Un deplorable espectáculo (ofensa a la Selección Natural)
Mantener un blog puede requerir enormes dosis de paciencia. En particular cuando se muestran puntos de vista críticos con las versiones “oficiales” de la ciencia y se admite e intenta responder a todo tipo de comentarios, entre los cuales abundan los insultos.
Pero los insultos directos no son los que más daño hacen. Peor es quien entra en el debate con actitud en apariencia abierta y dialogante y, poco a poco, a lo largo de varios comentarios va mostrando otro aspecto, lleno de prepotencia y arrogancia. Introduciendo entre sus argumentos, de forma comedida al principio, y después taimada, insultos para los otros participantes que no opinan como él.
El debate de la entrada Confusión en la Evolución: ¿Qué es la Selección natural? ofrece un buen ejemplo de ello.
Un participante, que había empezado modestamente indicando por ejemplo en su primer comentario que no sabía si la SN es o no una tautología:
“No sé si eso es una tautología, pleonasmo o perogrullada, pero el caso es que es así y el que una explicación parezca muy simple no necesariamente quiere decir que sea errónea. Lo que queda por ver es hasta que punto eso permitirá o no explicar los cambios evolutivos a todas las escalas y la aparición de nuevas especies. Cualquier aportación o estudio sobre este punto es siempre bienvenida porque pocos dudan de que hay cosas que aún no sabemos y tampoco sería la primera vez que hay que cambiar de modelo explicativo (no hay ninguna tragedia en ello), pero tengamos primero claro qué es lo que realmente dice la Genética sobre este punto.”
En su segundo comentario indicaba acertadamente la dificultad del estudio de la evolución:
“En resumen, el estudio de la evolución es probablemente uno de los más difíciles en Biología por lo que no es extraño que haya cosas que no encajen (pocas cosas hay en ciencia que se puedan explicar sin que acabe asomando alguna dificultad), pero no estoy tan seguro de que sea (al menos en exclusiva) por un empeño en mantener premisas falsas sino por más bien por problemas experimentales. Si el modelo falla la historia nos enseña que siempre cae ante los hechos. La pregunta clave aquí es ¿hay realmente HECHOS claros que no se puedan explicar con el modelo? Hechos y no disquisiciones ideológicas (por otro lada perfectamente legítimas y respetables) es lo que se necesita.”
Y en el tercero, aunque ya empezaba a tomar el tono de una clase magistral, todavía reconocía que la SN puede que no explique nada:
“Se decía en el anterior comentario que la SN jamás ha explicado nada. Quizás, pero de lo que sí que podemos estar seguros es de que lo que de verdad no explica absolutamente nada es un modelo que ni siquiera se plantea.”
El cuarto comentario venía a mostrar el punto de inflexión, el giro hacia una postura arrogante y de insulto:
“Más claro imposible y, por supuesto, cada uno es libre en su casa, o en su blog, de afirmar lo que le parezca más apropiado, incluso de acabar un debate con un comentario en la línea del “esto es así porque lo digo yo, y basta”.
Por cierto, ¿hay aquí alguna diferencia con la manera dogmática de actuar que tanto se proclama que se da en el “bando” de la “ciencia oficial”?
Algunos pensamos que puede haber cosas que el modelo neodarwinista no explique satisfactoriamente, que quizás la aparición de especies o taxones de orden superior requiera de algún otro mecanismo aún no aclarado pero, francamente, me parece bastante claro que no será a través de actitudes del tipo “heterodoxo profesional” como se llegará a algo en esta línea, si es que realmente hay algo a lo que llegar.”
En ningún momento he acabado yo ningún debate en ese tono que el comentario me atribuye (“esto es así porque lo digo yo, y basta”), pero es que además hay un enorme contrasentido en calificar de “dogmática” a una postura por ser crítica con un dogma.
