El binomio Con-Con y algunos consejos para escribir el comentario de un libro con un contra-ejemplo reciente de la revista El Catoblepas

 

A la hora de escribir el comentario de un libro (recensión) conviene seguir las siguientes reglas:

 

  1. Leer el libro con detenimiento y atención. Siempre hay que dedicar a la lectura mucho más tiempo que el previsto.
  2. Una vez leído, intentar sintetizar su contenido al máximo. Para ello se responderá  a la siguiente pregunta: ¿De qué trata este libro? Se intentará resumir el contenido en uno o dos párrafos.
  3. Puestos ya a escribir, habrá que tener en cuenta la labor realizada por el autor del libro. Por ejemplo: ¿Ha escrito sobre un tema interesante? ¿Son sus aportaciones originales? En el caso de que el autor haya tenido que realizar una labor extraordinaria o especial, por ejemplo,  tratando una materia cuyo contenido desborda su especialidad, reconocerlo.
  4. Procurar ceñirse al contenido del libro evitando atribuir a su  autor juicios inventados o elaborados por el comentarista. Tampoco es conveniente aprovechar la ocasión para difundir ideas fuera del alcance de los contenidos del libro en cuestión.
  5. Evitar siempre el uso de atributos subjetivos y, en particular, de expresiones molestas y epítetos ofensivos.

 

 

Por su parte, las revistas deben abstenerse de publicar cualquier comentario o recensión que no siga  las reglas anteriores. Además, pondrán especial cuidado en  que los comentarios sean, en la medida de lo posible, independientes; es decir, no muestren tendencia alguna o afínidad con determinadas inclinaciones o finalidades sociales de la revista. En caso contrario, podría dar la impresión de que la revista es un instrumento publicitario en manos de tal o cual ideología, con lo cual el efecto conseguido podría ser su descrédito. Si una revista persiste en tales actitudes, entonces nos recordará mucho a ciertos párrafos de  la novela 1984,  de George Orwell,  en los que se sugiere que el Ingsoc y la Neolengua son herramientas del Partido para manipular el pensamiento. Podrá llegar a parecer, por lo tanto,  que la revista que publique este tipo de comentarios está buscando la  ambigüedad necesaria para que funcione el binomio CON-CON (Confusión-Control), un objetivo que puede asociarse con determinadas formas de poder.  Por ejemplo un párrafo de 1984 dice:

 

The Revolution will be complete when the language is perfect. Newspeak is Ingsoc and Ingsoc is Newspeak,’ he added with a sort of mystical satisfaction. ‘Has it ever occurred to you, Winston, that by the year 2050, at the very latest, not a single human being will be alive who could understand such a conversation as we are having now?’

 

La revolución será completa cuando la lengua sea  perfecta. Neolengua es Ingsoc y Ingsoc es neolengua », añadió con una especie de satisfacción mística. «Se le ha ocurrido a usted, Winston, que en el año 2050, como muy tarde, no habrá  un solo ser humano vivo que pueda  entender una conversación como la que estamos teniendo ahora?

 

 

Dicho todo esto vamos a comentar la recensión que José Luis Pozo ha titulado “Vacuidades en torno al darwinismo”, en la cual este autor pretende haber criticado, desde la postura del Materialismo Filosófico (otro genuino fantasma semántico),  el libro titulado “La Crisis Latente del Darwinismo” de Mauricio Abdalla.

 

 

Antes que nada indicaré que Mauricio Abdalla es filósofo de la Ciencia y ejerce como profesor en la Universidad Federal do Spirito Santo, en Brasil. En la introducción a su libro se tomó la molestia de explicar el origen de su planteamiento y las dificultades por las que hubo de pasar para afrontar temas tan complejos y originalmente ajenos a su especialidad:  El darwinismo y la evolución.  Mauricio Abdalla ha escrito ya una réplica a la recensión de José Luis Pozo y en ella tiene en cuenta,  con su habitual rigor,  algunos de los aspectos arriba mencionados. Esto me permite escribir aquí con mayor libertad sobre la recensión centrándome en sus dos errores principales que son dos facetas de uno mismo. Ya veremos si acierto…..

