Una de las claves de la ciencia consiste en ver las cosas de manera diferente a la habitual, es decir, la originalidad. Aunque la originalidad surge a veces de modo espontáneo, también puede ayudar a ser original entender el modo habitual de ver las cosas.

Por lo general tendemos a ver las cosas como si ocurriesen siempre por primera y última vez, pero éste no es el único modo y puede que no sea tampoco el más acertado. Todo depende de cómo se mire. En cualquier caso, en la Naturaleza, las cosas no pasan de una vez por todas, sino que, por el contrario, todo tiene lugar en ciclos.

Una semilla germina. Esto ha ocurrido millones de veces y, por lo tanto, cada vez que sucede no se trata de un hecho independiente sino más bien de algo que se repite, una parte de un ciclo. La semilla germina para dar lugar a una planta que producirá semillas que volverán a germinar. Al germinar, la semilla repite exactamente lo que hicieran otras semillas muchos miles de veces.

La germinación de las semillas es un proceso dentro del ciclo vital de las plantas. La figura 1 representa semillas de Arabidopsis thaliana, la planta modelo:

semillas1

Figura 1: Semillas de Arabidopsis thaliana, la planta modelo. Izquierda, la semilla seca; derecha, una vez germinada.

Los ciclos vitales en plantas

Figura 2: Ciclo vital de A. thaliana

La figura 2 representa el ciclo vital de Arabidopsis thaliana, la planta modelo. La flor (arriba) es el órgano reproductivo que contiene tanto los estambres (aparato reproductor masculino) como el pistilo (aparato reproductor femenino). El grano de polen (derecha) se une al óvulo en el ovario. De la fecundación resulta la semilla (abajo), cuya germinación dará lugar a una nueva planta.

Otras plantas presentan ciclos vitales similares al ciclo vital de la planta modelo, así por ejemplo, en la figura 3 podemos ver el ciclo vital de una leguminosa:

cicloleg

Figura 3: Ciclo vital de una leguminosa ideal

La familia de las leguminosas (judias, lentejas, habas, guisantes, garbanzos,….) se llama también Papilionaceae por el aspecto de mariposa de sus flores (Papilio en latín es mariposa). Pero como puede verse en la figura 4, no sólo la flor se parece a una mariposa, sino que también otras estructuras de la planta se parecen a las formas que toma el insecto durante su desarrollo: la larva se asemeja a la raíz y la pupa a la semilla (ambas, pupa y semilla son formas de resistencia).

ciclomariposa

Figura 4: Ciclo vital de una mariposa.

La forma de las semillas

La semilla de Arabidopsis thaliana recuerda a una figura geométrica que tiene que ver con los ciclos o giros.

La semilla de la planta modelo se parece a una cardioide que es la curva que se genera al rodar una circunferencia sobre otra fija del mismo diámetro (figura 5).

cardioide

Figura 5: Generación de la curva cardioide. Tomado de Wolfram MathWorld

La sencillez de la forma de la semilla de Arabidopsis thaliana se asocia con la complejidad de sus procesos de regulación.

figure1

Figura 6: Ajuste de la forma de la semilla de Arabidopsis thaliana a una cardioide. a, imagen de la semilla; b, ajuste con un elipsoide; c, ajuste con una cardioide; ajuste con una cardioide modificada por el factor Phi (Phi es la proporción áurea) en el eje horizontal.

Semillas de otras especies tienen formas diferentes. Interesa conocer la relación existente entre la morfología de las semillas y su capacidad para germinar bajo distintas condiciones ambientales.

Bibliografía

Cervantes E. 2008. Challenging Arabidopsis thaliana as the Ultimate Model Species: Can Seed Germination be the Achiles’ Heel? The European Journal of Plant Science and Biotechnology 2 (1), 106-109.

Cervantes E and de Diego J G. 2010. Morphological Description of Plants: New Perspectives in Development and Evolution. International Journal of Plant Developmental Biology 4(1), 68-71.

Cervantes E, Martín JJ, Ardanuy R, de Diego JG,  Tocino A. 2010. Modeling the Arabidopsis seed shape by a cardioid: efficacy of the adjustment with a scale change with factor equal to the Golden Ratio and analysis of seed shape in ethylene mutants. Journal of Plant Physiology. 167, 408-410. doi:10.1016/j.jplph.2009.09.013

Eliade, M.  1949. El Mito del Eterno Retorno.

 

Lectura aconsejada:

 

 Manual para detectar la impostura científica: Examen del libro de Darwin por Flourens. Digital CSIC, 2013. 225 páginas.

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26 comentarios

  1. Hola:
    Te quería preguntar si esto de relacionar las matemáticas con las formas (las óptimas dado un ambiente X) de los seres vivos tiene que ver con D’Arcy Thompson.

    Yo, antes de conocer que exista esa doctrina totalmente marginada por los de la religión neo-darwinista ampliada, había observado que la mayoría de las aves planeadoras (mejor debería decir que todas), nacionales como las que observo en selvas tropicales, tienen una forma de ala elíptica transformada que coincide con la superficie de más rendimiento. Todo ello demostrado matemáticamente por ingenieros aeronauticos recurriendo a series de Fourier.

    Así pues que la SN, entre sus múltiples cometidos (contradictorios) debe tener el de manejar ecuaciones diferenciales, series de fourier, trigonometría, etc. al azar.
    Qué raro que no hayan salido los de la doctrina de «creo en la SN…. porque es absurdo» a cantarte las cuarenta por esta entrada que «apesta» a diseño inteligente. Quizas es que ya te han excomulgado de su fe, y te dan por imposible.

    Dime donde encontrar documentos en la red en que profundizar la idea de esta entrada.

