Locomotora a la luna: Finalidad social de la obra de Darwin revelada en el Historical Sketch en la sexta edición del Origen de las Especies. Segunda parte: La finalidad social de Darwin revelada por Sedgwick
Continúa aquí un resumen del artículo titulado «Locomotora a la luna: Finalidad social de la obra de Darwin revelada en el Historical Sketch de la sexta edición del Origen de las Especies». La primera parte del resumen se encuentra aquí y el artículo completo publicado en Digital CSIC.
Imágenes: Karl Friedrich Burdach, Jean Baptiste Bory de Saint Vicent, de Wikipedia.
Poca ciencia en el Sketch
Ya ha quedado claro que la transformación de las especies no es aportación de Darwin. El mérito de ser el autor de tal aportación a la ciencia, se reconoce en el Sketch, es de Lamarck. Habiendo reconocido en los párrafos segundo y tercero que el mérito es de Lamarck, y que similares opiniones tuvieron su abuelo, Geoffroy Saint-Hilaire y Goethe, Darwin manifiesta a partir de ahí otro objetivo: Exponer entre todos los naturalistas mencionados, cuáles son partidarios de la transformación y cuáles no lo son.
En el párrafo 18 de este sketch se citan conjuntamente a Bory St. Vincent, Burdach, Poiret and Fries. Su final no tiene desperdicio:
From other references in Godron’s work «Sur l’Espece», it seems that Bory St. Vincent, Burdach, Poiret and Fries, have all admitted that new species are continually being produced. I may add, that of the thirty-four authors named in this Historical Sketch, who believe in the modification of species, or at least disbelieve in separate acts of creation, twenty-seven have written on special branches of natural history or geology.)
Indicando que, de los treinta y siete autores mencionados, treinta y cuatro creen en la modificación de las especies. Se deja en manos del lector el resolver quiénes sean los tres que no creen: Posiblemente los dos reverendos (Hon. and Rev. W. Herbert; Rev. Baden Powell) y Aristóteles, en definitiva tan reverendo o más que los anteriores.
Poco importa que en el mismo párrafo los treinta y cuatro autores queden reducidos a veintisiete. En cualquier caso muchos autores han escrito sobre la transformación de las especies antes de Darwin.
Podría ser que la aportación de Darwin consistiera en otra cosa, no en la transformación de las especies sino en la teoría propuesta para explicar la tal transformación: La Selección Natural. Pero ya en el cuarto párrafo queda claro que W.C. Wells, ya en 1818 reconocía el principio de Selección Natural, si bien aplicado sólo a la raza humana y, dentro de esta a ciertos caracteres.
……………………..
Por si fuera poco, párrafos más adelante Darwin cuenta de manera algo tosca su disputa con Owen. Entre otras cosas se trata de la paternidad del concepto Selección Natural, pero en este aspecto no queda lugar a dudas cuando leemos:
As far as the mere enunciation of the principle of natural selection is concerned, it is quite immaterial whether or not Professor Owen preceded me, for both of us, as shown in this historical sketch, were long ago preceded by Dr. Wells and Mr. Matthews.
Pero la paternidad de semejante joya, patrimonio mundial de la ambigüedad, el concepto de Selección Natural no corresponde a Owen ni a Darwin sino, según éste último al Dr. Wells o a Mr. Matthews, salvo que, como veremos inmediatamente corresponda a otro autor muy anterior. Y es que, ya en el primer párrafo de este curioso Sketch, donde su autor dice que Mr Clair Grece, le mencionó un párrafo de Aristóteles, en realidad podría haber indicado que Mr Clair Grece le hizo saber que la selección natural era algo conocido en el mundo antiguo, por lo menos esto es lo que se lee en un letra de Clair Greece a Darwin fechada el día 12 de noviembre de 1866:
“You may recollect me as having some year or two since pointed out to you a passage from Aristotle, shewing that “Natural Selection” was known to the ancients.”
En definitiva y por ir centrando el tema, del análisis del Historical Sketch (en su versión de la sexta edición) se deduce en primer lugar cuáles no eran aportaciones de Darwin: Ni la transformación de las Especies, ni la Selección Natural. En segundo lugar queda claro que la intención de Darwin no es discutir detalladamente la aportación de cada uno de los naturalistas mencionados sino otra….¿Cuál?…….
Ingeniería social: la verdadera aportación de Darwin
Las del Historical Sketch son páginas escritas para cubrir ausencias; más paradójicamente sirven para poner de manifiesto otras ausencias. Quien las lea detenidamente reconocerá la falta de cualquier intención de describir en detalle la aportación de cada uno de los autores mencionados. El fallo de las primeras ediciones (faltaban referencias) es ahora cambiado por otro no menos importante (las referencias no hacen adecuada mención de las contribuciones científicas). Esto tiene ciertas consecuencias. En primer lugar queda claro que la descripción detenida y metódica de la obra de autores anteriores no interesa, lo que importa es otra cosa.
Asimismo queda establecido cuáles no son aportaciones de Darwin: Ni la transformación de las especies ni la selección natural son conceptos originales suyos.
El Sketch no trata sobre la cuestión científica que concierne a los detalles de la transformación de las especies, sino de otra cosa. Se está estableciendo una agrupación, diferenciando entre dos colectivos de autores. Por una parte los que creen en la transformación o que admiten que tal transformación ocurre y por otra parte aquellos autores que no creen o no admiten tal transformación. Éste y no otro es el aspecto que se destaca de cada uno de los naturalistas citados.
