María Andresa Casamayor, matemática y maestra

Gracias a la labor de los matemáticos de la Universidad de Zaragoza, en los últimos años se ha recuperado para el gran público la labor de una mujer zaragozana cuya vida estuvo dedicada al cultivo de las matemáticas y su enseñanza, María Andresa Casamayor.

María Andresa Casamayor nació en Zaragoza el 30 de noviembre de 1720, en una familia acomodada. Su padre era un comerciante de productos textiles y su madre también pertenecía a una familia de comerciantes.  Como solía ocurrir en aquellos tiempos, la familia tuvo hasta 9 hijos, siendo Andrea la séptima. Todos estos datos se pueden encontrar en el recién creado Museo de Matemáticas de Zaragoza.

Un hecho sorprendente en nuestro personaje es su precocidad. A los 17 años escribió lo que sería su obra principal y que se conserva, el libro titulado Tyrocinio arithmetico, Instrucción de las quatro reglas llanas, publicado en Zaragoza en 1737. Es una introducción a las cuatro reglas de la aritmética, con numerosos ejemplos que permiten el estudio y práctica de las mismas. El dominico Pedro Martínez, quien fue su amigo y colaborardor a lo largo de su vida, escribe sobre el tratado: «su fin, en esta Obrilla sólo es facilitar esta instrucción a muchos, que no pueden lograrla de otro modo».  La palabra Tyrocinio significa, aprendizaje o formación.

Las costumbres de la época obligan a que Andresa use un seudónimo masculino, Casandro Mamés de La Marca y Araioa, que es un anagrama de su nombre completo: María Andresa Casamayor de La Coma. Para rescatar la obra del olvido, en 2020 se publica de nuevo.

Andresa esribió un segundo tratado, El Para si solo, sobre aritmética, que desgraciadamente no se conserva.

En la investigación que ha sacado a la luz la obra de esta mujer desempeñan un papel crucial Pedro J. Miana y Julio Bernés, profesores e investigadores del Instituto Universitario de Matemáticas y Aplicaciones (IUMA) de la Universidad de Zaragoza.  Su trabajo les llevó a buscar en archivos hasta dar con las partidas bautismales que confirmaban su nacimiento en Zaragoza y que su auténtico nombre era Andresa, lo que casaba perfectamente con el seudónimo del Tyrocimnio arithmetico.

Andresa fue maestra de niñas para ganarse la vida. En la época, la subsistencia de una mujer que no estuviera casada o viviera con sus padres era casi imposible. En su caso, Andrea perdió a su padre en 1738, y a su protector Fray Pedro Martínez en 1738, año y medio después. Y el heredero del negocio familiar entra en deudas en 1740 y lo pierden todo en 1748. Pero el Ayuntamiento de la época pagaba estas enseñanzas a niños previa una autorización, y de eso vive Andresa, a la que se le proporciona también una vivienda gratuita. El 23 de octubre de 1780 falleció  María Casamayor, siendo enterrada en el cementerio de la iglesia del Pilar.

María Andresa Casamayor fue una pionera, en una sociedad como la de la época en que el acceso a la educación de las mujeres era muy difícil, y mucho más el acceso a la investigación y la enseñanza.

Para tener un mayor conocimiento de su vida y trabajos, remitimos al excelente artículo Soñando con números, María Andresa Casamayor (1720-1780), de Julio Bernués y Pedro J. Miana y publicado en la revista SUMA   En el mismo se cuenta como la investigación sobre nuestra protagonista surgió de la elaboración del documental La mujer que soñaba con números, de la productora zaragozana Sintregua Comunicación, dirigido por Mireia R. Abrisqueta.

De todos estos esfuerzos han surgido una entrada en Wikipedia y otra en Mactutor donde el lector puede encontrar detalles adicionales.

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Manuel de León (CSIC, Fundador del ICMAT, Real Academia de Ciencias, Real Academia Canaria de Ciencias, Real Academia Galega de Ciencias).

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Un comentario

  1. Muy interesante , gran matematica y más para aquella epoca en las que estudiar era una opción muy dificil de seguir.

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