El señorito ocioso: un caso de vocación malograda de sportsman y de cazador

  En su libro titulado El último cambio de siglo: gloria y crisis de Occidente 1870-1914 y publicado por la Editorial Ariel,  José Luis Comellas indica erróneamente que Darwin era médico.  Ni lo era ni tenía ninguna titulación académica en ámbito científico alguno.  Pero dejemos que sea el mismo Darwin quien corrija el error y aclare la situación, puesto que en su autobiografía (p 55) indica:     Cambridge, 1828-1831.- Tras haber pasado dos cursos en Edimburgo, mi padre se…