    Gracias

  2. Te quería preguntar si esto de relacionar las matemáticas con las formas (las óptimas dado un ambiente X) de los seres vivos tiene que ver con D’Arcy Thompson»

    En efecto, On growth and form, 1942

    «Yo, antes de conocer que exista esa doctrina totalmente marginada por los de la religión neo-darwinista ampliada»

    La Ignorancia en su estado mas puro, asi con mayusculas. Los darwinistas en contra de las matematicas, como si D’Arcy o Gould no fueran darwinistas.
    Se puede leer un resumen en el «El pulgar del Panda»

    «Así pues que la SN, entre sus múltiples cometidos (contradictorios) debe tener el de manejar ecuaciones diferenciales, series de fourier, trigonometría, etc. al azar.»

    La circunferencia es la forma en que se maximiza el area con respecto al perimetro, y esta forma puede ser (o no)favorecida por la SN. PERO ESTO NO SIGNIFICA QUE SEA NECESARIO PARA EL BICHO CONOCER EL NUMERO PI

    Pero hay que reconocer que Juan ara es mas valiente que usted Emilio, él si que habla del DI abiertamente.

  3. Hola Juan,

    Gracias por el comentario. Efectivamente, el libro de d’Arcy Thompson titulado On Growth and Form es muy citado por ser de los pocos (casi el único) en el que se encuentran aproximaciones matemáticas variadas al estudio de las formas a lo largo del siglo XX.

    Acierta plenamente al indicar que el estudio de la forma ha sido marginado. La Biología se ha concentrado por lo general en la función. La idea de competición, base de la biología moderna, se asocia con función (las formas no compiten sino que implican una apacible estabilidad).

    Así, a su majestad la selección natural, la forma parece no importarle demasiado, se explica todo en un tris-tras diciendo que los organismos tienen siempre las formas más adaptadas como consecuencia de…., bueno por no decir de la propia adaptación, se recurre a la selección natural, pero como siempre la mayor queda sin explicar. En tal visión la forma viene a ser simple vehículo para transporte de genes egoistas o sub-producto del DNA chatarra.

    Todavía no han saltado esta vez los pepitogrillos del darwinismo seguramente porque no han entendido la entrada.
    Si uno no se refiere directamente a uno de sus principios fundamentales, concretamente a la selección natural, piensan que la cosa no va con ellos.

    Para profundizar en la idea de esta entrada, es decir en general los ciclos y en particular la relación entre los ciclos y las formas, sospecho que no hay que buscar en la red sino pensar, contemplar la naturaleza, que es madre y no madrastra, mucho menos granja o laboratorio y, si acaso, leer algún libro viejo,anterior a la invasión darwinista.

    Empezando por el final que es más sencillo, el libro «El Mito del Eterno Retorno», aunque no está citado en el texto directamente, sí que se encuentra en la bibliografía y leerlo ayuda a pensar en un modo ancestral de contemplar a la naturaleza como un conjunto de ciclos y epiciclos. Elíade desarrolla esta visión desde los puntos de vista de las sociedades tradicionales, pre-competitivas y anteriores a esta vorágine aventurera cuyo vacío existencial se manifiesta ejemplarmente en la filosofía (o mejor anti-filosofía) darwinista.

    Si lo desea puedo enviarle a su e-mail PDF del artículo en que se describe la forma de las semillas de Arabidopsis o cualquier otro de los indicados.

    Encuentro muy curioso que en la descripción de la forma de las semillas de Arabidopsis, la planta modelo, coincidan dos elementos relacionados con los ciclos: La curva cardioide y el número Phi (la proporción áurea).

    Sobre la proporción áurea le aconsejo vivamente este sitio:

    http://www.goldenmuseum.com/index_engl.html

    Reciba un cordial saludo,

  4. por ser de los pocos (casi el único) en el que se encuentran aproximaciones matemáticas variadas al estudio de las formas a lo largo del siglo XX.

    En efecto, no se ha publicado nada al respecto, es que los darvinistas lo intentan ocultar:
    The biologic significance of the divine proportion and Fibonacci series
    RM Ricketts – American Journal of Orthodontics, 1982 – Elsevier
    … IMPLICATIONS OF THE LOGARITHMIC SPIRAL AND THE GOLDEN SECTION arithmic spiral
    is found in the simplest of primitive life forms, the snails … clover, the five petaled daisies, and so
    many flowers with eight or thirteen petals illustrating the interesting Fibonacci num bers …
    Cited by 137 – Related articles – All 4 versions
    Cumulative Diminuations with Fibonacci Approach, Golden Section and Physics
    F Büyükkılıç… – International Journal of Theoretical Physics, 2008 – Springer
    … Thus, the reality why nature prefers power laws rather than exponentials ones is explained. It
    has been introduced that, Fibonacci p-numbers are elements of a Generalized Cantor set. … 1
    Introduction In the formation of self-similar life forms nature prefers certain sections. …
    Cited by 3 – Related articles – All 3 versions

    Desiring structures: exhibiting the dendritic form
    [PDF] from ox.ac.ukM Kwint – Interdisciplinary Science Reviews, 2005 – ingentaconnect.com
    … 8), an elegant disc of rhythmically branching shapes based upon the Fibonacci series. …
    10) was a green pool of artificial life-forms which responded to the visitors’ presence
    and evolved their own sounds during the course of the exhibition. …
    Cited by 1 – Related articles – BL Direct – All 5 versions

    An adaptive history network method to improve the genetic optimization of pattern recognition systems
    K Dequan, RJ Oentaryo… – Fuzzy Systems, 2009. …, 2009 – ieeexplore.ieee.org
    … as the k-nearest neighbors (k-NN) [29] or Naive Bayes classifiers [30] (which have only 1), golden
    search (Fibonacci search) [31 … Evolutionary computation is the general term for several algorithmic
    methods which are based on the evolution of biological life forms in nature [23 …