 

En su libro,  Abdalla aborda una tarea muy precisa: Mostrar aspectos del darwinismo que hacen imposible su pretendida posición como baluarte de teoría evolutiva alguna. Esto encaja plenamente con la propuesta que Thomas Kuhn presentó en su libro “Estructura de las Revoluciones Científicas”, propuesta para la cual se inspiró en postulados de otro autor  menos conocido,  Ludwig Fleck. Así, basándose en Kuhn, que a su vez se inspiró en Fleck, sin ser deudor de ninguno de ellos y metódicamente, lo que hace Abdalla en su libro es,  simplemente,  anunciar la caída del darwinismo. Un acontecimiento que parece molestar a muchos pero que, en contra de lo que vienen diciendo en sus planteamientos,  no dice nada al respecto de la excelente salud de la que puedan gozar otras teorías evolutivas múltiples y variadas que el autor de la recensión seguramente desconoce, puesto que de su lectura se deduce que,  erróneamente,  viene a asociar evolución con darwinismo. Este es su Primer Error Principal (PEP).

El autor de la recensión no reconoce la labor realizada por el autor del libro y, en el caso de que lo haya  leído con atención, no se ha percatado de ese aspecto crucial que Abdalla deja muy claro en su obra: la diferencia que hay entre evolución y darwinismo.  A  la incapacidad para distinguir entre evolución y darwinismo llamaremos, como decía y perdón por la reiteración, Primer Error Principal (PEP). Una extendida costumbre que suele ser la parte más visible de un Gran Error. En su réplica al comentario,  Abdalla señala otras reglas a las que ha fallado el comentarista. En interpretación menos académica que la suya diríamos que el autor se ha pasado  insultando y atribuyendo al texto comentado argumentos inventados a su gusto y conveniencia.

Todo esto dice bien poco a favor de la recensión y de la revista que la ha publicado: El Catoblepas. Pero hay todavía un segundo error principal (SEP), parte menos visible del mismo Gran Error, que  aparece cuando en la recensión surgen voces autoritarias. Por ejemplo, nada más empezar:

 

Tomando la propuesta en su literalidad, con este trabajo queremos mostrar que aceptamos el debate. Y si el autor considera este trabajo, tras su lectura, deudor de tal propaganda, quizá es porque no diferencia el significado de «debate» y de «consenso». Al segundo no se podrá llegar nunca desde estas páginas pues la confrontación con el punto de partida gnoseológico del autor (él la denomina «concepción epistemológica de fondo») es total.

En donde se indica que el autor de la recensión, desde su posición de autoridad, nunca podrá estar de acuerdo con los planteamientos de Abdalla. Por el contrario, se limitará a vencerlo, expulsándolo de sus terrenos cual furioso Catoblepas o Basilisco.

 

No puedo entender cómo un autor incapaz de distinguir evolución de darwinismo (PEP), puede haber escrito la recensión de un libro precisamente basado en tal disyuntiva. Tampoco puedo entender cómo revista alguna admite tal recensión.  A no ser que sus decisiones se tomen desde puntos de vista puramente autoritarios, lo cual quedaría pendiente de demostración de no haber sido precisamente demostrado con la aparición del segundo error principal (SEP), que no es otro que el tono autoritario de la recensión. Es decir que,  más que de una revista estaríamos hablando de un cuartel.  El cabo haciendo la recensión del soldado.  ¿Hemos llegado ya al mundo profetizado por Orwell en 1984? En algunos aspectos, parece que sí.

El darwinismo es como  un iceberg.  Su parte visible consiste en el empeño por parecer idéntico a la Evolución. Pero en un estado excitado, como por ejemplo, sometido a una presión o en un debate, el darwinista puede dar la vuelta mostrando su otra «parte», que es la principal: Su apoyo en la autoridad más auténtica y desnuda, diríamos cuartelera. Tal comportamiento no es exclusivo del darwinismo.