Queda definido así el terreno de un debate que no es científico sino socio-político, o lo que es peor el hacer de tal debate algo esencial para la ciencia. Engaño que todavía hoy perdura y mediante el cual la ciencia se esfuma para dejar espacio a una “nueva teoría” que se elevará triunfante. La cuestión en lid es más de filiación dogmática que científica. Como indicó George Gaylord Simpson, la obra “On the Origin of Species by Means of Natural Selection, or the Preservation of Favoured Races in the Struggle for Life” no trata sobre el Origen de las Especies. Trata sobre otra cosa ¿Qué aporta la obra de Darwin? Sedgwick lo expresa claramente en su carta dirigida a Darwin el 24 de noviembre de 1859 cuyo contenido íntegro ha sido obtenido del proyecto Darwin Correspondence y de la cual hemos extraído dos fragmentos (La carta se presenta entera en el apéndice 1 (tomada de http://www.darwinproject.ac.uk/entry-2548):
En primer lugar la aportación de Darwin consiste, para Sedgwick, en abandonar el método científico. Irónicamente expresado en la metáfora “construir una maquinaria tan salvaje como la locomotora del Obispo Wilkins que nos iba a llevar a la luna”. Al menos esto dice en su carta:
You have deserted—after a start in that tram-road of all solid physical truth—the true method of induction—& started up a machinery as wild I think as Bishop Wilkin’s locomotive that was to sail with us to the Moon.
(Usted ha abandonado -después de un comienzo en la ruta de toda la sólida verdad física-el verdadero método de inducción y ha puesto en marcha una maquinaria creo que tan salvaje como locomotora del Obispo Wilkins que nos iba a llevar a la Luna.)
En Segundo lugar, desvincular lo material de lo moral para así brutalizar a la humanidad. Esto se obtiene también directamente de la carta de Sedgwick:
This view of nature you have stated admirably; tho’ admitted by all naturalists & denied by no one of common sense. We all admit development as a fact of history; but how came it about? Here, in language, & still more in logic, we are point blank at issue— There is a moral or metaphysical part of nature as well as a physical A man who denies this is deep in the mire of folly Tis the crown & glory of organic science that it does thro’ final cause , link material to moral; & yet does not allow us to mingle them in our first conception of laws, & our classification of such laws whether we consider one side of nature or the other— You have ignored this link; &, if I do not mistake your meaning, you have done your best in one or two pregnant cases to break it. Were it possible (which thank God it is not) to break it, humanity in my mind, would suffer a damage that might brutalize it—& sink the human race into a lower grade of degradation than any into which it has fallen since its written records tell us of its history. Take the case of the bee cells. If your development produced the successive modification of the bee & its cells (which no mortal can prove) final cause would stand good as the directing cause under which the successive generations acted & gradually improved— Passages in your book, like that to which I have alluded (& there are others almost as bad) greatly shocked my moral taste.
(La visión de la naturaleza que ha establecido admirablemente, admitida por todos los naturalistas y no negada por nadie con sentido común. Todos admitimos el desarrollo como hecho histórico, pero….¿cómo ocurrió? En el lenguaje y más aún en la lógica, somos completamente ignorantes al respecto – En la naturaleza, así como hay una parte física hay también una parte moral o metafísica-. Quien niegue esto estará profundamente en el fango de la locura. La corona y la gloria de la ciencia orgánica, mediante una causa final, enlazará lo material con lo moral, y sin embargo no permitirá que se mezclen ambos en nuestra primera concepción de las leyes, y en nuestra clasificación de dichas leyes si tenemos en cuenta un lado de la naturaleza o el otro. Usted ha ignorado esto, y, si no me equivoco en su significado, usted hace lo mejor que puede para romper este enlace. Si fuera posible (que gracias a Dios no lo es) romperlo, la humanidad, en mi mente, sufriría un daño que puede brutalizarla y hundir a la raza humana en un grado inferior de degradación a cualquier otro en que haya caído desde que su historia se encuentra registrada en escritos. Tomemos el caso de las celdas de la abeja. Si su desarrollo hubiera producido la modificación sucesiva de la abeja y sus celdas (algo que ningún mortal puede probar) la causa final estaría en buena posición como la causa en virtud del cual la dirección de las generaciones sucesivas ha actuado y mejorado gradualmente- Con tales pasajes de su obra, al igual que a los que ya he aludido (y hay otros casi tan malos) sorprendió enormemente mi gusto moral.
Conclusión
Podríamos preguntarnos para terminar si los ciento cincuenta años transcurridos desde que Sedgwick escribió su carta con tan graves acusaciones le habrán dado la razón o por el contrario habrán demostrado que no la tenía. Si el darwinismo habrá sido o no responsable de brutalizar a la humanidad hundiéndola en una degradación nunca antes conocida.
Para José Antonio Zamora, en su libro titulado “Th W Adorno. Pensar contra la Barbarie”, el darwinismo (darwinismo social dice pero yo no veo otro darwinismo que el social) es uno de los elementos emblemáticos de la Modernidad que ciertamente tienen relación con la mayor catástrofe: el genocidio.
Referencias
Burkhardt, Frederick et al. Eds. 2004. The Correspondence of Charles Darwin. Vol 14, 1866. Carta de James Clair Greece a Charles Darwin del 12 de Noviembre de 1866. Página 386.
Darwin, Charles. On the Origin of Species by Means of Natural Selection, or the Preservation of Favoured Races in the Struggle for Life. Ediciones segunda y sexta en Gutenberg.org.
Zamora, José Antonio. Th W Adorno. Pensar contra la Barbarie. Editorial Trotta. 2004. Madrid.