    [PDF] Light heterogeneity and plants: from ecophysiology to species coexistence and biodiversity
    [PDF] from valladares.infoF Valladares – Progress in Botany, 2003 – valladares.info
    … In fact, certain plant life forms have been shown to be more effective than others in screening
    out UV-B radiation (Day et al. … For that reason, phyllotaxis (the geometry of leaf arrangement on
    stems) and the mathematically intriguing properties of the Fibonacci series in divergence …
    ETC, ETC, ETC

    “..que los organismos tienen siempre las formas más adaptadas como consecuencia de…., bueno por no decir de la propia adaptación, se recurre a la selección natural, pero como siempre la mayor queda sin explicar. “

    Vaya, porque se para? Estoy esperando que me de su explicación al respecto ¿Por qué los organismos tienen esas formas y no otras? Explíquelo despacio. Y mencione su DI ya de paso.

    Le dejo con su confusion de ciencia y filosofia

  5. Vaya Sr Cervantes, resulta que hay infinitos estudios que demuestran que también el ensayo y error en mutaciones aleatorias de bichos que no han fosilizado, demuestran la máxima de esa religión de la SN «credo quia absurdum». El nº pi, la serie de fibonaci, el número aureo, las series de Fourier, integrales trigonométricas, todo, absolutamente todo (lo que sea, lo contrario, o nada de lo anterior, da la razón a su maestra la SN+azar) viene a confirmar que las mátemáticas sin matemático confirman a Darwin y sus huestes de seguidores. Esto me recuerda a algo que dijo una vez A.N.Whitehead, que sabía algo de matemática: «el que haya tantos cuyo finalidad en la vida es rechazar la finalidad merece un detenido estudio» (o algo parecido).
    Es lógico, Sr.Cervantes, que quienes no encuentran obstáculo alguno para sus elucubraciones en la TGH, ausencia de eslabones intermedios, explosión cámbrica, intrones y exones, epigenética, etc. se apoyen también en D´Arcy, el evolucionista. Alguien debe decirle al emperador que está desnudo, o aun peor, que está desnudo y vestido al mismo tiempo. Aunque se lo toman por un cumplido: cuanto más absurdo mejor. Tómese por ejemplo al emperador Dawkins quien anda asegurando que el origen de la vida se debe a diseñadores inteligentes, los extraterrestres (ahora sabemos que conocían matemáticas). O al barbudo Dennett diciendo que la materia se creó a sí misma.

    Pasando a una atmósfera de inteligencia. Libros de M.Eliade ya leía yo hace décadas pero no me acuerdo que hablara de lo que me está diciendo. Lo repasaré. Preciosa la página sobre la belleza en los diseños naturales sin diseñador (también fruto de la SN según los darwinistas).

    Mándeme el artículo de las semillas, si tiene un minuto de su precioso tiempo. Aunque a mi me interesaría más algo sobre la correlación entre la aerodinámica optima de las alas y las matemáticas.

    Un saludo

  6. Pues claro señor Ara, todo lo que existe debe su existencia al hecho de haber sido exquisitamente seleccionado por la Selección Natural.

    Esto, que como digo es hecho indiscutible, es también un proceso, un mecanismo, una verdad, la verdad absoluta, Esto es, digo, la fuerza motriz y voluntad del mundo: La supervivencia del más apto.

    El problema es que no cuela como teoría científica.

  7. Comprendido por n-ésima vez. La SN es cualquier cosa, excepto lo que tenía que ser. Entonces pues, algo que no se debería enseñar en clase de ciencia, sí en la de historia de las religiones.

    He leído su artículo y no se si he sacado acertadamente la conclusión de que hay revistas de ciencia que no tienen censura previa. Eso mismo en «Nature» no hubiera colado a no ser que declarara que la SN ha acertado con meter al nª aúreo al azar por hacer más aptas a las semillas para sobrevivir.
    Otra cosa que no se si he entendido bien es que en Salamanca hay científicos que le han ayudado a conjuntar orden matemático (o sea inteligencia) y biología. ¿Le hubiera ayudado ese Mario o Zamora Bonilla?.

    Gracias por hacerme llegar ese artículo en donde no he detectado ninguna contradicción de las que acostumbro a oir en los darwinistas.

  8. Exacto Juan, la Selección Natural es todo lo que crea conveniente la autoridad competente. Así el darwinismo cumple su finalidad de poner a la ciencia en manos del poder.

    Ha entendido usted el artículo. Habría sido imposible sin la generosidad de colegas matemáticos.

    Con el señor Ezquerra mantengo una discusión inacabable. Ahora estamos aquí:

    http://www.madrimasd.org/blogs/biologia_pensamiento/2010/11/18/132210#comment-3320

    Muchas gracias y un cordial saludo

  9. Ya estoy al tanto de su pelea y le voy a decir una cosa.
    ¿Cuánto tiempo es prudente dedicar a tratar de abrir los ojos a un cuentacuentos darwinista ? ¿ Y a un contacuentos de las maneras del Sr.Ezquerra ?. ¿O es que la audiencia aumenta si se asemeja esto a un blog-basura?. Lo mejor sería que no quitara de su tiempo en estudiar las formas de semillas por ejemplo, para responder a magufos de estos que creen que un hada puede convertir una rana en la princesa Leticia de Borbón (si la varita tiene el sello SN, y se le da suficiente tiempo).

    Para que no se piense que Vd. es el único al que le ha caido esta cruz le diré que yo tengo un conocido doctor (dentista), que me hace pasar vergüenza. Hace un tiempo en un lugar público levantó la voz para decir que ojalá hubiera él estado en el tiempo de Hitler para ayudarle a eliminar los judíos. La semana pasada, en su consultorio (ante testigos que luego me dieron la razón) me espetó una objección a una idea mía, sin darse cuenta que no sólo no era una objección, sino que era uno de los numerosos apoyos que me respaldan. Y es que si un dentista se pone a hablar de lo que no ha estudiado, se pone en la situación del emperador chino del cuento.