Algunos portavoces de la filosofía académica podrían, poco a poco, haber tomado las riendas y modales del poder y,  desde sus revistas y cátedras intentarían así imponer una auténtica neolengua. La proliferación de fantasmas semánticos del tipo contradictio in adiecto, es decir expresiones sin significado alguno, pero que se repiten hasta la saciedad en el discurso académico, viene a apoyar esta visión. Así, es posible que el fantasma semántico del materialismo filosófico tan mencionado a lo largo y ancho de la recensión, tenga más apego (incardinación podríamos decir también) con ese otro fantasma semántico de la selección natural que es la base del darwinismo, de lo que muchos podrían imaginar. Quizás ambos están encadenados con la misma cadena o incardinados con otra cosa que planea por encima de ambos: La autoridad (SEP).  Nos encontraríamos así que, en algunos casos (no sé si decir muchos), tanto en biología como en filosófía, el diálogo no se rige por la razón sino por la autoridad. Puro Orwell. Ingsoc es Neolengua.

Con autoridad dice Pozo en su recensión:

 

Aunque solo hemos enunciado las aportaciones de los autores en que Abdalla argumenta su tesis, sí consideramos necesario mostrar nuestra postura crítica ante la forma en que presenta tales argumentos, y ello pese a la erudición que constantemente nos muestra en el texto, una erudición muy común en la inmensa mayoría de los departamentos de filosofía, en estos comienzos del siglo XXI. Estos departamentos en su mayoría se dedican a llevar a cabo una tarea de investigación doxográfica, siempre alejada del sistematismo que nos procure un aparato completo, un sistema, como lo es el del materialismo filosófico. Así pues, las argumentaciones de Abdalla están alejadas totalmente de lo que consideramos que es una tarea seria para hacer filosofía.

Demostrando que quien no se exprese, como él, en neolengua, queda fuera de juego, arrestado o fuera del cuartel. Pero además demostrando la  incomodidad de su autor por dos razones: La erudición de Abdalla y el tipo de su investigación calificada aquí como Doxográfica.  Despreciando la Erudición (dato curioso pero importante), contrapone el autor doxografía con sistematismo. No lo entiendo bien porque doxografía no está en el diccionario (sistematismo es lo que se ajusta a un sistema) pero sospecho que al autor le gustan poco las palabras con un significado claro (Erudición) y que, por el contrario algunas de sus expresiones favoritas, incluyendo el mismísimo Materialismo Filosófico y su Plana Mayor,  podrían ser, como decía, fantasmas semánticos. Pura neolengua. Ingsoc.

Dicho de otro modo, que el autor más que criticar libro alguno, viene aquí a hacer propaganda de su propio sistema: El Materialismo Filosófico,  el Ingsoc, la  Neolengua,  que, aunque escrito con minúsculas en el comentario, bien merecería mayúsculas.  Otro fantasma semántico primo hermano de la selección natural.

Para terminar y confirmando lo dicho,  vamos a buscar en qué consiste la conclusión de la recensión, o, dicho de otra manera a ver si Pozo tenía algo que decir:

Final: a modo de conclusión

Lo primero que debemos señalar aquí es que, si idealista consideramos a Kuhn y su teoría de las revoluciones científicas, idealista consideramos también a sus seguidores en cualesquiera sean los departamentos de las facultades de filosofía de cualesquier lugares del mundo. Entre ellos por tanto consideramos a Mauricio Abdalla (pese a tratar de ofuscar a lo largo de todas las páginas el punto de partida ideológico) y su tesis sobre el cambio de paradigma darwinista en el siglo en que estamos viviendo. Abdalla no tiene en cuenta que lo más fértil de la teoría de la evolución seguirá siendo valioso pese a los posibles cambios que la teoría sufra con el paso del tiempo, los cuales no tendrán porque ser drásticos, revolucionarios. Por otra parte su defensa de la armonía en la naturaleza como fundamento del nuevo paradigma biológico, que augura surgirá en el siglo en que ya estamos viviendo, no nos parece relevante. Ni la gnoseología kuhniana ni el apoyo buscado en los distintos autores que cita van a poder destruir lo que el darwinismo soporta como valioso y que seguirá siendo importante en el futuro pues, como afirma la teoría –circularista, y no rupturista– del cierre categorial, el desarrollo científico es tal por desarrollarse a partir de los logros más firmes ya dados. Dejar estos de lado a cambio de creer en la bondad del dialogo o en realidades metafísicas hacen un flaco favor a la posibilidad de conocer lo que nos rodea.

