Abunda el autor en sus argumentos desarrollando conclusiones a partir de premisas sin demostrar en el párrafo octogésimo sexto de El Origen de las Especies
El autor se ha creído que, efectivamente, las adaptaciones son el resultado de la lucha y entra en una espiral de verbosidad creciente sin reflexión. A partir de tal creencia ya no hay retorno posible. Esta será la base de toda argumentación posterior. Puestos en ruta, una fe firme nos obliga a seguir adelante por tan ruinoso camino. Cualquier variación ventajosa, mantendrá vivo al portador y le hará que tenga más descendencia. Así la variación crecerá y, poco a poco, paso a paso dará lugar a la adaptación. Pero,…. ¿Dispone el autor de alguna prueba? algún ejemplo que muestre que esto ha dado lugar en la naturaleza a una especie nueva? Lamentablemente No. O mejor dicho, sí. Todo prueba que la tautología es verdadera. Como tal tautología, gira, sí, más no avanza, y la ciencia debe ser avance y no vueltas.
Atrevidamente afirma el autor:
I have called this principle, by which each slight variation, if useful, is preserved, by the term natural selection, in order to mark its relation to man’s power of selection.
Y parece olvidarse ahí que él mismo, que confunde constantemente selección con mejora había comparado la importancia de la selección frente a la naturaleza del organismo con la que tiene la chispa en relación al combustible al producirse un fuego.
Efectivamente, escaso es el poder de Mejora Genética en manos del hombre si en la especie no hay una disposición a la mejora (Variación, heredabilidad,…..).
we clearly see that the nature of the conditions is of subordinate importance in comparison with the nature of the organism in determining each particular form of variation; perhaps of not more importance than the nature of the spark, by which a mass of combustible matter is ignited, has in determining the nature of the flames.
Vemos con claridad que el tipo de condiciones es de importancia secundaria en comparación a la naturaleza del organismo en la determinación de cada forma particular de variación, quizás de no más importancia que la naturaleza de la chispa, por la que se encendió una masa de materia combustible , al determinar la naturaleza de las llamas.
El poder de selección humano es limitado por la naturaleza, pero es que en la naturaleza no hay selección alguna, como tampoco hay mejora detectable ni cuantificable.
La selección no puede ser fuerza alguna. Incluso la selección humana en el proceso de mejora, es escasa fuerza puesto que como el autor ha indicado en alguna ocasión, la selección solo tiene efecto si la naturaleza lo permite.
La lucha, la competición por los recursos es, en primer lugar un concepto confuso, subjetivo, y antropomórfico, que tiene su origen en visiones sociales, por lo general de economistas y sobre todo, se entiende mal qué puede pintar en un tratado sobre el Origen de las Especies. Puestos a defender la importancia de la lucha como explicación, entonces la lucha lo explicaría todo. No la formación de las especies en particular que es lo que el título promete, sino cualquier otra cosa: La formación de un individuo, la de una familia, la de una población, la de un clan, la del Mundo mismo, o como ha indicado en alguna ocasión Stephen Hawking (refiriéndose a la selección natural que viene a ser lo mismo), puede ser la explicación general del Universo. En definitiva, un lema, un dogma de fe o cualquier otra cosa pero nada que tenga que ver con la ciencia.
Hace irrupción así de manera tan súbita un concepto que nadie que hubiese leído los capítulos anteriores dedicados a variación en domesticidad y variación en la naturaleza esperaría encontrar aquí. Podríamos haber esperado otras cosas, pero eso de struggle, lucha, de no haber resultado familiar por la extraordinaria difusión que han tenido las ideas del autor previa a su lectura e interpretación, sería algo completamente sorprendente e inesperado. Lo mismo podría haber aparecido el concepto de armonía, lirismo o cualquier otro substantivo que nombre algún tipo de actividad humana al que el autor complazca comparar con sus más personales observaciones de la naturaleza. Pero por algún motivo convino ensalzar la lucha. Decisión que merece un estudio profundo todavía por hacer.
Struggle, la lucha, un nuevo valor y referente en nuestras observaciones de la naturaleza. El problema es la dificultad de verlo como concepto científico: Entidad de dificil descripción, tampoco se refiere a una magnitud que posea unidades de medida al uso.