    Ahorre su valioso tiempo para contestar sólo a gente con ganas de cuestionarse a sí mismo, y de buena voluntad.
    Gracias por su artículo y por lo mucho que estoy aprendiendo de usted.
    Saludos cordiales.

  10. Casi todo en el Universo apunta al DI –sobre todo el ajuste de las constantes de la física-pero es imposible probarlo. Se trata de algo así como un problema “indecidible” en el sentido de Gödel. Con la SN sucede algo parecido. Todo ello no supondría ningún problema -en física hay quien cuestiona, en revistas de primer nivel, la constancia de la velocidad de la luz o el fundamento de la gravedad sin por ello ser represaliado profesionalmente o desprestigiado por la vía del boicot científico- si el paradigma dominante –es decir, el neodarwinismo académico e institucional- no infligiera un increíble control represor contra los disidentes, y ello a todos los niveles.
    Lo de las matemáticas y orden creo que está mal expresado. Primero existe el orden, o el desorden, y las matemáticas intentan explicarlo. No es la Naturaleza la que tiene que saber resolver la ecuación de Navier–Stokes sino esta la que intenta explicar parte del comportamiento de la Naturaleza.
    En cualquier caso, el diseño óptimo del ala de los pájaros no es nada comparado con el “diseño” de huesos de débil densidad, en las aves, bajo restricción de las leyes de la termodinámica. Es decir, no sólo la forma del ala debe ser óptima sino en conformidad con el peso del organismo y el consumo de energía en vuelo. Y de las leyes de la cristalografía ¿qué decir?
    Además, la optimalidad en la Naturaleza es relativa, y un asunto complicadísimo. En alguna ocasión ya lo hablé con Emilio. Verbigracia, Jean-Paul Delahaye y Eric Rivals han probado que la compresión del genoma no es óptima …simplemente porque han logrado una compresión informática mejor (Delahaye, “Complexité aléatoire et complexité organisée”, página 66-67)

  11. Pregunta al Sr. Calaza:

    Por mi afición al vuelo sin motor y a la construcción de planeadores me había dado cuenta hace años de la forma óptima de las alas de las aves y de la estructura de los huesos (relación peso/resistencia óptima). Pero parece que usted sabe en qué texto se trata del asunto con más penetración que la de este aficionadillo.
    ¿Me podría decir dónde yo podría ampliar mis conocimientos?
    Gracias

  12. No domino la bibliografía que pueda responder a la pregunta del Sr. Ara pero es fácil entender que la forma óptima del ala o alas de las aves es un problema muy complejo que no depende sólo del coeficiente de penetración o de la estabilidad del objeto como podría ser en el caso de una flecha o el espolón sumergido de un barco fenicio o un ala delta o un planeador sin motor.
    Intuitivamente, el hombre ha sabido que la punta de la flecha debía tener una forma parecida al ala de un ave y que el espolón bajo el agua hacía ganar velocidad al barco. Pero la optimización del ala de los pájaros es mucho más complicado pues es un elemento de un modelo muy complejo. En primer lugar, los seres vivos tienden a consumir la menor cantidad de energía posible. Para hacer despegar un caballo volador –de un peso más o menos igual al de un pura sangre actual- la energía que debería consumir el animal sería enorme; se necesitarían además unas alas de descomunal envergadura, dotadas de una musculatura capaz de ponerlas en movimiento y sostenidas por un sistema óseo muy resistente. Pero, al mismo tiempo, esos huesos no deberían ser muy pesados para que el “modelo” no consuma demasiada energía. Quiero decir, lo del ala delta o lo del planeador resulta relativamente fácil de optimizar: no necesita despegar (llega el impulso del cuerpo humano desde cierta altura o el de un vector impulsor) ni consumir energía en vuelo sino simplemente planear. De hecho, es posible que un ala delta circular funcionara mejor que las actuales habida cuenta que la estabilidad es lo importante en relación con la función.

