«Es casi seguro que vamos hacia una era de dictaduras totalitarias -una época en que la libertad de pensamiento será en un principio un pecado mortal y más tarde una abstracción sin sentido.  El individuo autónomo va a ser borrado del mapa. Pero esto significa que la literatura, en la forma en que la conocemos, tiene que sufrir por lo menos una muerte temporal. La literatura del liberalismo está llegando a su fin y la literatura del totalitarismo aún no ha aparecido y es apenas imaginable. En cuanto al escritor, sentado en la punta de un iceberg, no es más que un anacronismo, un vestigio de la era burguesa, tan condenado al fracaso como el hipopótamo.»

Almost certainly we are moving into an age of totalitarian dictatorships — an age in which freedom of thought will be at first a deadly sin and later on a meaningless abstraction. The autonomous individual is going to be stamped out of existence. But this means that literature, in the form in which we know it, must suffer at least a temporary death. The literature of liberalism is coming to an end and the literature of totalitarianism has not yet appeared and is barely imaginable. As for the writer, he is sitting on a melting iceberg; he is merely an anachronism, a hangover from the bourgeois age, as surely doomed as the hippopotamus.

George Orwell. Inside the Whale. 1940

Imagen de aquí


«Función social del científico: ¿Qué es la ciencia?, un viejo artículo de Orwell»

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7 comentarios

  1. Sí Joaquín, profético punto por punto. La literatura del totalitarismo a que se refiere ya ha aparecido y se encuentra ahora en pleno apogeo…..

  2. No se preocupe hombre, que por muchas sandeces que diga usted en este blog (y hay para parar un tren) aqui tiene usted a un aliado para defender su libertad de expresion.
    Lo de hacerse la victima con estas indirectas no va con la ciencia.

  3. Corríjame por favor si no es usted Mario Ezquerra del Hospital Clínico de Barcelona y dígame entonces quién es usted.

    Me he cansado de aguantar insultos de anónimos.

  4. Llevo aproximadamente año y medio siguiendo su blog asiduamente y deseo felicitarle por la labor que realiza en aras de divulgar la Ciencia de la vida, así como en su afán de denunciar los espurios intereses que la cosifican en detrimento de su razón de ser. La Ciencia o está supeditada a su función social o en su defecto se convierte en una herramienta más de este Sistema depredador que sólo pretende maximizar beneficios, con lo cual la investigación ira encaminada en una sola dirección, engordar la cuenta de resultados.

    Por favor, Sr. Emilio Cervantes, no se desanime por los insultos que recibe porque su labor es seguida por muchos que, aún y a pesar de no ser biólogos entendemos la ideológica que anima a la mayoría de los neo-darwinistas, así como a estos predicadores de “genes egoístas”, de competencias sin cuartel, donde la dinámica evolutiva es presentada como una carrera de obstáculos, donde quién no corre más rápido es atrapado para solaz de los más aptos. Esto no es Ciencia, es neoliberalismo y además del más ramplón.

    ¿Esto es Ciencia?, esto es pura bazofia ideológica para legitimar la explotación y depredación de todo lo que cae entre sus garras, sin consideración hacía nada, ni tan siquiera hacía los de su propia especie y además pretendiéndola revestir de un halo científico como si fuera un hecho natural. Somos así… ¡qué se le va hacer! , habrá que resignarse. Este es el discurso que predican sin sonrojo.

    No soy biólogo, ni nada que se le asemeje, pero mi sentido común me dice que así no se puede seguir y no me vale que ciertos científicos aseguren que la Ciencia es ciega y que sólo muestra datos. La ciencia la crean los científicos y estos no vienen del cielo, tienen sus intereses, pagan sus hipotecas y tienen ideología, como la inmensa mayoría de los mortales. La Ciencia no es ciega, lo mismo que la Justicia tampoco lo es, así que, o cambiamos el paradigma entre todos o los “DATOS” acabaran con nosotros.

    Un abrazo solidario de este ingeniero preocupado desde muy joven por la deriva de los acontecimientos, en la que ciertos científicos sin escrúpulos están siendo corresponsables activos de todo este desatino que sólo nos lleva hacía la autodestrucción.

    Me despido con una reflexión de Ramón Eder, “Algunos científicos son tan distraídos que no recuerdan ni dónde han dejado la ética”.

    Saludos, Tontxu Sánchez.

  5. Gracias Tontxu,

    Comentarios como el suyo compensan la dura tarea y dan ánimos para seguir una temporada.

    Gracias Anónimo por su comentario y el enlace.

    Un saludo

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