Hasta Darwin, los tratados de Historia Natural no parecen haberse centrado particularmente en la palabra struggle que ni tan siquiera aparece en el Historical Sketch en una sola ocasión, lo cual no es sorprendente puesto que la principal función del Sketch era dividir a los naturalistas entre los que creían y los que no creían en la evolución, no en lucha alguna. Pero tampoco podría haber aparecido de haberse ocupado el tal Historical Sketch de hacer una revisión formal de todos los autores que se han ocupado en la Historia Natural del Origen de las Especies. Tan impertinente es el término lucha por la supervivencia para estudiar el Origen de las Especies que a ningún naturalista se le había ocurrido contemplarlo antes. Cierto es que Schopenhauer había hablado ya de la voluntad de la naturaleza y el concepto de struggle puede ser una versión degenerada de la tal voluntad schopenhaueriana. Más aún el concepto de voluntad puede ser más preciso que el fantasma semántico al que llama Darwin Selección Natural. Aún resulta mucho más creíble y científica la idea de una voluntad en la Naturaleza, que una mera fuerza de selección sin voluntad.
Además, y como es bien sabido, la introducción del concepto struggle se debe a la perniciosa transposición al terreno de la naturaleza de la lectura que Darwin había hecho de Malthus. El mismo lo indica en su introducción:
In the next chapter the struggle for existence among all organic beings throughout the world, which inevitably follows from the high geometrical ratio of their increase, will be considered. This is the doctrine of Malthus, applied to the whole animal and vegetable kingdoms. As many more individuals of each species are born than can possibly survive; and as, consequently, there is a frequently recurring struggle for existence, it follows that any being, if it vary however slightly in any manner profitable to itself, under the complex and sometimes varying conditions of life, will have a better chance of surviving, and thus be NATURALLY SELECTED. From the strong principle of inheritance, any selected variety will tend to propagate its new and modified form.
Curiosamente, también Wallace había leído a Malthus y ambos, expresan en sus escritos la tal lucha por la existencia:
which inevitably follows from the high geometrical ratio of their increase
Que es la base de la doctrina sombría del clérigo Malthus. Resulta muy sorprendente, parece mentira o una extraordinaria coincidencia, que dos naturalistas aficionados, uno de ellos un aventurero y el otro un sportsman, trabajando a miles de kilómetros de distancia vengan a tomar súbitamente en cuenta para la interpretación de un problema fundamental, el origen de las especies, algo que no tiene absolutamente nada que ver con el tema, una teoría tan radicalmente ajena al universo de la Historia Natural y de vinculación tan antropomórfica y social.
Que ambos naturalistas aficionados fueron influidos por la misma lectura común es seguro.
Lo que no sabemos es si pudo haber alguien que les sugiriese a ambos tal lectura. Queda asimismo por considerar la posibilidad de que ambos fuesen influidos por alguien interesado en transportar esta doctrina social de la lucha por la supervivencia al terreno de las Ciencias de la Naturaleza. Eso bien podría ser.
Al menos, sabemos seguro que Huxley, Hooker y Lyell defendieron a ambos naturalistas, al aventurero y al aficionado y les ayudaron en sus publicaciones. Como quiera que sea, el aspecto social es siempre fundamental en relación con Darwin: sus escritos se inspiran en una teoría social, tienen una enorme influencia social y son parte de un gran proyecto de ingeniería social, algo no lejano a lo que otro Huxley, Aldous, describiría posteriormente en su obra Un Mundo Feliz, al parecer inspirado en parte por las actividades observadas en su hermano Julian, ambos nietos del mentor (o bulldog) de Darwin.