  13. Advertencia a darwinistas: el autor de este comentario no se hace responsable del probable ataque de risa que causará a quienes mantienen que “casi que todo en el cuerpo humano está mal diseñado”
    Estimado CALAZA:
    Gracias por responderme y felicidades por el artículo de DI que sacaste en el faro de Vigo dado a conocer por E.Cervantes en este blog (y otro sobre el darwin de la física, Einstein).
    Pues tienes buena intuición, pero lo que yo quisiera encontrar es alguien del DI sacándole el jugo a la aerodinámica. Antes que existiera este movimiento yo ya daba por hecho que los pájaros e insectos están diseñados de forma cuasi-óptima. Cualquier bicho con los que planeo me dejan a la altura del betún y aun más me dejan con la boca abierta las moscas que se me posan en la sopa, y cuanto más pequeñas, más.
    Ocurre que las alas de los planeadores se diseñan con miras a aproximarse lo más posible a la forma de mayor rendimiento teórica (un 100% es algo inviable por la dificultad de construcción o anti económico): elíptica transformada (el círculo es una elipse especial que no volaría bien) con el semieje mayor no en el centro sino al 25% del semieje menor, o sea una elipse deformada, con los extremos adelantados en el sentido del vuelo. Por series de Fourier se demuestra que cualquier otra proporción da menor rendimiento. Además de rendimiento óptimo, dada una envergadura adecuada a la actividad del ave (no es lo mismo un buitre que un martín pescador) o del ingenio aéreo, ocurre que la forma elipsoide esa le confiere un máximo de seguridad (evitar los desplomes cerca del suelo si se está corto de velocidad) en relación al peso de la estructura. Bueno, a las aves esto les da igual pues modifican la forma a voluntad, pero para un planeador le viene muy bien.
    El ave que planea mejor es el albatros y lo consigue con una elipse muy estirada, por 1 km de descenso vertical recorre 60 Km. Hay planeadores que lo igualan pero tienen, no 4 m. de envergadura sino >=25 m. Pero si hacemos un aeromodelo igual pero del tamaño del albatros no llega ni de lejos a su efectividad, aunque lo forremos de plumas del bicho. Cuanto menores son las dimensiones más viscoso resulta el aire, y hay que hacer perfiles más delgaditos y con menos curva, para paliar algo ese efecto. El extremo está en los colibríes que tienen que batir las alas muy rápido, y luego pasamos a los insectos que las tienen sin curvatura y delgadísimas, hay una mosquita de 1 mm. de envergadura que tiene que trabajar duro para sustentarse. Antes de haber ingeniería aeronautica ya la SN había dado con los diseños optimos, sus motores y combustibles.
    Por otro lado los buitres, cóndores, etc, tienen otra mejora óptima adicional a la forma elipsoidal (véase una foto de buitre para ver las plumas de la punta hacia arriba y separadas como una mano), que hace poco han copiado de forma burda los planeadores y los jets para ahorrar combustible. Se llama winglets. Logran aminorar el torbellino de punta de ala originado por la diferencia de presión entre la parte de arriba (mayor) y la de abajo (menor). Para cualquier otra velocidad a la de trabajo, aves y aviones encuentran una rémora en los winglets, en lugar de ayuda. La SN también acertó con esta sofisticación como era de esperar de esta ideología que descubrió que los más aptos son los que sobreviven. Aparte está que la textura rugosa de las plumas hace que la capa límite del aire que circunda las alas sea domésticada a fin de que no se produzca la separación del flujo tras el punto de mínima presión. Una superficie lisa como un cristal sería menos efectiva ( por eso los tiburones tienen la piel como una lija, pero, ojo, un poco más o menos, los condenaría a la extinción). Los buhos tienen modificadas las plumas del borde de ataque a fin de no hacer ruido, pero claro, son así menos eficientes para el planeo.

    Un ala delta no está diseñada para planeo óptimo pero sí por ligereza. Si no tuviese esa forma (lo mismo que un jet), cualquier mínima turbulencia retorcería las alas por divergencia aerodinámica (por eso los jets tienen esa forma en delta). Los vencejos por ejemplo, (diseñados sin diseñador según los que nos llaman ID´iots), cuando hacen giros acrobáticos para llevarse algo a la boca, adoptan la forma de hoz, o sea en delta. Hasta que la SN acertó con la mutación adecuada, los vencejos debían comer otra cosa que estuviera quieta, si no se les hubieran quebrado los huesos al resistir aceleraciones equivalentes a las que soportan los pilotos de caza (con trajes anti-G). Huelga decir que si estos frutos del azar no supiesen poner las plumas en la disposición elipsoide para aterrizar, se pegarían un morrazo (o picazo) al llegar a la pared del nido a toda pastilla.
    Luego viene el problema que los planeadores resolvemos con un agente externo que nos remolca (avioneta, torno, automóvil, carrera cuesta abajo): el del motor. Unas alas articuladas batiéndose con los músculos adecuados, necesitada de una respiración especial, es algo que sobrepasa en complejidad a las turbinas rolls-royce del Airbus A-380 que se daño hace poco. Esos motores me parece que giran a 60.000 rpm, pero hay diseños sin diseñador que baten las alas a más rpm: una mosquita centroamericana de 1 mm. de envergadura, Dicopomorpha echmepterygis. Y si queremos mejor un motor rotatorio “natural” que vaya más rápido que una turbina, no nos olvidemos del flagelo bacteriano que dicen alcanza las 100.000 rpm, y en ¼ de vuelta se detiene, e invierte el sentido de giro (eso según dicen los creacionistas, que no se si lo habrán leído en la Biblia también o se lo han inventado).

  14. Continuación del anterior

    Y encima hay gentes como yo que encuentran las coloraciones de los plumajes y su aparatosidad (pavo real macho, por ej.) innecesariamente bellas, o sea poco aptas para sobrevivir. Cualquier día me entero que el NUMERO AUREO también se aplica a las proporciones óptimas de aves e insectos voladores.
    Con esta entrada de E.Cervantes sobre semillas de forma óptima y bella, basada en un artículo que no fue censurado en una revista científica, no me avergüenza decir que yo soy un ID´iot aerodinámico.
    Otra cosa. Hablas de un caballo con alas o pegaso. También caen en esa idea los elefantes con orejas volantes o Dumbos. Pues bien estos seres tan pesados para lo que es la superficie de las alas existen (y millones de años según el calendario de los anti-ID, antes de que hubiera aves). Son los insectos voladores tipo abejorro. Hasta 1999 no se sabía qué remolinos formaban sus alas moviéndose en ochos a velocidad de vértigo capaz de sustentarlos (más rpm. cuanto más pequeños), pues las supercomputadoras no pueden simularlo todo con las complicadas ecuaciones diferenciales de fluidos. Se tuvo que hacer una mosca robótica de alas gigantes que agitaba aceite en una especie de pecera, para hacerse a la idea de lo que la SN había logrado a golpe de ensayo y error.

    Final:
    Navegando en el mar he visto miles de peces voladores que saltaban cuando les parecía que la quilla se los quería merendar. Las aletas/alas tenían la forma óptima elipsoidal. Dado el tiempo suficiente la SN podría evolucionar los músculos de estos bichos (eso sí, dada la consabida presión selectiva mágica, y gracias a la ley de H-W) que podrían pasar sobre las cabezas de nuestros descendientes post-humanos en busca de aguas con más alimento y menos depredadores.