Y pregunto: ¿Qué será lo más fértil de la teoría de la Evolución? Puesto que si el autor lo trata en su conclusión final y es tan importante, lo menos que podría hacer sería decirnos de qué se trata. Pero no, no lo dice. No se preocupen,  yo se lo diré…

Lo más fértil de la teoría de la Evolución  será,  si no lo evitamos antes de 2050, la libre producción de fantasmas semánticos que permite manipular libremente la opinión del ciudadano y controlar su pensamiento: La Selección Natural, la selección inconsciente, El materialismo filosófico,  son buenos ejemplos de ello. Recuerden:

 

…..no habrá  un solo ser humano vivo que pueda  entender una conversación como la que estamos teniendo ahora……………..

 

La Teoría de la Evolución, mediante la Selección Natural, su prima  la Filosofía Materialista y otros parientes fantasmas, aportarán las herramientas al servicio del poder para adoctrinar a sus súbditos.  Ejemplos del diccionario de la Neolengua que nos demuestran que los tiempos no pasan en balde y podríamos ya estar viviendo en la realidad anticipada por Orwell en su novela 1984.  Otro autor poco sistemático.

 

 

 

Compartir:

12 comentarios

  1. Lo de Orwell me recuerda también a Reich, dejo un extracto de Análisis del carácter:

    «…pero en la plaga emocional, la conclusión está siempre hecha antes del proceso pensante; el pensamiento no sirve, como en el dominio racional, para llegar a la conclusión correcta; por el contrario, sirve para confirmar una conclusión irracional preexistente, así como para racionalizarla. Esto se denomina por lo general prejuicio, se pasa por alto que este prejuicio tiene consecuencias sociales de considerable magnitud, que está ampliamente difundido y es prácticamente sinónimo de lo que llamamos “inercia y tradición”; es intolerante, es decir, no admite al pensamiento racional que podría eliminarlo, por tanto, el pensamiento de la plaga emocional es inaccesible a los argumentos; tiene su propia técnica dentro de su propio dominio, su propia lógica, por así decirlo; por este motivo, da la impresión de racionalidad sin ser en realidad racional.»

    Saludos

  2. Exacto Jesús, el mecanismo Con-Con implica el mismo retroceso al periodo emocional, pre-racional, que indica Reich. Al establecerse Con-Con, impone la necesidad de policías y de gurúes, más no soporta posturas racionales. Surge así en 1984 la Policía del Pensamiento.

    Gracias por leer una entrada tan larga. No están los tiempos para tanta lectura ¿Verdad?.

    A ver cuando saco un rato y voy a sentarme a su fuego que hace tiempo que no paso por ahí.

    Un cordial saludo,

  3. «Es característico de la plaga emocional necesitar el garrote del policía y así reproducirse. No obstante ello, a pesar de la amenaza a la vida que representa, nunca podrá dominársela mediante el garrote…»

    No me parece una entrada larga: este tipo de lecturas me resultan muy gratificantes, por eso visito tu bitácora a diario.

    A propósito, deconstruir fantasmas semánticos está muy bien, sobre todo porque hay una retahíla de ellos esparcidos por todas las ramas del no-saber. Intuyo que ya se podría escribir la primera edición del diccionario de la neo-lengua.

    Sigue Reich: «Podemos preguntar qué es lo que permite reconocer una reacción de plaga y distinguirla de una reacción racional. La respuesta es la misma que cuando se trata de diferenciar entre una reacción de carácter neurótico y una reacción racional: en cuanto tocamos los motivos de la reacción debida a la plaga, aparecen inevitablemente la angustia o la cólera…»

    Darwinismo no es evolución.
    No puede haber selección sin intención, sin preferencia.

    Cordiales también

  4. Hola Jesús,

    Orwell se quedaría pasmado de ver hasta qué punto 1984 es reflejo de la realidad actual. El diccionario de Neolengua se llama Wikipedia. Lo que Orwell no sabía era que quienes lo escriben son los proles. Las nuevas tecnologías hacen posible una edición única y continuada con lo cual desde el día que se fundó hasta hoy pasa por una primera y única edición constantemente ampliada por los proles y corregida por la policia del pensamiento a toda velocidad.