La doctrina de Malthus es una doctrina social, da una visión de la sociedad muy adecuada para el capitalismo de la sociedad industrial, y no tiene por qué aplicarse a los reinos animal y vegetal. El darwinismo social es un oxímoron. No hay darwinismo que no sea social. La frase siguiente es falsa y engañosa:
As many more individuals of each species are born than can possibly survive;
El autor está constantemente utilizando adverbios de posibilidad de manera que se hace imposible entender el significado de escritura tan ambigua. Es decir, que como en tantas otras ocasiones de esta celebrada obra, nos encontramos con una frase que es cierta y falsa a la vez, porque si bien es cierto que nacen algunos individuos más que los que sobreviven hasta el estado adulto, también es cierto que nacen exactamente los mismo que sobreviven, al menos hasta el momento de su defunción. El truco está en la palabra final: survive. Qué significa sobrevivir: ¿Vivir hasta el infinito? ¿Vivir hasta el momento de la defunción? ¿Vivir hasta cualquier momento sin importar cuál?. Tan confusa es la frase que una que significase exactamente lo contrario sería igualmente válida:
Exactly the number of individuals of each species are born than can survive;
Pero da igual. Porque que nazcan muchos o pocos individuos, que mueran jóvenes o viejos, no indica la existencia de lucha alguna en la naturaleza. Simplemente sobreviven algunos durante un tiempo superior a otros. La lucha, en sentido estricto, es otra cosa, por lo general observada en las sociedades humanas. Marx supo leer claramente el texto de Darwin, aunque su correcta interpretación la reserva para una carta privada a Engels:
…me divierto con Darwin, al que he echado una nueva ojeada, cuando afirma aplicar la teoría de Malthus también a las plantas y a los animales, como si el jugo del señor Malthus no estuviera precisamente en el hecho de que esa teoría no se aplica a las plantas y a los animales, sino -con geométrica progresión- sólo a los hombres, en contraste con las plantas y animales. Es notable el hecho de que en las bestias y en las plantas, Darwin reconoce a su sociedad inglesa, con su división del trabajo, la competición, la apertura de nuevos mercados, los inventos y la maltusiana lucha por la existencia. Es el bellum omnium contra omnes de Hobbes y hace pensar en la Fenomenología de Hegel cuando se configura la sociedad burguesa como “reino animal ideal”, mientras que en Darwin el reino animal se configura como sociedad burguesa..
Engels también interpretó correctamente a Darwin en su correspondencia privada:
Darwin no sabía que áspera sátira de la humanidad y especialmente de sus conciudadanos escribía al demostrar que la competencia libre, la lucha por la vida, celebrada por los economistas como la conquista más alta de la historia, es el estado moral del reino animal.
Y a Nietzsche también le hizo gracia el maltusianismo de Darwin:
Anti-Darwin. En lo que respecta a la famosa «lucha por la vida», me parece que de momento está más afirmada que demostrada. Se da, pero como excepción; el aspecto global de la vida no es el del estado de necesidad, el de la hambruna, sino más bien el de la riqueza, el de la exuberancia, incluso el del absurdo derroche: donde se lucha, se lucha por poder… no se debe confundir a Malthus con la naturaleza. Ahora bien, suponiendo que exista- y en verdad, se da- esa lucha transcurre, por desgracia, de modo inverso al deseado por la escuela de Darwin, al que quizá sería lícito desear con dicha escuela: a saber, en contra de los fuertes, de los privilegiados, de las excepciones felices. Las especies no crecen en perfección: Los débiles se enseñorean siempre de los fuertes, y esto es porque son el mayor número y también porque son más listos….Darwin se ha olvidado del espíritu (qué inglés es esto!), los débiles tienen más espíritu….. Hay que necesitar espíritu para obtener espíritu, y se pierde cuando ya no se necesita. Quien tiene la fuerza se desprende del espíritu…..
Bienvenidos al festival del charlatanismo en la ciencia. Pasen y vean, señoras y señores. El circo de los juegos de palabras, de las citas libres sin autor, de la ambigüedad y de la tautología. Prepárense para leer páginas y páginas llenas de ambigüedad y sin significado alguno.
La frase siguiente es tautológica:
it follows that any being, if it vary however slightly in any manner profitable to itself, under the complex and sometimes varying conditions of life, will have a better chance of surviving, and thus be NATURALLY SELECTED
Naturally selected es una contradictio in adiecto. Fantasma semántico. La naturaleza no selecciona. Pero supongamos que todo fuese correcto y que efectivamente cualquier ser con una ventaja tendría mejores posibilidades de sobrevivir. Entonces nada habría en ello que explicase la formación de una especie, puesto que el mecanismo sería el mismo para la supervivencia de un individuo en una riña callejera, en una condena a muerte, o después de un terremoto.
Este primer párrafo contiene una pregunta aristotélica:
How have all those exquisite adaptations of one part of the organisation to another part, and to the conditions of life and of one organic being to another being, been perfected?
¿Cómo habrían perfeccionado todas esas adaptaciones exquisitas de una parte de la organización a la otra parte, y con las condiciones de vida de un ser orgánico a otro?