    Saludos a los que hayan llegado hasta aquí

  15. La selección natural es un concepto abstracto que el propio Darwin lo definió como metafórico y, si los neodarwinistas quieren transformar la metáfora en mecanismo evolutivo será responsabilidad de estos el explicar cómo funciona el citado mecanismo. Un mecanismo no es un proceso, aunque en todo proceso pueden y, de hecho coexisten o pueden coexistir diversos mecanismos.

    Es evidente que la “metáfora” de Darwin no sirve para nada, ya que para ello tienen que existir los organismos a transformar, por tanto, la “metáfora” darwiniana no es comparable a la fuerza gravitatoria (magnitud física), puesto que ésta magnitud está presente, es conocida y universal. Sin la gravedad no habría contradicción (movimiento) y por tanto, la vida no existiría. Por tanto, la gravedad es una unidad dialéctica que no es comparable al metafórico concepto de la SN.

    Parece ser que, hay un hilo conductor semántico que los neodarwinistas pretenden soslayar. Toda selección requiere de un “seleccionador”, esto es evidente, incluso para el propio Darwin, ya que el citado concepto fue extrapolado de la selección “artificial” (cría selectiva de animales) para construir mediante analogía lo que él denominaría “teoría de la evolución por selección natural”. Darwin dice al respecto; «De hecho, criadores eminentes, por medio de una selección metódica, con vistas a un fin bien determinado, tratan de obtener un nuevo linaje o subraza superiores a todas las de su clase en su país. Mas para nuestro propósito es más importante una forma de selección, que puede llamarse inconsciente, y que resulta de que cada uno procura poseer y sacar cría de los mejores ejemplares». En consecuencia, Darwin “crea” la metáfora de Selección inconsciente (natural).

    Incluso el propio Engels (alguna vez citado en este blog), nada sospechoso de ser defensor del creacionismo utiliza el concepto teleológico en respuesta a Dühring cuando le espeta; “Mas ¿qué es la adaptación sin intención consciente, sin mediación de representaciones, contra la que tanto se indigna, sino precisamente una acción teleológica inconsciente? Al parecer Engels no se andaba con remilgos, ni tan siquiera tenía miedo a utilizar este concepto filosófico para describir lo que Darwin pretendía demostrar.

    Engels continúa diciendo; “Darwin se preguntó entonces si no existen en la naturaleza causas que —sin la intención consciente del criador o cultivador— tengan que producir a la larga en los organismos vivos alteraciones análogas a las que produce la cría artificial”. Está claro que, la SN es una metáfora que sirve para constatar que existen causas naturales que inciden en los organismos, pero es también evidente que la metáfora sólo constata que existen causas naturales y, que éstas son principalmente exógenas (hábitat) que mueven presumiblemente a los organismos vivos a evolucionar.

    El problema que se suscita es convertir una metáfora vacía en mecanismo evolutivo (sin par) que justifique el proceso de transformación (especiación) de los organismos, esto es lo mismo que no decir nada, puesto que las causas que intervienen son múltiples. Pienso, que el hábitat condiciona, pero los organismos no son un mero efecto pasivo, sino sus principales protagonistas. Sin ellos, no hay selección natural que valga. A este respecto y siguiendo con Engels, este sostiene;
    “Es verdad que al tratar de la selección natural Darwin prescinde de las causas que han producido las alteraciones en los individuos particulares, y trata por de pronto del modo como esas desviaciones individuales se convierten progresivamente en características de una raza, variedad o especie. Para Darwin se trata por de pronto no tanto de descubrir las causas —que hasta ahora son en parte desconocidas del todo, y en parte sólo aducibles muy genéricamente— cuanto de establecer una forma racional según la cual se consolidan sus efectos, cobran importancia duradera. El hecho de que Darwin haya atribuido a su descubrimiento un ámbito de eficacia excesivo, que le haya convertido en palanca única de la alteración de las especies y de que haya descuidado las causas de las repetidas alteraciones individuales para atender sólo a la forma de su generalización, todo eso es un defecto que comparte con la mayoría de las personas que han conseguido un progreso real”. Es evidente que Engels lo único que pretende es colocar a Darwin en su justo lugar, posicionándose en contra de las desacertadas críticas que Dühring vertía.

    Consecuentemente, la selección Natural es meramente una generalización que no explica las causas que intervienen en el proceso evolutivo, sino más bien, provoca una confusión conceptual que impide avanzar en el conocimiento de las mismas. La SN, al menos desde mi punto de vista, se asemeja al concepto panteísta del Dios de Heráclito (ciclo destructivo y productivo), donde la naturaleza selecciona y destruye a los no aptos, mientras que, preserva y fija aquellas características que son favorables a “ciertos” organismos mediante un proceso gradual e histórico. No puede ser que la SN (condicionantes exógenos exclusivos) sea la única causa que actúa sobre los seres vivos para transformarles, apareciendo estos como meros sujetos pasivos que se mueven al son de la divina SN.

    Naturalmente que no estoy de acuerdo con el gradualismo (acumulación cuantitativa), así como con la prepotencia del azar. Pero de esto, supongo, será para objeto de otro debate. Saludos.

  16. Buen trabajo, Tontxu:
    Aprovechando tu conocimiento te quisiera preguntar una cosa que me intriga. Resulta que hay muchos (como Engels hasta llegar a Oparin, por el lado marxista) que sin atender a la SN de los neo-darwinistas hablan de una finalidad intrínseca a la materia. O sea como un «espíritu» material. El caso es que yo no me explico cómo algo inconsciente puede formar un flagelo o una mente humana, o coordinar la vida en Gaia para que el conjunto reciba su empuje de cada una de las variedades, de tal forma que faltando un elemento quizá la totalidad fuera inviable.
    Yo no encuentro nada intermedio entre una obra consciente, y otra inconsciente. No se si me puedes decir cómo se puede estar entre dos aguas.
    Saludos

  17. Gracias por los últimos comentarios Juan y Tontxu. No sabía que Engels hubiese llegado tan lejos en su atrevida carrera de naturalista.

