a los lectores una visita a la página web del instituto para darse cuenta de la intensidad de estas actividades, que llega también, cómo no, a las redes sociales. Esta actividad ha merecido la concesión por parte de la FECYT del reconocimiento como Unidad de Cultura Científica, la única en el ámbito de las matemáticas.
Estamos pues ante un auténtico centro de excelencia, pero conscientes de que queda un camino a recorrer. En ese sentido, los próximos años serán decisivos y el instituto debe aprovecharlos para consolidar sus capacidades y afrontar nuevos retos. Son momentos de grandes dificultades en nuestro país, pero también de mirar hacia el futuro y no refugiarse en un caparazón. Como dice el dicho latino, Audentes fortuna iuvat.
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Manuel de León (CSIC, Real Academia de Ciencias y Academia Canaria de Ciencias) es Director del Instituto de Ciencias Matemáticas (ICMAT).
CORDIAL SALUDO; ESTOY BUSCANDO CONTACTAR AL INSTITUTO CLAY DE MATEMATICAS DE LOS ESTADOS UNIDOS DE CAMBRIDEGE.
ESPERO ME PUEDAN COLABORAR Y MIL GRACIAS