Es decir,……… ¿cómo se habrían obtenido todas las adaptaciones observables?. Solución: Misterio de los misterios. Pregunta aristotélica, pero no por su elevado nivel intelectual, sino porque el propio Aristóteles y, seguramente varios cientos de personas antes que él y algunos miles después, se la habían planteado en términos semejantes: ¿Cómo y por qué el pájaro tiene plumas y el pez escamas?. Pregunta eternamente en vilo, en espera de una respuesta que el autor se dispone a dar gratuitamente:
it follows that any being, if it vary however slightly in any manner profitable to itself, under the complex and sometimes varying conditions of life, will have a better chance of surviving, and thus be NATURALLY SELECTED. From the strong principle of inheritance, any selected variety will tend to propagate its new and modified form.
se sigue que todo ser, si varía por muy poco de cualquier manera rentable a sí mismo, en las condiciones complejas y diversas veces de la vida, tendrá una mejor oportunidad de sobrevivir, y así naturalmente seleccionado. Desde el principio fuerte de la herencia, toda variedad seleccionada tenderá a propagar su forma nueva y modificada.
Es decir, que si un pájaro en vez de pluma comienza a tener un pluma más parecida a escama, entonces tendrá mejor ocasión de vivir en el agua y así sucesivamente……………El mecanismo será el mismo que si en un atraco callejero ante un ladrón armado con una navaja, nos encontramos armados con una pistola cargada: tendremos una mejor oportunidad de sobrevivir y así seremos seleccionados. Podremos tener hijos y así nuestra descendencia será mayor. La explicación es válida y es la misma para cualquier época y lugar: Los trilobites fueron seleccionados por la selección natural hasta el momento que dejaron de serlo. Quítese la palabra trilobites de la frase anterior, póngase cualquier otra y,…Milagro, la tautología funciona. El más apto siempre sobrevive, la luz ilumina y la rueda gira. Siempre. Pero no explican.
86. Again, it may be asked, how is it that varieties, which I have called incipient species, become ultimately converted into good and distinct species, which in most cases obviously differ from each other far more than do the varieties of the same species? How do those groups of species, which constitute what are called distinct genera and which differ from each other more than do the species of the same genus, arise? All these results, as we shall more fully see in the next chapter, follow from the struggle for life. Owing to this struggle, variations, however slight and from whatever cause proceeding, if they be in any degree profitable to the individuals of a species, in their infinitely complex relations to other organic beings and to their physical conditions of life, will tend to the preservation of such individuals, and will generally be inherited by the offspring. The offspring, also, will thus have a better chance of surviving, for, of the many individuals of any species which are periodically born, but a small number can survive. I have called this principle, by which each slight variation, if useful, is preserved, by the term natural selection, in order to mark its relation to man’s power of selection. But the expression often used by Mr. Herbert Spencer, of the Survival of the Fittest, is more accurate, and is sometimes equally convenient. We have seen that man by selection can certainly produce great results, and can adapt organic beings to his own uses, through the accumulation of slight but useful variations, given to him by the hand of Nature. But Natural Selection, we shall hereafter see, is a power incessantly ready for action, and is as immeasurably superior to man’s feeble efforts, as the works of Nature are to those of Art.
Además puede preguntarse cómo es que las variedades que hemos llamado especies incipientes quedan transformadas finalmente en buenas y distintas especies, que en la mayor parte de los casos difieren claramente entre sí mucho más que las variedades de la misma especie; cómo se originan estos grupos de especies, que constituyen lo que se llaman géneros distintos y que difieren entre sí más que las especies del mismo género. Todos estos resultados, como veremos más extensamente en el capitulo próximo, son consecuencia de la lucha por la vida. Debido a esta lucha, las variaciones, por ligeras que sean y cualquiera que sea la causa de que procedan, si son en algún grado provechosas a los individuos de una especie en sus relaciones infinitamente complejas con otros seres orgánicos y con sus condiciones físicas de vida, tenderán a la conservación de estos individuos y serán, en general, heredadas por la descendencia. La descendencia también tendrá así mayor probabilidad de sobrevivir; pues de los muchos individuos de una especie cualquiera que nacen periódicamente, sólo un pequeño número puede sobrevivir. Este principio, por el cual toda ligera variación, si es útil, se conserva, lo he denominado yo con el término de selección natural, a fin de señalar su relación con la facultad de selección del hombre; pero la expresión frecuentemente usada por míster Herbert Spencer de la supervivencia de los más adecuados es más exacta y es algunas veces igualmente conveniente. Hemos visto que el hombre puede, indudablemente, producir por selección grandes resultados y puede adaptar los seres orgánicos a sus usos particulares mediante la acumulación de variaciones, ligeras pero útiles, que le son dadas por la mano de la Naturaleza; pero la selección natural, como veremos más adelante, es una fuerza siempre dispuesta a la acción y tan inconmensurablemente superior a los débiles esfuerzos del hombre como las obras de la Naturaleza lo son a las del Arte.