    Su actitud es ambigua. Muy parecida a la del propio Darwin. Seguro que tienen algo más en común que la ambigüedad.

    Engels Defiende a Darwin porque le interesa su teoría, no como teoría científica que no lo es sino como soporte del materialismo; pero cuando no es necesaria una defensa, se llega a burlar de él como en la correpondencia con Marx.

    ¿Podría por favor Tontxu contarnos algo más acerca de la crítica de Dühring?

    Muchas gracias

  18. Estimado JuanA:

    No se trata de estar entre dos aguas o ser equidistante entre determinadas teorías y/o cosmovisiones. Todas las teorías tienen algo de “verdad” que nos hacen progresar desde que la civilización arrancó con los primeros filósofos.

    No estar de acuerdo con Platón no significa que éste estuviera equivocado en todo. Einstein sobrepasó a Newton, pero se nutrió de él y es de esta forma, negando lo “viejo” para que alumbre lo nuevo, para otra vez volver a negar la anterior negación, acogiendo en lo nuevo parte de lo caduco. Este es el desarrollo, que se asemeja gráficamente a una espiral que suavemente asciende, aunque haya momentos históricos en los cuales se acelere, fruto de los cambios (salto cualitativo) de paradigma, como gustaba decir a Kuhn.

    Me atrevería a decir que estamos, al menos, en biología y en física, en uno de esos periodos históricos donde el cambio cuantitativo (acumulación de conocimiento) se transformará en cualitativo, o nuevo paradigma, aunque el stablisement se empeñe en el inmovilismo. Algo, por otra parte, que ha sucedido lo largo de la historia. Las ideas caducas se resisten en abandonar, aunque al final siempre triunfa lo nuevo. Esto es progreso y estoy convencido que ello es imparable.

    Confidencia por confidencia. No tener miedo a las palabras (remilgo) no significa que Engels sostenga que la materia está contenida de algún espíritu. Engels en su refutación a Dühring utiliza la frase “teleología inconsciente” para describir que la materia organizada contiene unas “leyes” por las que la materia-energía puede alcanzar niveles de complejidad cada vez más creciente, pudiendo pasar de lo inorgánico a lo orgánico y de lo orgánico a lo biológico y viceversa.

    Al fin y al cabo, esta es una de las leyes principales (hay más) del materialismo dialéctico; la transición de la cantidad en calidad (cualidad) y viceversa. Esta es la razón dialéctica por la que no estamos de acuerdo en que la evolución sea exclusivamente gradual (paso a paso, acumulativo), ya que no es posible que solamente mediante la acumulación cuantitativa (de lo que sea) pueda hacer que se transforme un elemento en otra cualidad (léase en este caso especie), si no se da un determinado cambio de fase (salto cualitativo). Así mismo, tampoco estamos de acuerdo en que solamente con las mutaciones (salto cualitativo) pueda darse una transformación (especiación). Se necesitan ambas, para que el desarrollo avance y se dé una determinada transformación cualitativa.

    Para nosotros es necesario tanto la cantidad como la cualidad, ya que lo concebimos como una unidad dialéctica, lo nuevo vence a la viejo, lo transforma, aunque parte de lo caduco lo integre. Esto corresponde a otra ley, la unidad y lucha de los contrarios. Nada de estos dos procesos son ajenos para que se dé un cambio en la naturaleza, sea esta orgánica, inorgánica, biología, social y por tanto histórica. Todos estamos hechos de los mismos mimbres, aunque cualitativamente seamos diferentes.

    Para entender a Engels en su justa medida podríamos decir que éste utiliza el vocablo teleología tal y como ahora se utiliza el concepto de teleonomía (calidad de aparente propósito), que sería lo mismo que decir teleología inconsciente.

    En este foro ya me he definido como materialista y más concretamente como materialista dialéctico, por tanto no creo que la materia contenga ningún espíritu exógeno que la anime, ni tan siquiera estoy de acuerdo con el panteísmo, aunque entiendo y respeto las creencias de los demás. No me resulta para nada ofensivo que se crea en Dios, cada uno es libre de tener su propia cosmovisión, siendo en la confrontación de ideas (debate) donde reside el verdadero valor de cada una de ellas, más la constatación empírica (si es posible) que las objetivice.

    Para el materialismo dialéctico la vida es movimiento (sin ánima), la materia es automovimiento, producto de las contradicciones tanto internas como externas, sin contradicción la vida desaparece. Por tanto, el propio movimiento es en sí mismo una contradicción; ley de la unidad y lucha de los contrarios (tendencia de la negación de la negación) en un desarrollo en espiral interminable. Esta es la dialéctica del desarrollo de la naturaleza, sin ánimas, ni espíritus exógenos a la materia-energía. Ésta es eterna, al igual que para el panteísmo puede ser su Dios, pero sin metafísica.
    La ley de la unidad y la lucha de contrarios es la esencia de la dialéctica.