Aquí es cuando empezaban de manera más o menos camuflada los insultos (heterodoxo profesional) que en comentarios siguientes se irían multiplicando:
Así en el sexto comentario se nos acusa de perdernos en disquisiciones:
“Espero que esto sirva de estímulo a todos los que puedan leer este blog para ir a los libros de Genética a aclararse, mucho mejor que con lo que yo he escrito aquí, acerca del tema y a profundizar más en él, en vez de andarse perdiendo en disquisiciones sobre teoremas, teorías, hipótesis, tautologías, lo que Darwin y otros eran o no eran y otras cosas por el estilo que reconozco quedan bien en una charla de bar ante unas tapas y unas cañas, pero que no acaban de contribuir mucho al avance de la ciencia.
En el séptimo de no saber de qué hablamos:
“me gustaría hacer algunos comentarios sobre el conocido como principio o ley de Hardy-Weinberg porque me parece que se basan en un conocimiento parcial o incompleto del tema. Como en alguna otra ocasión he hecho, empiezo por recomendar a todo el que se pueda acercar por este blog que antes de dejarse llevar por lo que en él encuentre, lea el capítulo correspondiente de algún buen libro de texto general de Genética para obtener una visión más completa del tema y después saque sus propias conclusiones.”
Y de dogmático:
“La última respuesta de E. Cervantes a los comentarios de Mig es muy reveladora de cómo el “dogmatismo”, el creer que los que opinan de un modo diferente al propio en realidad es que no saben pensar, se da en muchas partes, y no sólo en esa “ciencia oficial” que no hace más que decirse que trata de ocultar lo que la contradice. Que los que han leido el último comentario de E. Cervantes piensen y saquen sus propias conclusiones.”
Pero repito: No es dogmatismo criticar al dogma.
En el octavo se nos acusa de “peligrosidad”:
«Desdichadamente, veo que hay bastante gente que con el mismo desconocimiento que yo, o incluso, por lo que parece, con algo más (si es que es posible tal cosa) se siente capacitado para proclamar enfáticamente que la SN no sólo es falsa o un absurdo sino peligrosa para la Biología. Más bien me parece que los peligros andan por su lado.»
En el noveno de perniciosidad:
“Lo pernicioso es buscar la heterodoxia por la heterodoxia, inventar supuestas conspiraciones o proclamar que se tiene la verdad y que el que no la sigue es porque o no piensa o está vendido a alguna maléfica mafia científica o eugenésica.”
El décimo comentario de este participante colma el vaso de mi paciencia:
“En respuesta a las cuestiones sobre la relación entre genes y caracteres me gustaría hacer algunas aportaciones ya que, por lo que he leído en los últimos comentarios, en este blog no parece que intervengan muchos biólogos o personas que hayan estudiado Genética a nivel universitario. No es que yo pretenda saberlo todo, pero esta situación me recuerda a esa que se describe diciendo que en el país de los ciegos el tuerto es el rey.”
Y el número once continúa en esta tónica:
«Mis críticas van dirigidas fundamentalmente al responsable de este blog que, en vez de aprovechar sus conocimientos de Biología (que aún me resisto a creer que sean tan escasos en Genética) para conseguir que otras personas obtengan la suficiente información como para razonar por si mismos con ALGUNA BASE, alienta todo aquello que huela a heterodoxia, por falto de fundamento que esté. Los científicos, y más si ocupan algún puesto oficial pagado con el dinero de todos los españoles, tienen ciertas responsabilidades sociales, entre ellas la de hacer accesible el conocimiento al mayor número posible de personas y de una forma fiable. Está muy bien, y es absolutamente necesario, hacer saber que hay dudas y que no se sabe todo, pero no lo está tergiversar y lanzar medias verdades, como en más ocasiones de lo debido se hace aquí.»
Como digo he recibido muchos insultos directos en este blog. La mayoría los he borrado, pero nunca esperaba yo que el preguntarme ¿Qué es la Selección Natural? fuese a tener todas estas consecuencias.