    Fantasmas semánticos llevo unos cuantos recogidos. Le copio algunos y si se le ocurre algún otro sérá bienvenido. Sólo falta ir introduciéndolos en la Wikipedia, algunos ya están.

    Veamos: Selección inconsciente, selección natural, filosofía materialista, competición democrática, soberanía popular, experimento mental, deuda soberana, magia natural, física sobrenatural, realismo mágico, negroblanco (éste es de Orwell),…. tengo algunos más pero ahora no me acuerdo. No importa, en cada telediario escucho un par de ellos nuevos. No se olvide: en el 2050 nadie entenderá lo que estamos diciendo.

    Me empiezo a aficionar también a las telepantallas,

    Un saludo afectuoso,

  5. Si, quería decir un diccionario crítico de la neo-lengua.

    A mi se me ocurren ahora mismo: Democracia representativa, violencia de género, inteligencia emocional, revisionismo histórico, heregías científicas…

    Saludos

  6. Efectivamente, Jesús. Buenos ejemplos. Sobre alguno de ellos hay libros ya escritos y seguro que algunos están ya en el diccionario de neolengua. Otro día miraré,….
    Pasan a la lista creciente, gracias

  7. Estimado Sr.Cervantes:
    Hace unos meses tuve ocasión de leer los escritos del Sr. Máximo Sandín, y a partir de ahí, acabé llegando a este blog. En términos generales estoy bastante de acuerdo con los planteamientos de ambos, sobre todo, en lo referido al darwinismo.
    Por otra parte, aunque mi formación es «de ciencias», lo cierto es que mi manera de pensar no es digamos científica. O por lo menos de la ciencia que se hace hoy en día, totalmente mediatizada por los poderes fácticos. Una ciencia con unos “científicos” en los que lo que más llama la atención es la falta de humildad y de amplitud de miras.
    En mi modesta opinión, el universo es tan grande, su historia tan gigantesca, y los seres vivos (incluidas las bacterias), unas «cosas» tan asombrosas, que reducirlo todo a lo que hoy día dice la ciencia me parece soberbio y ridículo. Todas las teorías científicas pasadas, han caducado. Esperemos que pronto lo haga el darwinismo; pero no solo por la parte “científica”, sino, sobre todo, por las terroríficas consecuencias que tiene, al ser el sustentador del capitalismo salvaje que impera hoy en día, y que nos ha llevado hasta donde estamos ahora mismo.
    Respecto a esta entrada, tengo que confesarle que me he sentido bastante aliviada al leer los comentarios suyos y del Sr. Romero, pues hace muchos años que no entiendo nada de lo que cacarean los medios de comunicación, tanto de masas como científicos, y por lo que dicen ustedes, puede que no sea un defecto mío, sino que simplemente es que veo que el emperador va desnudo.
    Reciba un cordial saludo
    Ana

    PD: Aunque no estoy de acuerdo con todo lo que dice, si tiene la posibilidad, le sugiero que se interese por los escritos del Sr. Daniel Estulin. Sobre todo su último trabajo sobre el Instituto Tavistock, donde en medio de algunas barbaridades, sin embargo, hay detalles muy útiles que rescatar, sobre el trabajo que realizan las élites en lo que usted denomina Confusión-Control.

  8. Estimada Sra Lasheras,

    Bienvenida al blog y muchas gracias por el comentario. Me alegra poder ser de alguna utilidad. Le agradezco también la recomendación del libro del Sr Estulín sobre el Instituto Tavistock. Habrá que leerlo.

    Un cordial saludo,

    Emilio

  9. Gracias señor Pozo y disculpe por el retraso en contestarle. Me va a permitir una pregunta:

    ¿Usted cree que la expresión materialismo filosófico es un fantasma semántico? A mi me lo parece. Igual que selección natural. Ese tipo de expresiones que emplean algunos intelectuales para entontecer a la masa.

    Le agradeceré me responda brevemente si tiene ocasión.

Deja un comentario