    Como le has mencionado coloco unas citas de Oparin, para que extraigas de ellas la diferencia entre el materialismo dialéctico (no mecanicista o metafísico) y el idealismo:

    “La Historia nos muestra que el problema del origen de la vida ha atraído la atención de la Humanidad ya desde los tiempos más remotos. No existe un solo sistema filosófico o religioso, ni un solo pensador de talla, que no haya dedicado la máxima atención a este problema. En cada época diferente y durante cada una de las distintas fases del desarrollo de la cultura, este problema ha sido resuelto con arreglo a normas diversas. Sin embargo, en todos los casos ha constituido el centro de una lucha acerba entre las dos filosofías irreconciliables del idealismo y el materialismo.” Oparin continua diciendo: “Ante nosotros se abren perspectivas por completo diferentes si planteamos este problema en términos dialécticos y no de una manera metafísica, basándonos para ello en el estudio de aquella evolución gradual de la materia que precedió a la aparición de la vida y condujo a su nacimiento. La materia jamás permanece en reposo, sino que se halla en constante movimiento, se desarrolla y, a través de este desarrollo, pasa de una forma de movimiento a otras nuevas, cada vez más perfectas y complejas. La vida, concretamente, representaría una forma especial, muy complicada, de movimiento de la materia, que habría surgido como propiedad nueva en una determinada etapa del desarrollo general de la materia”, afirma Oparin y añade: “Ya hacia finales del siglo pasado, (siglo XIX) Federico Engels había considerado el estudio histórico del desarrollo de la materia como el método más adecuado para resolver el problema del origen de la vida”.

    Sin extenderme en demasía, este es el método que empleamos para analizar la realidad objetiva. Es la contradicción inherente que existe en la naturaleza que hace que todo este concatenado, interrelacionado. Parafraseando a Engels; «Pero el movimiento de la materia no es únicamente tosco movimiento mecánico, mero cambio de lugar; es calor y luz, tensión eléctrica y magnética, combinación química y disociación, vida y, finalmente, conciencia». (F.Engels, Dialéctica de la naturaleza). Por tanto, movimiento y materia son inseparables. Darwin simplemente se quedó en el movimiento tosco macanicista.

    Un abrazo.

  19. Estimado Emilio,

    He leído a Marx y Engels profusamente y puedo asegurarte que ninguno de ellos es ambiguo en cuanto a la figura de Darwin y menos aún en cuanto a su hipótesis de la selección natural. Es más, no he visto en las obras de estos pensadores ambigüedad por ningún sitio. Se podrá estar o no de acuerdo con su ideario, pero que pequen de ambigüedad no es precisamente el calificativo que les describe.
    Supongo que te refieres a lo que en su día escribiste, “Como Darwin es utilizado por Engels”, donde haces una severa crítica a Engels, bien por la escasa formación científica o por desconocimiento de la misma.

    Deseo apuntarte que, has descontextualizado el texto de Engels y presupongo que bien pudiera ser por desconocimiento de su obra, así como de los modos de expresión propios de este revolucionario filósofo. También quiero recabar la atención en lo siguiente; las citas que apuntas son unos meros apuntes privados que Engels ni podía imaginar siquiera que estos pudieran ser algún día publicados. Sabrás que los apuntes nunca son rigurosos, tanto en las formas, así como en el lenguaje utilizado. Esta fue la razón por la que no participe en el citado debate (era nuevo por estos lares), y además consideré que no tenía demasiada importancia. Aclarado este punto me ciño a los hechos.

    Considero que tienes otro error cuando aseguras que Engels utiliza a Darwin. Emilio, pienso que tú haces (si fuere así) lo mismo, atacas, en este caso, a Darwin utilizando a Engels. La notable diferencia es que Engels no recurre a Darwin para apuntalar el materialismo, porque Darwin era materialista mecanicista, sino para defender la dialéctica frente a la metafísica que era por aquella época la ideológica dominante. Supongo que la sutiliza no la pudiste entrever, fruto probablemente del desconocimiento de su obra.

    Podrás observar que la edición del libro es de 1925, aunque los apuntes (cuadernos) fueron escritos entre 1875-76. Engels nunca lo publicó porque eran meros cuadernos de apuntes.

    En las notas aclaratorias de la “Introducción a la dialéctica de la naturaleza” [1] dice lo siguiente:
    [1] La «Dialéctica de la Naturaleza»: una de las principales obras de F. Engels; se da en ella una síntesis dialéctico-materialista de los mayores adelantos de las Ciencias Naturales de mediados del siglo XIX, se desarrolla la dialéctica materialista y se hace la crítica de las concepciones metafísicas e idealistas en las Ciencias Naturales.
    En el índice del tercer cuaderno de materiales de «La Dialéctica de la Naturaleza», redactado por Engels, esta «Introducción» se denomina «Vieja introducción». Puede ponérsele la fecha de 1875 o de 1876. Es posible que la primera parte de la «Introducción» haya sido escrita en 1875 y la segunda, en la primera mitad de 1876″.

    Perdón por la tardanza, pero me ha sido imposible contestaros antes. Diciembre y Enero son mis peores meses del año, porque me dejan con muy poco tiempo libre. Un abrazo.

    PD; Si se me hubiere olvidado algo, no duden en hacérmelo saber. Gracias.

  20. Estimado Tontxu,

    Engels recurre a Darwin para argumentar a favor del materialismo, lo mismo que Marx. Lo que ambos sabían y se pone de manifiesto en su correspondencia privada era que los argumentos de Darwin sólo eran válidos para convencer a un pueblo ignorante mediante un arsenal editorial. No eran válidos como argumentos científicos. Esto lo sabían muy bien porque ninguno de ellos, ni Marx ni Engels, tuvo nunca a su disposición argumentos científicos para sostener sus «teorías».

    No he descontextualizado el texto de Engels como dices. He copiado lo que dice y Engels sabía muy bien que el lenguaje de Darwin no era científico.

    Saludos

  21. hola!!!!!!
    solo te queria decir que ¿cual es la relación entre el ciclo de la naturaleza y y la doctrina de las edades?

  22. Muchas gracias por los comentarios. Francamente Camila no sé lo que pueda ser la doctrina de las edades. No me resulta conocida la expresión.

    Suerte y ya nos comentará si se entera usted de algo interesante.
    Un cordial saludo,

    Emilio

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