Diseño en el párrafo septingentésimo quincuagésimo quinto de El Origen de las Especies

Este autor increíblemente ambiguo viene ahora y dice: Pero no hay razón para que, por ejemplo, el ala de un murciélago o la aleta de una marsopa no tenga que haber sido diseñada, con todas sus partes, en sus debidas proporciones, desde que cada parte se hizo visible. Lo cual, en caso de tener algún significado, significa exactamente: Tanto el ala de un murciélago como la aleta de una marsopa han sido diseñadas. La selección natural  no existe    …